Content uploaded by Mauricio Sepúlveda Galeas
Author content
All content in this area was uploaded by Mauricio Sepúlveda Galeas on Jan 13, 2021
Content may be subject to copyright.
LA IRRUPCIÓN DE LAS DROGAS SINTÉTICAS
COMO TECNOLOGÍAS DEL CUERPO
Mauricio Sepúlveda Galeas
Sebastián de la Fuente Espinoza
as drogas orman parte de nuestra cultura.
Lo mismo que hay buena y mala música,
hay buenas y malas drogas. Y, por tanto,
del mismo modo que no podemos decir que
estamos ‘contra’ la música, no podemos de-
cir que estamos ‘contra’ las drogas. (FOU-
, , p.
INTRODUCCIÓN
ace dcadas que el prolema de las drogas ue definido
por la comunidad internacional como un problema mundial.
El escenario principal lo ha ocupado las drogas ilegales ge-
neralmente aricadas a partir de la extraccin de principios
vegetales tales como la cocaína, la eroína, entre otras. in
embargo, la producción, venta y consumo de drogas ilegales ha
innovado este mercado subterráneo con la presencia de las lla-
madas drogas de síntesis, cua principal característica es que
son ármacos aricados en laoratorios a partir de productos
de química industrial.
a gran maoría de estos ármacos ueron utilizados ini-
cialmente como tecnologías mdicas al interior de regímenes
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 209 23/11/2020 16:15
210
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
terapéutico y como dispositivos de exploración en el campo de
los saeres si. o ostante, tras su retirada del mercado
oficial, siguieron su produccin en laoratorios clandestinos
comercializándose en su mercado como drogas recreativas.
ste enmeno de desviación farmacológica ,
incide en las políticas de administracin de la vida mediando
en el proceso de traduccin , de las tecnologías
mdicas como tecnologías de la vida. , ás an, se
trata de procesos de subjetivación que articulan procedimien-
tos armacolgicos semiticotcnicos , uti-
lizando al cuerpo como la plataorma viva de materializacin de
este ensamlaje írido.
Ahora bien, y pese a las discontinuidades observadas en
la economía cultura de las drogas, la investigacin social de-
sarrollada, en su maoría adscrita a enoques tradicionales,
ha soslayado la problematización onto-epistémica relacionadas
con el objeto y campo de las drogas en relación a la emergencia
de una nueva armacopea la reconfiguracin de su paisa-
je. alvo onrosas excepciones, enmenos como la desviacin
armacolgica, su inscripcin en la armacotopia moderna, sus
discontinuidades y el ensamblaje de éstas con los procesos de
subjetivación emergentes, que escasamente han sido aborda-
dos por la investigación en materias de legalidad y salud pú-
blica.
Es en el marco de esta carencia, a solicitud del Servicio
Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de
rogas lcool del oierno de ile, el ao
se llevó a cabo un estudio cualitativo de caracterización de la
l trmino desviacin armacolgica, filtracin armacolgica o ármacoa-
sociacin a sido utilizado para descriir el proceso de desvío de los medi-
camentos del espacio terapéutico a otros espacios. En la misma dirección,
tamin es utilizado para el estudio de las redes comerciales de los árma-
cos y el conocimiento que los usuarios de estas sustancias comparten a
travs de sus intercamios inormales, de inormacin de las sustancias
mismas.
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 210 23/11/2020 16:15
211
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
población consumidora de drogas sintéticas. La investigación,
situada en un paradigma antirepresentacionista ,
una orientacin etnográfica, se as en el análisis de uentes
secundarias, revisin iliográfica, oservacin participante
no participante, entrevistas grupales e individuales tomando
como grupo de reerencia jvenes usuariosas de drogas sin-
téticas.
En términos generales los resultados mostraron que los
usuarios de estas drogas mantienen una relación de consumo
que ecer denomin como consumo recreativo o con-
sumo por placer, a saber, una ética en el consumo en donde la
práctica es algo relativamente casual con el fin determinado
de alcanzar un estado recreacional. , s en ese
marco, que sugerimos que las drogas de síntesis devienen en
tecnologías del cuerpo, en plataormas semiticomateriales a
partir de las cuales los usuarios reproducen ficciones corpo-
rales y (re)politizan su experiencia.
En el presente texto, dicha investigación, aun inédita, cons-
titue una plataorma empírica a partir de la cual a sido po-
sile articular las reflexiones tericoempíricas que aquí son
expuestas. En este sentido, el presente documento, no tiene
por propósito presentar sus resultados. Tal como observarán
en el capítulo , se an utilizado algunos ragmentos narrati-
vos con el ojetivo de ilustrar las reflexiones que en los aparta-
dos precedentes son expuestos.
FARMACOTOPIA Y MODERNIDAD: RUPTURAS Y DISCONTINUIDAD
Las drogas atraviesan nuestra historia y nuestra cultura.
Concebidas canónicamente como naturaleza pura, o como su-
plemento protésico cultural, las drogas no lo solo han contri-
uido a transormar la economía, la legislacin la geopolítica
de nuestro mundo, sino tamin tempranamente ungirán
como tecnologías del cuerpo, acoplándose a la produccin de
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 211 23/11/2020 16:15
212
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
sujetividades marcadas. ara errrida el fármacon,2
esa medicina, ese filtro a la vez remedio veneno a ido intro-
duciéndose en el cuerpo del discurso con toda su ambivalen-
cia. n eecto, esa multiplicidad de sustancias estailizadas en
el significante drogas, como aparatos de representacin, an
configurado una arena de la dierencia, una superficie turia
de figuracin de los otros. onas conusas en las que reina la
opción ineludible de lo incierto, lo enigmático y lo abyecto.
A lo largo de la historia, desde la antigüedad a nuestros
días, el despliegue de la voluntad de saer en torno al árma-
co, en su intento por doblegar la naturaleza ambigua y ambi-
valente que lo reviste, ha tendido a pensarlo como un cuerpo
discreto. En ese horizonte, a inicios del siglo XIX, el discurso de
la verdad respecto el ármaco parece dar un paso undamental
en su propsito de neutralizar o estailizar la naturaleza ugaz
amigua que asta entonces lo define. es que una serie de
acontecimientos científicos culturales, vinculados a la ar-
macología al campo de la literatura respectivamente, van a
converger contriuir a orjar la palara droga con su conno-
tacin decididamente patolgica. ,
n eecto, a comienzos del siglo , los discursos prác-
ticas en torno al ármaco comienzan a ordenarse conorme a
una gramática divisoria a partir de la cual se redefinirán las
coordenadas de lo prohibido y lo impensable, al tiempo que
irán trazando los límites que separarán lo umano de lo mons-
truoso de un lado el medicamento como positividad pura,
del otro, las drogas como negatividad pura. e aí en más, la
invención de nociones como la del poeta moderno Baudelaire,
paraísos artificiales o entidades nosográficas, como toxico-
manías, aitarán el az complejo de relaciones de saerpo-
der que regularán el mundo del ármaco conorme a la dole
az que lo atraviesa.
ara ver más dirigirse a errida .
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 212 23/11/2020 16:15
213
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
n el proceso de deslinde, no solo se va reconfigurar la ver-
dad ontoepistmica del ármaco, sino tamin se reconfigurará
la partición de lo sensible de su experiencia. En este sentido,
la singularidad de los sucesos experimentados a comienzos del
siglo descurimiento de la orfina, de la jeringa ipodr-
mica, etc. en el campo de las drogas, lejos de toda finalidad
monótona, constituyen una ruptura, una discontinuidad en su
uncionamiento, en los conceptos operaciones que lo atravie-
san, así como en las relaciones existentes entre sus discursos
y el contexto material e institucional que lo alberga.
es que la singularidad de este paisaje emergente, radicaría
en la uncin estratgica que la particin del ármaco adquiere
en su acoplamiento al desarrollo del liberalismo como régimen
general de la iopolítica. , , , a n
tal sentido, para la administración de los cuerpos y la gestión
calculadora de la vida, en el cumplimiento de su uncin supe-
rior que será acer vivir, la particin del ármaco constituirá
un acontecimiento extremadamente significativo. sta modu-
lará la relacin entre tecnologías ormas de goierno, con-
virtiendo determinados objetos de conocimiento y experiencias
del cuerpo en un prolema moral, político o jurídico ,
desde las guerras imperiales, las convenciones interna-
cionales, a las narcomáquinas contemporáneas.
En rigor, medicamentos y drogas no son contradictorios,
sino más ien dos lados de una tecnología amplia política
que apuntan al mismo tiempo al control del cuerpo y al gobier-
no del alma. in emargo, la ficcin armacopolítica moderna
persistirá asta fines del rgimen industrial en su deslinde
particin decimonnica. onorme a esta ficcin, la particin
medicamentos/drogas, solo podrá ser transgredida o relativi-
l filsoo argelino aqcues anciere se refiere a la reparticin de lo sensi-
ble como aquel sistema de evidencias sensibles que al mismo tiempo hace
visile la existencia de un comn los recortes que definen los lugares
las partes respectivas. ara ver más dirigirse a anciere .
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 213 23/11/2020 16:15
214
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
zada a consecuencia de un acto de perversión. Y es que desde
esta perspectiva, la totalidad de ármacos arían sido utili-
zados inicialmente como tecnologías mdicas al interior de un
régimen terapéutico o como herramientas de exploración cien-
tífica en el campo de los saeres si. n consecuencia, la trans-
ormacin de su naturaleza nole originaria, será producto de
una torsión social y cultural.
n eecto, en la ficcin istoriográfica egemnica, desde
los usos del ter, los nitritos, la morfina, cocaína, asta las pri-
meras drogas sintticas como el metilenodioximetanetamina
, la desviacin armacolgica será reerida significa-
da como una torsión, una externalidad monstruosa, un ruido,
una criatura bastarda de la noble ciencia que amenaza con
pervertir el sentido originario del ármaco en su az medica-
mentosa. erversin al límite de lo exponencial, toda vez que
cuando stas son retiradas del mercado oficial, seguirán siendo
producidas en laboratorios clandestinos y comercializándose
como drogas recreativas en las zonas turias de la sociedad.
Ahora bien, desde una perspectiva arqueo-genealógica, este
nuevo orden del discurso se extenderá por un largo periodo con
cierta regularidad hasta las décadas posteriores a la segunda
guerra mundial. Precisamente, en la transición a un tercer tipo
de capitalismo, despus del rgimen industrial del cual sería
tributario dicho orden discursivo, una serie de acontecimientos
asociados al capitalismo avanzado industrias ioquímicas,
electrnicas, inormáticas de la comunicacin, entre otros
la puesta en marcha de un nuevo tipo de gubernamentalidad
del ser vivo , , sino determinan, allanarán el
camino para una nueva transormacin armacopolítica.
n eecto, en torno a los setenta se dará inicio a una nueva
mutación en el campo de las drogas que lentamente irá hora-
dando y desestabilizando el orden discursivo hegemónico con
ase del cual, desde inicios del siglo , se aría cimenta-
do la armacotopia moderna. sta transormacin larvada,
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 214 23/11/2020 16:15
215
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
a veces silenciosa, se acoplará a las nuevas dinámicas del tec-
nocapitalismo avanzado ficciones ontopolíticas, tanto trans
como postumanas. n nuevo paisaje somatopolítico asoma
a partir de los setenta y, de acuerdo a nuestra hipótesis de
trabajo, parece cristalizar en la primera década del siglo XXI, a
propósito de la emergencia de las drogas sintéticas.
enominadas como drogas de síntesis, drogas de diseo,
drogas de fiesta o como sugerentemente an propuesto algu-
nos autores drogas emergentes, más allá de sus matices es-
pecíficos derivados de sus distintas denominaciones, lo cierto
es que este grupo de sustancias psicoactivas irrumpirá en la
escena gloal de las drogas, transormando significativamente
su orden discursivo, el campo de la experiencia y sus prácticas
de gobierno.
n eecto, la geograía altamente camiante del mercado
de las drogas sintéticas, su originaria y continua desterritoria-
lizacin, su economía en red al mismo tiempo prounda o
oscura deepe, su economía transaccional signada por el
bitcoin, las convergencias de la gramática de su mercantiliza-
cin sus políticas de la experiencia, su economía política del
placer ficciones del cuerpo, estos otros enmenos, parecen
converger en un punto una discontinuidad armacotopica la
cual aría desestailizado las racionalidades políticas tec-
nologías de goierno de las drogas.
n total acuerdo con la afirmacin de igarello res-
pecto a que las drogas de o serían, en parte, ijas de la tec-
nociencia. Sin embargo, desde nuestro punto de vista, dicho
enunciado amerita unos pequeos matices, pues despus de
todo, como ien dice el rerán anglosajn, el dialo esta en los
detalles. Ciertamente, hay un pequeño y gran detalle en el nue-
vo paisaje de las drogas en el presente siglo.
ntre el , países reportaron la aparicin
de uevas ustancias sicoactivas a la ficina de
Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC). Espe-
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 215 23/11/2020 16:15
216
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
cíficamente, en se inorm por primera vez a estos or-
ganismos de la existencia nuevas sustancias, rente a un
total de solo en . ntre la maoría de las
sustancias notificadas por primera vez pertenecía al grupo de
los cannainoides sintticos, pero los datos recientes
revelan una tendencia dierente en primer lugar, el nmero de
catinonas sintticas de las que se inorm por primera vez
ue casi igual que el de cannainoides sintticos en se-
gundo lugar, se inorm por primera vez de una gran diversidad
de sustancias que no pertenecían a ninguno de los grupos
principales identificados en aos anteriores, como opioides sin-
tticos, por ejemplo, derivados del entanilo sedantes, por
ejemplo, benzodiazepinas.
En este sentido, si bien el mercado de las nuevas sustancias
psicoactivas se ha caracterizado por el surgimiento sustancias
nuevas, las cuales tienen propiedades químicas o armaco-
lógicas similares a aquellas sustancias que se encuentran bajo
control internacional, estudios recientes están proporcionando
pruebas de que algunos NPS han establecido un mercado por
derecho propio. Prácticamente un tercio de las nuevas sustan-
cias registradas por los organismos nacionales e internaciona-
les, advierten de su carácter inclasificale, desordando todo
parámetro reerencial.
n consecuencia, e aquí nuestra iptesis central, es
posible problematizar la emergencia de estas nuevas sustan-
cias sintticas como productos tecnocientificos excntricos, en
tanto en cuanto su procedencia no es más triutaría de los
procesos de desviacin armacolgica. ás aun, las drogas sin-
tticas emergen de las ruinas de la clínica moderna en tanto
aparato de veridicción, constituyéndose en un acontecimiento
armacopolítico acoplado a un telos singular donde la ciencia
es la nueva religión de la modernidad, en tanto tiene la capa-
cidad de crear, y no solo simplemente de describir la realidad.
,
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 216 23/11/2020 16:15
217
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
sto sería indicativo de una ruptura, o si se quiere una
reconfiguracin extremadamente significativa en lo que emos
denominado armacotopia moderna. iertamente, ello implica-
ría una inflexin, en rigor una ruptura, una discontinuidad en
la configuracin istrica del ojeto campo de las drogas, en
tanto que desestabiliza el hasta ahora lugar estructurante asig-
nado a la desviacin armacolgica, sea primaria o secundaria,
como eje articulador del complejo oerta demanda, relevando
aora procesos de produccin inscritas el margen o al límite del
saer ármacoteraputico, aora reinscrita en una gramática
maquínica experimental del placer el cuerpo. na suerte de
rebelión de cobayas. Pero no cualquier rebelión, pues ahora los
coaas, si uen lo arán para ir de fiesta.
IMAGINARIOS TECNOLÓGICOS Y POTENCIONAMIENTO HUMANO
Como es sabido, el mercado de las drogas sintéticas se ca-
racteriza, entre otros aspectos, por el crecimiento exponencial
experimentado a nivel de su produccin, así como por la inno-
vacin en su oerta. especto a esto ltimo, desde nuestro pun-
to de vista, el carácter innovador de su oerta a sido entendido
de orma mu restringida sesgada, desatendiendo la potencia
de su singularidad.
En términos cognoscentes, la tendencia mayoritaria ha sido
prolematizar el carácter innovador de la oerta de drogas sin-
tticas conorme a una unidad sustancial originaria. n este
sentido, la inteligibilidad de las drogas emergentes se retrotrae
a una episteme de la semejanza. sto significa que el umral
de reconocimiento de las nuevas sustancias, dependerá un-
damentalmente de la similitud, filiacin o linaje de stas con
relacin a unas sustancias de reerencia u originales, las que,
prácticamente en su totalidad, se encuentran bajo control.
ste discurso, a trazado un campo de significacin en tor-
no a las nuevas sustancias sintéticas, habitado por nociones
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 217 23/11/2020 16:15
218
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
tales como enmascaramiento, simulación, sustitución, imita-
cin, relvando un tipo codificacin dual, mediante la cual se a
producido cierta reificacin jerárquica del inomio originalco-
pia. Ahora bien, a la luz de la evidencia, y a modo de hipótesis,
sostenemos que este posicionamiento discursivo, no solo se ha
desestabilizado a propósito de la emergencia de las drogas de
síntesis, sino que además, a aierto la posiilidad para repen-
sar desde otros costados la dualidad original/copia.
l respecto el filsoo espaol ntonio scotado a seala-
do que vivimos en la era de los sustitutos a propósito de la
expansión de las NSP. Sin embrago, más allá del alcance cons-
tatativo de tal enunciado, aquí aogaremos por relevar la un-
ción constitutiva del sustituto o suplemento. Respecto a esto
ltimo, errida enatizará como el suplemente produce
aquello que supuestamente debe complementar. En este ges-
to provocativo, relevará el cómo nuestra naturaleza humana,
no es sino un eecto de negociacin permanente de las ronte-
ras entre lo humano y animal, cuerpo y maquina (PRECIADO,
original el artificio.
l respecto, la iloga eminista araa seala que
las tecnologías del cuerpo que producen al sujeto moderno
se estarían aciendo cada vez más diles, siendo sustituidas
gradualmente por tecnologías de un orden completamente die-
rente que romperían con los dualismos modernos entre el o
lo otro la naturaleza la cultura lo político lo cultural. n
este marco, proponemos entender las drogas sintéticas como
tecnologías del cuerpo inscritas en un imaginario social radi-
cal) del potenciamiento humano.
Conceptualmente entendemos el imaginario como una
creación incesante y esencialmente indeterminada – social-his-
trica psíquica de figuras, ormas e imágenes, a partir de
las cuales solamente puede reerirse a algo. l imaginario no
tiene un ojeto a reflejar, sino deseos a proectar. omo seala
astoriadis en el caso del imaginario, el significado al
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 218 23/11/2020 16:15
219
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
que envía el significante es prácticamente inasile, por defi-
nicin, su modo de ser, es un modo de no ser. dierencia de
lo racional, donde esta distinción también puede ser oscura,
en el caso del imaginario, el asunto es menos simple, porque el
imaginario se da, o se hace visible por sus consecuencias, sus
resultados, sus derivaciones. iríamos que, entonces, produce
más que representa, tendría un sentido proectivo más que
retrovisor. e orma simultánea, no se agota solo como intersti-
cio, sino que es al tiempo presencia organizadora y organizada
et al., .
omo es saido el concepto de imaginario radical será
central en la ora de del filsoo griego astoriadis . on
ello intenta señalar aquella capacidad de hacer surgir como
imagen algo que no es, ni que ue. esde ese lugar que otorga
al imaginario radical establece la relación con lo histórico, lo
social y lo psicológico. El imaginario radical, dice, es como lo
social-histórico y como psique-soma. Como social-histórico, es
río aierto del colectivo annimo. omo psiquesoma es flujo
representativoaectivointencional. l primero lo denominará
imaginario social y al segundo imaginario radical, ambos se
caracterizan porque lo instituido es recibido/alterado constan-
temente, no solo en la actividad consciente de la reflexividad,
sino undamentalmente en la praxis por ello, seala el autor,
siempre habrá descontento e ilusión y en la aceptación surgirá
el desacato y la indignación.
A propósito de estos planteamientos Busino y otros colabo-
radores sealan que mientras mucos an considerado
al imaginario como irrealidad, eflorescencia, superestructura,
astoriadis ve al imaginario en la raíz misma, en la uente de
todo lo que se instituye o se crea, tanto en el psiquismo como
en devenir socioitrico. s la categoría que nos permite esca-
par al determinismo y al recionalismo para aprehender el ca-
rácter genésico de los imaginarios del potenciamiento humano.
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 219 23/11/2020 16:15
220
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
egn ose , las tecnologías del potenciamiento u-
mano se vinculan con los desarrollos en el ámbito de la biotecno-
logía de las ciencias iomdicas de los ltimos aos, las cuales
tendrían en comn el entender la vida umana a nivel molecu-
lar a nivel molecular la vida puede ser diseada. n este nivel,
parece, que no a nada místico o incomprensile acerca de la
vitalidad – cualquier cosa y todas las cosas parecen, en princi-
pio, ser inteligibles, y por lo tanto estar abiertas a intervenciones
calculadas al servicio de nuestros deseos acerca de las personas
que nosotros y nuestros hijos esperamos que sean. Es decir, a
nivel molecular, la vida aparece como una sustancia plenamente
maleable y re-diseñable. Dicho en términos de su telos, estas
nuevas tecnologías ... apuntan a intervenciones que pretenden
mejorar las unciones o características umanas más allá de lo
necesario para mantener la salud, orrando las ronteras entre
lo teraputico lo incremental. , , p.
Ahora bien, si las estrategias terapéuticas convencionales
prometen reestalecer una normalidad, las tecnologías del
potenciamiento van “por más, por lo mejor, por lo ilimitado o,
aunque sea, por lo simplemente distinto que no se verá satise-
cho con el promedio, ni tampoco tomará su sentido de la distin-
ción entre lo normal y lo anormal, o incluso entre lo saludable y
másquesaludale.
, , p. ero, además, el potenciamiento promueve
rendimientos que, al transormar al individuo, lo van dieren-
ciando. s decir, se trata de perormances individualizadoras,
que no uscarían la normalizacin, sino la personalizacin.
, iensen, por ejemplo, en toda la variedad de sus-
tancias para el mejoramiento cognitivo.
SOMATOTECNOLOGIAS: FRAGMENTOS NARRATIVOS
nalíticamente alando, atender los imaginarios sociales
en torno al consumo de drogas, implica un esuerzo por desve-
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 220 23/11/2020 16:15
221
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
lar las significaciones producidas en sus interacciones, las con-
figuraciones simlicas, las ormas medios que coesionan,
articulan o desarticulan, las líneas de sentido, las repeticiones
que lo producen, las acciones desmesuradas, los gestos a ve-
ces conscientes, otras inconscientes, así como a los discursos
que se tejen trenzan la multiplicidad de ormas de estar en el
mundo. Ello implica un intento por comprender los modos de
subjetivación a partir de los recursos semiótico-materiales que
los sujetos estudiados ponen en juago al calor de sus prácticas
políticas de la experiencia.
l respecto, con ase a nuestro traajo empírico, el análisis
de las narrativas relevo tres tipos de imaginarios sociales
• maginario tecnocientífico
• Imaginario Temporary Autonomous Zone
• Imaginario de potenciamiento.
Imaginario tecno-científico
La presencia de este imaginario social se observa en la
recurrencia de ciertas narrativas en las cuales tanto el obje-
todroga, así como sus prácticas de uso son inscritas en un
orizonte de avances e innovaciones científicos tecnolgicos.
esde el costado del ojetodroga, el significante sinttico, o
sintticas, por oposicin, o dierencia a los ojetos drogas de
carácter natural, o si quiere no manuacturados, como es el
caso del cannabis, inscribe lo sintético en un campo de signi-
ficacin asociado a la química, al laoratorio, a la innovacin
uturista, otorgándole un sentido eminentemente tecnolgico.
Ya a ver, en términos de drogas cuál sería mi primer en-
cuentro con las drogas así propiamente químicas, de la-
boratorio. Déjame hacer memoria porque no me acuerdo,
en realidad yo empecé con la marihuana a los 16 y nunca
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 221 23/11/2020 16:15
222
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
fui muy bueno pa’l alcohol, tampoco era muy bueno para
la marihuana cuando comencé, estoy tratando de hacer
memoria, yo creo que la primera droga así como sintética
que tomé fue el ácido, muy mal ácido que me consiguió
un amigo. ucia, aos, usuaria recuente de drogas
sintéticas)
En su versión más radical, este tipo de imaginario social
codifica la práctica del consumo de drogas sintticas como una
topia uturista, ficcional, proalemente en un dialogo conver-
gente con ciertas ficciones cinemáticas ampliamente diundi-
das en la cultura pop como es el caso de películas como uc o
in ímites, entre otras.
Nunca, a ver, nunca tuve la intención. Siempre he tenido la
intención de probar las drogas a pesar que no tengo una
personalidad adictiva he tratado de echarme lo que sea
que encuentre, siempre que tenga una seguridad sobre
sus efectos y su procedencia ya sea natural o sintético, en
realidad por el ánimo futurista que tengo prefiero las dro-
gas sintéticas. Creo que son el futuro… ndrs, aos,
usuario ocasional de drogas sintéticas)
esde este imaginario social, la reerencia al laoratorio
como espacio-lugar de producción de drogas sintéticas, abre su
significacin más allá de su fijacin reerencial arteactual. n
eecto, desde este imaginario social, el laoratorio se proecta
e implica la experimentación. En este sentido, los usuarios de
drogas sintéticas inscribirán sus prácticas en un universo sim-
bólico en el que su propio cuerpo se extiende como un labora-
torio de experimentación existencial.
Como que, bueno, como que cuando era más chico igual
siempre me interesaba harto experimentar, como estados
alterados de conciencia y leía cosas al respecto, como que
me llamaba la atención comprender el límite de lo que po-
día hacer, cachai. Por eso también yo creo que me metai
a estudiar sicología, como que me interesa eso. Y después
cuando fui cachando también que era muy entretenido
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 222 23/11/2020 16:15
223
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
también empezó a ser algo como más con amigos, cachai,
como más porque me encontraba teniendo amigos que
pensaban lo mismo y como que nos llevábamos mutua-
mente a eso, igual yo creo que era una motivación quizás
más social. Igual hueveaba a mis amigos así como las ma-
más tienen razón así, dicen que como que los amigos te
llevan a las drogas, es cierto, es cierto, los amigos como tú
cachai y tú eres el amigo para ellos, cachai. si, aos,
usuaria recuente de drogas sintticas
ás an, en el límite de este imaginario tecnolgico se deja
entrever una concepción del cuerpo y la experiencia subjeti-
va, aierta a la experimentacin. n eecto, desde el costado
del cuerpo, éste se proyecta como una materia maleable. Una
disposición signada por la plasticidad. Por otro lado, la subje-
tividad, como proceso en construcción, se presenta abierta la
experimentación.
para mí son una forma de hackear el funcionamiento nor-
mal del cuerpo, es como introducir ciertas informaciones
o virus, a través de algún lugar, ya sea la sangre, o fu-
mando. ndrs, aos, usuario ocasional de drogas
sintéticas)
no, con ningún fin, si con el hecho de que el cuerpo funcio-
na como...de cierta maneras, así como la visión general
de cómo funciona un cuerpo, y uno hace funcionarlo de
otra manera con ciertas sustancias po, lo hackeai en ese
sentido. ran, aos, usuaria recuente de drogas sin-
téticas)
Imaginario
Temporary Autonomous Zone
(TAZ)
Las narrativas de los y las jóvenes respecto a sus experien-
cias de uso son habitadas por un imaginario social que permite
inscribir éstas al interior de ciertos espacios temporales en los
cuales se lograría eludir las estructuras ormales de control
social. En este sentido, recuerda la imagen de una Temporary
Autonomous Zone propuesta por e . iertamente esta
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 223 23/11/2020 16:15
224
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
ltima converge de orma significativa con las narrativas de
la experiencia rave. En estas el tiempo y el espacio responden
a lógicas de autoorganización social y hacen hincapié en una
necesaria invisibilidad para huir, escapar de la atención mediá-
tica y del control policial-estatal.
Nada, como que concluyo finalmente que el espacio de la
rave, donde al menos, es un espacio que habito frecuen-
temente, es un espacio que hay que aprovechar para ese
tipo de experiencias y quizás no analizarlo tanto. No es
una fiesta solamente. Yo llegué a ese tipo de fiesta espe-
rando que no sea solamente una fiesta, que sea un espacio
de compartir, un espacio donde se dé como esa posibilidad
de tener una experiencia simultánea, donde podai sentir
la música de otra manera, bailar de otra manera, bailar
solo, bailar con todos al mismo tiempo. Y se banaliza con
el uso, por ejemplo, de copete, que es una droga legal, o el
uso de sustancias que son legales, o vei la droga sintética
como una wea meramente recreativa. Siento que pierde
como ese espacio perdido en el tiempo y se vuelve parte
del espacio, es absorbido finalmente por el espacio de lo
legal y pasa a ser como una fiesta más, ¿cachai? No sé si
me explico. Eso pensaba, como que la droga finalmente tie-
ne que mantenerse como en ese y siempre con un pensa-
miento sobre la hueá que estai haciendo, como “me estoy
tirando esta droga, la estoy usando por esto y voy a cuidar
también a mis amigos, como me voy a cuidar a mí. (Pas-
cuala, aos, usuaria recuente de drogas sintticas
La dimensión socio estética destaca en este imaginario. Su
especial valoracin ace de esta dimensin una cuestin un-
damental en torno a la cual se articulan las experiencias y los
procesos identificatorios de los las usuarias de drogas sint-
ticas.
Claro, pero volviendo al tema de la ketamina, yo me acuer-
do que me juntaba a consumir con gente, igual tengo eso
de que me gusta la estética de las drogas, cachai como
que más que el efecto mismo como que disfruto, siempre
he tenido ese gusto por la marginalidad y como las drogas
están relacionados con eso, no sé, produce una vibración
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 224 23/11/2020 16:15
225
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
en mi sintética, como por ejemplo con la ketamina yo la iba
a consumir en un principio a una casa ocupa con un loco
que la tenía ahí, te picaba el mismo y a pesar que era muy
decadente la imagen a mí me encantó, entrara a ese se-
gundo piso de casa medio abandonada y que estuvieran
las jeringas tiradas y los colchones todos feos. (Conrado,
aos, usuario ocasional de drogas sintticas
Ciertamente, el imaginario de huida a las lógicas de control
social, se materializan de diversas ormas. n algunos casos
estas adquieren la uerza vertiginosa del aile la fiesta. tras
veces, adquiere la orma de límite o margen social. tras, ad-
quirirá la orma de tiempo ocio, el cual se enrenta a las lgicas
productivistas que signan el espacio social del tiempo de traba-
jo sujeto a un intenso proceso de control social.
Estuvimos como gaga mirando el techo, tapaditas, conver-
sando. Y estuvimos así todo el día mirando el techo, con-
versando. osa, aos, usuaria esporádica de drogas
sintéticas)
Sí, exactamente. A veces uno quiere pasarla bien e irse de
este mundo. Rico bailar, hueón. Sentir la música. Bailar,
hueón. Tomar agüita, comerse un caramelo acido, y fumar-
se un porrito para mantenerlo y bailar, hueón. (Pascuala,
aos, usuaria recuente de drogas sintticas
l imaginario refiere tamin a una escena eminente-
mente estiva, que si ien inclue a la rave, no se agota en ella.
sta articulacin del entorno estivo al imaginario potencia
el sentido de experiencia asociada al uso de drogas sintéticas
pues la dota de un halo extraordinario. Y es que independien-
temente de la recuencia real de los consumos de drogas sint-
ticas, lo cierto es que por regla general los usuarios de este tipo
de sustancias psicoactivas inscriben sus prácticas en el marco
de sus prácticas de ocio. quí ará que entender el ocio como
toda actividad placentera, elegida voluntariamente en el tiempo
de no-trabajo.
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 225 23/11/2020 16:15
226
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
Yo diría, o sea como que en ese momento no era conscien-
te, claro, pero si es que tengo razón y fue a finales del año
pasado… justo había defendido mi tesis, estaba relativa-
mente desempleado, no tenía responsabilidades económi-
cas fuertes, por tanto podía salir harto, además estaba
con harta angustia, estaba con mucha incertidumbre, de
tipo amorosa, de futuro académico, en fin de hueás… claro
entonces, como que carreteaba, creo que eso es la razón …
pienso que en general… incent, aos, usuario espo-
rádico de drogas sintéticas)
El uso de la droga tiene que ver con los fines de semana,
viernes, sábado, jueves incluso, depende igual de la pega,
y solo me queda tiempo en la semana los fines de semana.
oaquín, aos, usuario esporádico de drogas sintticas
a centralidad del ocio estivo en la vida de los las jve-
nes entrevistados resulta un dato undamental. erá en el ocio
estivo donde los jvenes puedan sentirse realizados, afianzan-
do su identidad tanto personal como colectiva. Ciertamente, no
debemos olvidar que los y las jóvenes realizan sus aprendizajes
por medio de un proceso condicionado socialmente a través de
la cultura, y esta cultura es, en buena medida, una cultura del
ocio, del entretenimiento del disrute, sin duda, del consumo.
Sí absolutamente, yo me siento muy protegida en el tecno,
muy… o sea voy con las cabras y podemos ir … antes yo
no salía en peto, me gustaba estar con la hueá al aire, pero
no salía en peto porque todos me iban a mirar a mí, ahora
todas las cabras salen en peto, ahora me empecé a poner
peto porque pico, ahora no por eso me van a tocar las pe-
chugas ¿cachaí?... ran, aos, usuaria recuente de
drogas sintéticas)
Es el vivir como situaciones inesperadas y locas y bohe-
mias, como vivir como aventuras en una noche, cachai.
Siempre los carretes donde hay drogas son como capítulos
cachai, como una historia entretenida donde parten en un
lugar y hay personajes y hay climax y hay todo cachai, y es
como salir un poco del mundo real y vivir un capítulo en una
noche de fantasía, cachai. Eso me gusta, le encuentro como
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 226 23/11/2020 16:15
227
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
mucha belleza, estética también, fantasía, como en las dro-
gas. si, aos, usuaria recuente de drogas sintticas
No, de hecho, me pasó por mucho tiempo, que no compren-
día porqué la gente se calentaba como con el éxtasis, tam-
bién tenía un drama con eso, cachai?, entonces como todas
esas cosas para mí eran como, entender por qué pasaba
tales cosas, qué es lo que yo siento a través de las drogas,
por qué me hacen sentir así. Entonces toda esa wea fue
como aprender de a poco, porque me costó, como te decía,
era muy niña para todo, para absolutamente todo, enton-
ces cuando me decían así como “ay! yo me caliento con
esta wea y no sé qué”, y era como, a mí nunca me pasaba
esa wea, hasta que obviamente pasaron ciertos destapes
en mi vida, y fueron como “wuau”, brígido, y ahí empecé
como a entenderlo mucho más, pero al principio era como
mucho más recatada en ese aspecto. ndrea, aos,
usuaria recuente de drogas sintticas
Imaginario de Potenciamiento
El potenciamiento es el modo en que los usuarios se ad-
ministran una droga para modificar o aumentar sus capa-
cidades susceptibles de producir un mejoramiento sobre las
propiedades generales del cuerpo. El potenciamiento como
ideal a alcanzar es una intoxicacin voluntaria característica
del xtasis del cual se espera lograr como uncin alcanzar un
estado de optimizacin en el rendimiento de las unciones ísi-
cas, servir como estimulante para aguantar la noche y seguir
en el espacio estivo, sore todo del aile.
Sí, es que la pastilla la muerdo, es como para tener ese…
Es para despertar un poquito. ascuala, aos, usua-
ria recuente de drogas sintticas
stos eectos de optimizacin son perciidos por los usua-
rios cmo una orma de modificacin que no slo remiten a las
capacidades corporales sino tamin a la aricacin de equi-
pamientos sujetivos más sofisticados que capturan de mejor
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 227 23/11/2020 16:15
228
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
modo los eectos sensoperceptivos. e esta orma, una droga
sinttica como el xtasis unciona no slo como un estimulante
del rendimiento ísico sino tamin del placer.
Muchos más activos todos tus sentidos. La visión, el oído,
el tacto. También te agarrai el pelo para tirártelo pa´tras
y es como “¡oh qué rico el pelo!” ¿cachái? ran, aos,
usuaria recuente de drogas sintticas
COMENTARIOS FINALES
A lo largo de texto, nuestro propósito ha sido problemati-
zar la emergencia las drogas sintéticas como productos tecno-
científicos excntricos, en tanto en cuanto su procedencia no
sería más triutaría de los procesos de desviacin armacol-
gica. ás aun, las drogas sintticas, arían emergido de las
ruinas de los aparatos tecnologías de veridiccin asociados
a la clínica moderna. n este sentido, emos sostenido que la
emergencia de estas nuevas sustancias psicoactivas constitu-
en un acontecimiento armacopolítico inscrito en el orizonte
tecnocientífico del mejoramiento umano.
ste nuevo paisaje, orma parte de un complejo más amplio
en el campo de la guernamentalidad iopolítica contemporá-
nea. Aun considerando el exceso de simplicidad que caracteriza
cualquier visión preliminar, diremos que las inquietudes pre-
cedentes sore el goierno de la polacin se aían orientado
inicialmente siguiendo una política de carácter securitarioi-
gienista, en donde toda visión de estabilidad estaba asegurada
por el control de las enermedades patologías que amenaza-
an al conjunto de la polacin. o, en camio, el oco parece
desplazarse cada vez más desde la sita extraa anomalía
acia la gestin misma de la normalidad, undamento que aec-
ta a las posiilidades de su modificacin su respectiva optimi-
zacin o mejoramiento. ,
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 228 23/11/2020 16:15
229
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
En esto, nuestro presente parece indicar un panorama mar-
cado por la presencia de tecnologías que conducen a los sujetos
a varios pasos más allá de las rudimentarias intervenciones ca-
racterizadas por su dimensión únicamente terapéutica. Estas
tecnologías, reconocidas como tecnologías del potenciamiento
u optimización, se caracterizan por su capacidad de interven-
ción sobre el cuerpo humano cuyo propósito es el logro de una
mejoría o potenciamiento en su normal uncionamiento.
l respecto, eatriz reciado enmarcará este nue-
vo periodo de la guernamentalidad iopolítica asociado a un
momento específico del capitalismo contemporáneo, al que lla-
mará con el nomre de armacopornismo, rgimen político que
toma como una de sus principales reerencias a los procesos
de gestión molecular de la subjetividad. Esta molecularización
impondrá un nuevo estilo de pensamiento sobre el cual se de-
sarrollarán subjetividades nómades que transitarán entre el
gobierno y autogobierno que impone todo régimen somatopo-
lítico.
n síntesis, estos cuerpossujetividades ensamlados a
las nuevas sustancias psicoactivas, lejos se encuentran de estar
aislados de la produccin tecnocientífica de la cual participan
son producto, siendo dispuestos como plataormas tecnovi-
vas multiconectadas a sistemas generales de inormacin que
incorporan cada vez más la codificacin del potenciamiento,
acomodando y asimilando en su proceso de materialización
somática estas tecnologías que llamaremos como somatotec-
nologías. stas incitan a un nuevo proceso de productividad,
más acá o más allá de lo normativo.
REFERENCIAS
BASSI, J. Formulación de proyectos de tesis en Ciencias Sociales
Manual de supervivencia para estudiantes de pre y posgrado.
antiago de ile niversidade de ile, .
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 229 23/11/2020 16:15
230
Mauricio Sepúlveda Galeas • Sebastián de la Fuente Espinoza
BECKER, H. Outsiders acia una sociología de la desviacin.
uenos ires iglo eintiuno, .
BEY, H. T.A.Z. The Temporary Autonomous Zone, Ontological
Anarchy, Poetic Terrorism. e or ntonomedia, .
BUSINO, G. et al. Autonomie et autotransformation de la Société La
philosophie militante de Cornelius Castoriadis. enve irairie
roz, .
CASTORIADIS, C. La institución imaginaria de la sociedad. Buenos
ires usquets ditores, .
CLARKE, A. E. et al. iomedicalization ecnoscientific
ransormations o ealt, llness, and .. iomedicine. American
Sociological Review, enasa, v. , n. , p. , .
DERRIDA, J. De la gramatología. adrid iglo editores, .
, . a armacia de latn. In , . La
diseminación. adrid ditorial undamentos, . p. .
FOUCAULT, M. Defender la sociedad urso en el ollge de rance
. uenos ires ondo de ultura conmica, a.
FOUCAULT, M. Nacimiento de la biopolítica urso en el ollge de
rance . uenos ires ondo de ultura conmica,
.
FOUCAULT, M. Seguridad, territorio y población urso en el ollge
de rance . uenos ires ondo de ultura conmica,
.
FOUCAULT, M. Obras esenciales. arcelona aids, .
HARAWAY, D. J. Ciencia, ciborgs y mujeres a invencin de la
naturaleza. adrid átedra, .
LEDESMA, R. Usos no medicos de benzodiacepinas entre
adolescentes pertenecientes a sectores populares de Santiago. .
Tesis (Magìster en Psicologìa) - Universidad Diego Portales, Santiago,
.
LATOUR, B. La enseñanza de Pandora nsaos sore la realidad de
los estudios de la ciencia. arcelona edisa, .
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 230 23/11/2020 16:15
231
La irrupción de las drogas sintéticas como tecnologías del cuerpo
LEMKE, T. Introducción a la biopolítica. uenos ires ondo de
ultura conmica, .
, . od and nancement ecnolog n ntroduction. East
Asian Science, Technology and Society, [s. l., v. , n. , p. ,
.
PRECIADO, B. Maniesto contrasexual. adrid ditorial pera
Prima, 2002.
PRECIADO, B. Testo yonki exo, drogas iopolítica. uenos ires
aids, .
.. , . Beyond
Therapy iotecnolog and te ursuit o appiness. e or
egan oos, .
RACE, K. Pleasure consuming medicine e queer politics o drugs,
uram ue niversit ress, .
RANCIERE, J. El reparto de lo sensible esttitca política. antiago
de ile diciones, .
ROSE, N. Políticas de la vida iomedicina, poder sujetividad en el
siglo . a lata ditorial niversitaria, .
VIGARELLO, G. La droga ¿tiene un pasado? In ,
A. Individuos bajo Inuencia rogas, alcooles, medicamentos
psicotrópicos. uenos ires ueva isin, . p. .
A complexidade da questao das drogas-miolo.indd 231 23/11/2020 16:15