Miguelito, Miguel Alvarado Alejo, estuvo ligado al
devenir de la historia de la Escuela de Física y
posteriormente del Instituto de Física de la
Universidad Autónoma de San Luis Potosí. Esta
relación se extiende a casi cincuenta años en las que
escribió innumerables momentos de camaradería y
alegría.
Este tercer volumen de la serie de crónicas de El
Cabuche, publicadas en el Boletín de Información
Científica y Tecnológica El Hijo de El Cronopio,
recoge aquellas crónicas en las cuales aparece, sea
como una ligera mención o como el eje de la propia
crónica, la figura de Mike, personaje ineludible al
contar historias relativas a la entonces Escuela de
Física, posteriormente Facultad de Ciencias y del
Instituto de Física, instituciones a las que estuvo
ligado la mayor parte de su vida.
Algunas de las crónicas han sido publicadas en el
primer volumen de la serie, Locuras… que hicieron el
día y, replicadas en el presente volumen, que pretende
recoger la mayoría de las crónicas que a lo largo de
veintidós años han aparecido en el Boletín. Mike decía
que el Boletín era un pasquín. Sabía, pues se lo había
advertido, que tarde o temprano se editaría un
volumen sobre él. Este volumen, por lo tanto, está
dedicado a preservar la memoria de Miguel Armando
Alvarado Alejo, el Dr. Barbahan. El título, como ha
sido común en estas sagas, se basa en la poesía hecha
canción de Silvio Rodríguez.
Caminando fui lo que fui. Barbaján su paso por Física
dedicado a la memoria de Miguelito