La opinión de los deportistas de élite acerca de la gestión del deporte universitario en España

Abstract

La gestión de la práctica deportiva dentro de los centros universitarios españoles corresponde a los Servicios de Deportes, unidades administrativas que dependen de un Vicerrectorado en concreto y suelen regirse por un director. Estos departamentos se encargan de la promoción, organización y desarrollo de todas las tareas vinculadas al deporte dentro de su ámbito de competencia, teniendo como finalidad principal la formación integral del alumno a través del deporte. La política deportiva universitaria persigue la configuración de un programa centrado en las necesidades de sus alumnos, tanto a nivel de actividades deportivas, instalaciones como de ayudas al estudio y otros servicios complementarios. De esta forma, los alumnos deportistas de élite, reconocidos como deportistas de alto nivel o rendimiento por el Consejo Superior de Deportes que cursan estudios superiores, son los principales agentes implicados en el deporte de los centros universitarios.
Con el objetivo de conocer la valoración que lleva a cabo este colectivo de la gestión de los departamentos deportivos universitarios en España, se ha entrevistado a 28 estudiantes deportistas de élite mediante la metodología cualitativa del estudio de casos.
A nivel formativo, los universitarios deportistas de élite cuentan con diferentes ayudas al estudio para solventar sus problemas con el calendario académico y deportivo; manteniendo relaciones directas con el Servicio de Deportes. Por el contrario, el departamento no les obliga a cumplir unos objetivos anuales, ni tampoco establece convenios de colaboración con sus clubes deportivos. Además, las becas de rendimiento son escasas y no suelen tener compañeros de apoyo al estudio.
A nivel deportivo, el modelo universitario está orientando al deporte para todos más que a la competición. Aunque se dispone de unas instalaciones deportivas que convendría mejorar y que los sujetos de la muestra no suelen utilizar, valoran positivamente el poder hacerlo. Por último, consideran mejorable la gestión de la atención médica y el patrocinio ya que, por norma general, tienen que encargarse de ello personalmente.