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Manual de Sericultura en Hidalgo: Principios básicos

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La sericicultura es una actividad con historia en México, actualmente diversas instituciones como la Universidad Politécnica de Francisco I. Madero, ubicada en Tepatepec, el Instituto Tecnológico de Huejutla, el Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología de Hidalgo, a través del Fomix, y el Centro de Sericicultura de San Luis Potosí la intentan impulsar, dadas las ventajas climáticas, edáficas y comparativas del país y la posibilidad concreta de crear condiciones competitivas a través de la construcción social. La sericicultura es la combinación de los cuidados del hombre y el trabajo de un gusano poseedor de la invaluable capacidad para producir, con sus glándulas salivosas, miles de metros del finísimo hilo. Con él confecciona su capullo y se protege durante el proceso de metamorfosis que lo lleva a convertirse en una bella palomilla. En México se convierte en una actividad rentable para quienes la practican y no necesita de mucha inversión ni fuerza física, pero sí de la dedicación y cuidados de temperatura, humedad, tiempo y limpieza de las larvas y de las plantas morera, la cual les proporciona el alimento durante su corta vida y les aporta el almidón que transforman en una hebra, que puede alcanzar los 1,500 metros de longitud en cada capullo. Sin embargo, 500 metros de hebra apenas alcanzan a pesar 130 miligramos de seda, por lo que, cada metro convertido en miligramo resulta ser sumamente caro en valor monetario y en esfuerzo. La seda entre otras cosas tiene la cualidad de conservar el calor natural, mientras que las imitaciones, por ser productos sintéticos, son sumamente frías. Entre sus atributos hay que agregar la enorme capacidad de absorción para el agua, los gases y los colorantes, y para cerrar con broche de oro, basta decir que es un magnífico material para aislar los alambres de metal. El presente Manual de sericultura en Hidalgo. Principios básicos, constituye un documento elemental de consulta y orientación para investigadores, técnicos, agricultores y demás personas interesadas en el desarrollo de la sericultura en nuestro país.
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MANUAL DE SERICULTURA
EN HIDALGO
Principios básicos
Dr. Alejandro Rodríguez Ortega | M.C. Jorge Vargas Monter | M.C. Alejandro Ventura Maza
Dr. Aarón Martínez Menchaca | M.C. Juan Rodríguez Martínez | Dr. Muhammad Ehsan Dr.
Francisco M. Lara Viveros
Julio de 2012
“Plantaciones de morera y poblaciones de gusano de seda (Bombyx mori) para su adaptación en
las regiones del Valle del Mezquital, Huasteca y Otomí-Tepehua del estado de Hidalgo” Fomix-
Hidalgo 2009-131264.
El contenido de este manual proviene de las experiencias documentadas en el proyecto Fomix-
Hidalgo 2009-131264, y de la revisión documental de diversas latitudes del mundo.
Fotos: portada, capullos de seda blancos y amarillos y contraportada ciclo biológico del gusano de
seda (huevo, larva, pupa, capullo y palomilla) en su alimento principal que son hojas de morera
(tomadas por el Dr. Alejandro Rodríguez Ortega).
Primera edición: 2012
ISBN: 978-607-9260-01-9
D.R. © 2012
Impreso en México
Distribución gratuita (prohibida su venta)
Servicios editoriales y diseño
Alquimia diseño
Diseño y formación
Laura Delia Varela Michel
Cuidado editoral
Martha Varela Michel
Directorio
LIC. JOSÉ FRANCISCO OLVERA RUIZ
Gobernador del Estado de Hidalgo
Lic. Fernando Quetzalcóatl Moctezuma Pereda
Secretario de Gobierno
Ing. José Pablo Maauad Pontón
Secretario de Desarrollo Económico
Lic. Aunard de la Rocha Waite
Secretario de Finanzas
Lic. Joel Guerrero Juárez
Secretario de Educación Pública
Lic. José Alberto Narváez Gómez
Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural
Dr. José Enrique Villa Rivera
Director General del CONACYT
Mtro. Jorge E. Moreno Díaz
Secretario Técnico Fomix-Conacyt, Gobierno del Estado de Hidalgo
y Director Regional Sur-Oriente del CONACYT
Ing. José Calderón Hernández
Secretario Administrativo Fomix-Conacyt, Gobierno del Estado de Hidalgo
y Director General del COCYTEH
Ing. Juan de Dios Nochebuena Hernández
Rector Universidad Politécnica de Francisco I. Madero, Tepatepec, Hidalgo
Lic. Julio Pérez Espinoza
Secretario Académico de la UPFIM
Lic. Joel I. Valencia Blanco
Secretario Administrativo de la UPFIM
M.C. Sergio Cortez Gamboa
Director de la Ingeniería en Agrotecnología de la UPFIM
Presentación
La sericicultura es una actividad con historia en México, actualmente diversas
instituciones como la Universidad Politécnica de Francisco I. Madero, ubicada en
Tepatepec, el Instituto Tecnológico de Huejutla, el Consejo Estatal de Ciencia y
Tecnología de Hidalgo, a través del Fomix, y el Centro de Sericicultura de San Luis
Potosí la intentan impulsar, dadas las ventajas climáticas, edáficas y comparativas
del país y la posibilidad concreta de crear condiciones competitivas a través de la
construcción social.
La sericicultura es la combinación de los cuidados del hombre y el trabajo de
un gusano poseedor de la invaluable capacidad para producir, con sus glándulas
salivosas, miles de metros del finísimo hilo. Con él confecciona su capullo y se
protege durante el proceso de metamorfosis que lo lleva a convertirse en una bella
palomilla. En México se convierte en una actividad rentable para quienes la prac-
tican y no necesita de mucha inversión ni fuerza física, pero sí de la dedicación y
cuidados de temperatura, humedad, tiempo y limpieza de las larvas y de las plan-
tas morera, la cual les proporciona el alimento durante su corta vida y les aporta
el almidón que transforman en una hebra, que puede alcanzar los 1,500 metros
de longitud en cada capullo. Sin embargo, 500 metros de hebra apenas alcanzan
a pesar 130 miligramos de seda, por lo que, cada metro convertido en miligramo
resulta ser sumamente caro en valor monetario y en esfuerzo. La seda entre otras
cosas tiene la cualidad de conservar el calor natural, mientras que las imitaciones,
por ser productos sintéticos, son sumamente frías. Entre sus atributos hay que
agregar la enorme capacidad de absorción para el agua, los gases y los colorantes,
y para cerrar con broche de oro, basta decir que es un magnífico material para aislar
los alambres de metal.
El presente Manual de sericultura en Hidalgo. Principios básicos, constituye
un documento elemental de consulta y orientación para investigadores, técnicos,
agricultores y demás personas interesadas en el desarrollo de la sericultura en nues-
tro país.
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Prefacio
Este manual se realizó con el trabajo y colaboración de investigadores de la Uni-
versidad Politécnica de Francisco I. Madero. En esta obra se concentra información
indispensable para el establecimiento de la morera y su aprovechamiento en la
actividad sericícola, así como la producción de seda por medio del gusano Bombyx
mori. Su objetivo principal es la promoción de la sericultura como una oportunidad
alternativa y sustentable de producción que permita mejorar la calidad de vida de
las familias rurales.
Está especialmente destinado a productores que deseen incursionar en la ac-
tividad de la sericultura, labor relativamente nueva en nuestro país, sin embargo su
práctica se remonta a más de 5,000 años. A partir de este trabajo pretendemos,
además, crear un banco de información que sirva para la divulgación de esta alter-
nativa de producción agropecuaria.
M.C. Jorge Vargas Monter
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Agradecimientos
Los autores agradecen al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), a
los Fondos Mixtos (Fomix), al Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología del Estado
de Hidalgo (Cocyteh), a la Secretaría de Economía del Estado de Hidalgo, al Insti-
tuto Tecnológico de Huejutla y a la Universidad Politécnica de Francisco I. Madero
(UPFIM), por su apoyo financiero y logístico de esta investigación.
Igualmente agradecemos al Maestro Herminio Baltazar Cisneros (ex rector
de esta casa de estudios) y a los académicos, administrativos y alumnos de las
ingenierías de Agrotecnología y Agroindustrias de la UPFIM; a los académicos y
alumnos de Agronomía y Biología del Instituto Tecnológico de Huejutla y a los
alumnos que realizaron servicio social en este proyecto del Departamento de Zoo-
tecnia de la Universidad Autónoma Chapingo y de la Licenciatura en Gastronomía
de la Universidad Científica Latino Americana de Hidalgo.
Finalmente, hacemos un reconocimiento muy especial a todos los produc-
tores del Valle del Mezquital, de la Huasteca Hidalguense y de la zona Otomí-
Tepehua del estado de Hidalgo por el gran interés y apoyo durante la ejecución del
proyecto y en los talleres realizados en sus comunidades.
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Contenido
1. Introducción 13
2. Generalidades de la morera 14
3. El árbol de morera 16
4. Descripción botánica de la planta 18
5. Variedades de morera en México 26
6. Requerimientos del cultivo 29
7. Métodos de propagación de la morera 32
8. Cultivo y manejo de la morera 40
9. Tipos de podas 45
10. Producción de hojas 48
11. Cosecha 49
12. Plagas 50
13. Enfermedades 53
PARTE II
LA CRÍA DE LOS GUSANOS DE SEDA 57
14. El gusano de seda 59
15. Clasificación taxonómica 59
16. Razas del gusano de seda 59
17. Condiciones ambientales para la cría 59
18. Ciclo de vida 62
19. Manejo del gusano en la fase de crianza 80
20. Producción de capullo 87
21. Limpieza y secado de los capullos 92
22. Plagas 93
23. Enfermedades 93
24. Literatura consultada 97
1. Introducción
La sericicultura o cultura de la seda es una importante actividad agroindustrial que
abarca el cultivo de la morera, la cría del gusano, la producción de huevecillos, así
como la obtención del hilo de seda para la industria textil, el aprovechamiento es de
amplio espectro en diversas actividades de nuestra economía. Actualmente China,
gracias a la abundancia de mano de obra barata que tiene, se ha convertido en el
primer productor mundial de seda, siguiéndole en orden de importancia India, Ru-
sia y algunos otros países de Asia, Europa e incluso Brasil y Colombia en América.
La sericicultura no ha tenido un desarrollo adecuado en nuestro país, aunque
en distintas épocas se han realizado intentos por impulsarla gracias a la amplia
adaptabilidad de la morera para desarrollarse y crecer de manera óptima en las di-
versas condiciones geográficas y climatológicas de nuestro país.
La oruga del insecto Bombyx mori L., comúnmente conocida como “gusano
de seda” es un insecto monófago estricto, es decir, se alimenta única y exclusiva-
mente de hojas de la morera, ya que en ésta encuentra y obtiene todos los elemen-
tos nutricionales necesarios (proteínas, grasas, hidratos de carbono, fibra, vitaminas,
macro y micro elementos, etc.) para su buen desarrollo fisiológico y productivo.
La búsqueda de confort y distinción en las prendas de vestir y el rechazo a los
tejidos sintéticos en ciertos estratos sociales de la población mundial, así como la
demanda de seda en el mercado internacional que se incrementa de manera con-
tinua a pesar de que países altamente consumidores y productores de este insumo
han visto disminuidas sus superficies para el cultivo de morera y, por tanto, la pro-
ducción de tan preciada materia prima.
En la República mexicana, existen condiciones apropiadas para el cultivo y
explotación de la morera, así como para la cría de gusanos de seda y producción de
capullos. Son muchos los sitios del país donde las plantas de morera se desarrollan de
manera excelente; desde el nivel del mar, hasta regiones situadas a 2,800 msnm.
13
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Manual de sericultura en hidalgo
Por todo lo anterior, la sericicultura se presenta como un área de oportunidad,
como una nueva alternativa para la diversificación de las actividades productivas
del campo y que puede contribuir al mejoramiento de los ingresos y condiciones
de vida de las familias campesinas. Aunado a lo anterior, la sericultura es una acti-
vidad noble, ya que para la atención y alimentación de los gusanos de seda no se
requieren grandes esfuerzos físicos o intelectuales, puede realizarse por cualquier
miembro de la familia, incluyendo niños, ancianos o personas discapacitadas, quie-
nes tendrían el orgullo y la satisfacción de poder contribuir con su esfuerzo a la
economía familiar.
En el presente documento se dan a conocer algunos aspectos importantes
sobre el cultivo de morera y la crianza del gusano de seda. Ha sido elaborado con
base en revisiones bibliográficas e investigaciones científicas realizadas en diversas
latitudes del planeta, con el propósito de satisfacer, modestamente, la necesidad
de contar con literatura en español que documenten las experiencias habidas en
este campo y que permitan obtener mejores rendimientos de hojas de calidad para
la crianza del gusano de seda y que originen excelentes rendimientos de capullos
de seda.
2. Generalidades de la morera
2.1 Origen, distribución y ecología
La morera se comenzó a sembrar para la sericultura en los países asiáticos hace
alrededor de 4,500 años. El desarrollo de la sericultura propició el movimiento de
especies y variedades por diversos continentes, por lo que estas plantas leñosas
se distribuyen tanto en las zonas templadas como en las tropicales y subtropicales
(Cifuentes y Kee-Wook, 1998). Por tal razón no se tiene una clara definición de
su origen, muchos autores coinciden en que los principales centros de origen se
encuentran en algunas regiones de China, Japón y al pie del Himalaya (figura 1).
PrinciPios básicos
15
Figura 1. Ruta de la seda.
La morera, por sus condiciones naturales de distribución, posee un amplio
germoplasma formado por una gran diversidad de especies y variedades que cons-
tituyen un valioso recurso genético.
2.1 Taxonomía
Clasificación básica: Clase: dicotiledónea
Orden: urticales
Familia: Moraceae
Género: Morus
Especie: alba, nigra, rubra.
A la familia Moraceae (moráceas) pertenecen 65 géneros, propagados en
la zona tropical y subtropical, de los cuales destacan los géneros Morus, Maclura,
Broussonetia y Ficus. La característica de estos géneros es la presencia de látex
en su tallo.
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Manual de sericultura en hidalgo
La primera clasificación de la morera fue hecha por Carlos Linneo, quien divi-
de el género Morus en cinco especies: Morus alba, Morus nigra, Morus rubra, Mo-
rus tartárica y Morus indica. Hoy, independientemente de algunas deficiencias, la
clasificación más apropiada es la del investigador japonés Koidzumi (1923) sobre
la base de la construcción de la flor femenina y la morfología de las hojas y frutos.
Además de las características morfológicas generales, Koidzumi utiliza también al-
gunos indicadores cuantitativos como son las dimensiones de las hojas, pecíolos,
flores y frutos. En el género Morus, Koidzumi incluye 24 especies de moreras,
algunas de las cuales son utilizadas en la alimentación de los gusanos Bombyx
mori, para la alimentación animal, para obtención de frutos o bien como plantas
de ornato.
3. El árbol de morera
El árbol de la morera crece en climas tropicales, subtropicales y templados (figura
2). La morera tiene la capacidad de crecer en suelos poco fértiles, pero cuando se
cultiva en suelos ricos, con riego regular, produce grandes cantidades de hojas de
la alta calidad.
Figura 2. El árbol de morera.
PrinciPios básicos
17
Su cultivo, históricamente, ha sido para la cría de gusanos de seda, sin embar-
go, la morera tiene diversos usos: como alimento de ganado, producción de fruta,
elaboración de recetas medicinales, construcción de jardines, obtención de produc-
tos de papel, producción madera y leña (figura 3).
Figura 3. Alimentación de gusano de seda y aprovechamiento del fruto.
En algunos países se utiliza para proporcionar sombra, como planta ornamen-
tal y para controlar la erosión en áreas susceptibles (figura 4). Su uso como forraje
comenzó a partir de la década de los ochenta en América Central debido a sus
excelentes características bromatológicas.
Figura 4. Control de erosión, uso como forraje y producción de leña.
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Manual de sericultura en hidalgo
Benavides (2000) reportó contenidos de proteína cruda superiores a 20% y
digestibilidad in vitro de la materia seca (MS) por encima de 80%. Otro aspecto
sobresaliente de esta planta es su producción de biomasa, la cual puede alcanzar
hasta 30 t/ha/año en sistemas intensivos de corte y acarreo, además de su alta
retención de hoja durante el periodo seco.
En la India los sistemas de producción combinan la sericultura con la ganade-
ría, el forraje de morera permite alimentar a sus vacas y cabras en combinación con
pajas. Las ramas de morera después de la poda se pueden utilizar para la prepara-
ción de estacas y el resto para leña.
Una hectárea de moreras es capaz de producir 12.1 toneladas métricas de
leña. Las ramas pueden ser utilizadas en la elaboración de composta en combina-
ción con los desechos orgánicos de la crianza del gusano.
4. Descripción botánica de la planta
El conocimiento de las características morfológicas de los órganos de la morera y
sus funciones fisiológicas es esencial tanto para la selección de un material con alta
productividad como para mantener pautas en el manejo (figura 5). La morera en
proceso de crecimiento está formada de las siguientes partes principales; raíz, tallo,
hoja, flor y fruto y las yemas (Iwata, 1994).
Figura 5. Morfología de órganos de la morera.
PrinciPios básicos
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4 .1 Raíz
La absorción del agua y sustancias minerales del suelo se inicia a través de los pe-
los radiculares, éstos, por sí mismos, representan apéndices modificados de la epi-
dermis. En el proceso de crecimiento de la raíz algunos pelos radiculares mueren,
mientras que otros se forman, esta acción sucede de manera constante y conduce
a un rápido crecimiento de la morera (figura 6).
Figura 6. Raíces de estacas de morera.
La forma de propagación de la morera determina las características de su sis-
tema radicular (figura 7). En la propagación por semilla se desarrolla una raíz pri-
maria embrionaria (raíz pivotante profunda, con ramificaciones laterales), la cual
crece rápida y verticalmente en el suelo, como consecuencia de un fuerte geotro-
pismo positivo, al tiempo que se desarrollan raíces secundarias menos robustas.
Estas moreras resisten más en periodos de sequía, gracias a la profundidad que
alcanzan sus raíces (Pescio et al., 2006).
Figura 7. Raíces de los diferentes tipos de propagación.
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Manual de sericultura en hidalgo
Las moreras obtenidas de manera vegetativa presentan las raíces adventicias
en forma de cabellera. Pueden llegar a un metro de profundidad y su tamaño se
relaciona con la parte aérea, el tipo de suelo y la fertilidad. En suelos livianos, con
alto contenido de materia orgánica, se logra mayor cantidad de raíces que en suelos
arcillosos. Las plantas obtenidas con este método son más susceptibles y vulnera-
bles en sequías y ausencia de riego.
4.2 Tallo
Las plantas, en estado natural, llegan a tener un tallo arbóreo. En el cultivo, según
el sistema de producción elegido, se pueden mantener las plantas como arbustos,
con tallos pequeños (figura 8).
Figura 8. Desarrollo del tallo de plantas de morera.
El tallo inicia en el cuello de la planta sobre la superficie del suelo y termina en
las primeras ramificaciones. Éste, liga la parte aérea con los órganos subterráneos
de la planta. A través del tallo se transportan tanto el agua y las sales minerales,
absorbidas por las raíces, como las sustancias producidas por las hojas hacia las más
tiernas ramificaciones de las raíces.
La forma de la yema es una base importante para la identificación de las varie-
dades, los colores del tronco y de la raíz van desde el gris al marrón y su madera es
de color amarillo. Se utiliza como colorante natural en tejidos. La pulpa se aprove-
cha para la elaboración de papel de baja calidad. Las ramas y la madera del tronco
se emplean como leña (figura 9).
PrinciPios básicos
21
Figura 9. Morfología de yemas en la morera.
4.3 Hojas
La hoja es el órgano más importante porque constituye el alimento del gusano,
es en ella donde se producen procesos como la fotosíntesis y la respiración, entre
otros. El nivel de fotosíntesis determina la calidad de las hojas que producirá la
planta en su contenido nutricional.
La morera presenta hojas alternas, pecioladas, simples, íntegras, brillantes y
estipuladas de uno a cinco lóbulos, con el haz lampiño y el envés ligeramente to-
mentoso en las axilas de los nervios principales; se pueden observar diferentes for-
mas de hojas: enteras, lobuladas, ovales, elípticas o cordadas, con la punta caudada,
afilada, obtusa o dual, con bases en forma de retasa, emarginada, acuñada o linear
(figuras 10, 11 y 12).
Figura 10. Morfología de la punta y base de la hoja.
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Manual de sericultura en hidalgo
El borde que pueden presentar es acutado-serrado, serrado mastoidal, doble
serrado o serrado con cintura; se pueden observar de anchamente ovadas a orbicu-
lar-ovadas, con ápice agudo o cortamente acuminado; base oblicua y semitruncada
o subcordada.
Figura 11. Morfología de borde de la hoja.
Las hojas poseen diferentes formas, hay individuos con hojas enteras y otros
con bordes lobulados. La forma de las hojas no es un factor determinante a la hora
de elegir una planta.
Figura 12. Forma de las hojas.
PrinciPios básicos
23
El tamaño de las hojas es un factor importante a considerar en los trabajos de
selección de plantas de morera, hojas con medidas menores a 5 cm de longitud se
consideran pequeñas, las cuales son características de las moreras de tipo silvestre;
medianas son aquellas con longitud de hasta 10 cm y las grandes superan los 15
cm de longitud. Estas últimas son las más apropiadas para una explotación sericí-
cola, aunado a que la morera tenga ramas con entrenudos cortos.
Las hojas se caen en el otoño-invierno pues la planta entra en periodo de dor-
mancia. Es importante conocer el periodo del año en que las plantas comienzan a
brotar y mantienen brotes nuevos, porque ésta será la época de cría.
4.4 Ramas
Las ramas son tallos en los cuales hay hojas y yemas que brotan y se desarrollan
durante el periodo vegetativo. A lo largo de las ramas, a cada determinado intervalo
(distancia), hay una parte abultada a la cual se le da el nombre de nudo y el espacio
comprendido entre nudo y nudo se le llama entrenudo. Los nudos y entrenudos
son producto de la división celular en los meristemos apicales de las ramas. La lon-
gitud de los entrenudos depende mucho de las condiciones de manejo, del clima,
de la luz y sobre todo de la variedad de la morera (figura 13).
Figura 13. Entrenudos de ramas de morera.
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Manual de sericultura en hidalgo
En la actividad sericícola es deseable que las variedades de morera con que
se trabaja tengan un crecimiento vertical sin ramificaciones tempranas, pues esto
dificulta el manejo cultural de las plantas y la cosecha de las ramas en épocas de
crianza. Por tal razón, en los trabajos de selección de moreras, se eligen aquellas
con entrenudos cortos y sin ramificaciones laterales.
4.5 Flores y frutos
La inflorescencia es simple, axilar, en amentos de color crema o verdosos; con pe-
dúnculos pendientes o colgantes, flores con sexos separados, es decir, que en una
misma flor nunca se encuentran juntos los dos órganos sexuales (estambres y
pistilos), siendo éstas, masculinas o femeninas. Las plantas pueden ser monoicas
(en un mismo árbol aparecen flores masculinas y femeninas en forma separada)
o dioicas (plantas con sólo flores masculinas o femeninas). Las flores unisexuales
están formadas en espigas densas de hasta dos centímetros de largo, con cuatro
sépalos (figuras 14 y 15). Las espigas masculinas se caen rápidamente, las flores
están arregladas descuidadamente y, después de dejar caer el polen, la inflores-
cencia se seca. La flor es poco vistosa y la polinización se realiza por la acción del
viento (polinización anemófila).
Figuras 14 y 15. Flor femenina y fruto de la morera.
PrinciPios básicos
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Los frutos de la morera son ricos en minerales, vitaminas y azúcares, lo cual
los convierte en adecuada materia prima para la industria alimenticia y farmacéu-
tica, en la elaboración de jarabes, mermeladas, jugos y como saborizante natural
en pastelería, confitería, paleterías y otros, constituyendo así un importante aporte
nutricional que podría incluirse en cualquier tipo de dieta (figura 16).
Figura 16. Elaboración de paletas de fruto de morera.
Los frutos tienen forma cilíndrica, y algunos no forman semillas, a este fenó-
meno se le llama partenocarpia. Un gramo contiene de 5,00 a 1,000 semillas. El
color de los frutos es variable, conforme su grado de maduración avanza, comen-
zando en un tono blanco verdoso y al llegar a la maduración adquieren un tono que
va del rojo oscuro al negro o bien color lila o morado. La especie Morus alba pasa
del verde al blanco, sin modificar su color en el proceso, manteniendo siempre su
tono blanco.
En el cultivo de moreras destinado a alimentar gusanos probablemente no se
llegue a tener producción de frutos ya que las flores se desarrollan en ramas del año
anterior. Por lo tanto, con un plan de podas otoñal no se obtienen estas ramas y no
habrá producción de frutos.
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Manual de sericultura en hidalgo
5. Variedades de morera en México
En México, el desarrollo de la sericultura en la época colonial en los estados de
Oaxaca, Michoacán y San Luis Potosí promovió la introducción de diversas va-
riedades provenientes de Japón y Europa, principalmente, sin embargo a lo largo
del territorio nacional, y por la característica de la morera de adaptarse a diversos
ambientes, hoy están presentes una gama de ejemplares locales de los cuales se
desconoce su origen varietal, lo que demanda en un futuro la necesidad de tipificar
y definir las características morfo agronómicas.
Hay muchas propiedades morfológicas, ecológicas y fisiológicas en las more-
ras, que depende de la variedad:
Alta capacidad para aprovechar los nutrientes del suelo y aumentar su grosor.
Velocidad de crecimiento y habilidad de rebrote después de la poda.
Altos rendimientos de hoja.
Crecimiento vertical de las ramas.
Fortaleza y vigor de los nuevos brotes.
Distancia entre nudos o yemas foliares.
Tamaño, forma y grosor de las hojas.
Resistencia de la planta a enfermedades o plagas.
Resistencia a sequías o frío extremo.
Alta habilidad de enraizamiento.
Algunas variedades presentes en México se han identificado por su fenotipo
y cualidades, destacan por su importancia las que a continuación se describen de
manera general:
SLP-1: Se localiza en el Centro Nacional de Sericicultura en San Luis Potosí,
es una variedad de hoja grande y entera. Las ramas presentan un ápice cur-
vado por lo que no se recomiendan para su cultivo pues limita la cosecha de
hojas y el manejo de podas.
SLP-2: Se localiza en el Centro Nacional de Sericicultura en San Luis Potosí,
es una variedad de hoja mediana, gruesa y forma entera. Presenta una distan-
cia entre nudos de 5 cm. Se recomienda su cultivo para la sericultura.
PrinciPios básicos
27
SLP-4: Se localiza en el Centro Nacional de Sericicultura en San Luis Potosí,
es una variedad de hoja entera muy grande y de lámina gruesa, sin embargo
tiene entrenudos muy distantes. Puede ser utilizada en la sericultura y reco-
mendada para la producción de forraje.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Francisco I. Madero, en el es-
tado de Hidalgo, caracterizaron las siguientes tres variedades:
SLP-3: Se caracteriza por presentar hojas grandes enteras, de color verde
limón y morfología caudada acorazonada, pendulante, con base lineal, bor-
de serrado mastoidal, ápice prolongado y con longitud de peciolo de 6.5 cm
(figura 17).
Figura 17. Morfología de planta de morera, variedad SLP-3.
La apariencia de la yema presentó inclinación en la punta y la distancia entre
yemas es de 6 cm en promedio. El fruto es de color blanco.
SLP-5: Presenta hojas ovales de tamaño medio, color verde intenso, cauda-
das, con base acuñada, tipo de borde serrado mastoidal, presenta lámina lisa
y gruesa (figura 18).
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Manual de sericultura en hidalgo
Esta variedad tiene yemas adheridas a las ramas con distancia entre yemas en
promedio de 4.5 cm. El fruto es de color blanco.
Figura 18. Morfología de planta de morera, variedad SLP-5.
Kanva: es una planta que presenta hojas de tamaño medio, color verde intenso, de
forma elíptica caudada, con base acuñada y borde aserrado no pendular, de lámina
de grosor medio y borde liso (figura 19).
Figura 19. Morfología de planta de morera, variedad Kanva.
PrinciPios básicos
29
Las yemas se encontraron separadas de la rama, en la punta, y 5 cm distantes
entre sí. Los frutos fueron de color morado.
6. Requerimientos del cultivo
Los factores climáticos influyen sobre el desarrollo y crecimiento de la morera, así
como sobre la cantidad y calidad de sus hojas. La morera se desarrolla mejor en el
trópico y subtrópico, justo donde hay suficiente luz, humedad y calor, precisamente
entre los paralelos 36 Sur y 43 Norte. Su periodo vegetativo se prolonga de 220
a 300 días.
6.1 Clima
La morera es una especie que se adapta a los más variados hábitats, ya que pue-
de desarrollarse entre 50º de latitud Norte y 35º de latitud Sur, aunque es capaz
de resistir temperaturas extremas, como la de las regiones tropicales, se desarrolla
mejor en climas templados.
En México, la planta es cosmopolita, se reportan plantaciones en climas cá-
lidos-lluviosos como los de Tabasco, climas templados con lluvias en verano en el
Valle de México y climas cálidos-secos como los del Norte de país.
6.2 Temperatura
El calor es factor ecológico importante para el desarrollo de la morera, su tempe-
ratura óptima de desarrollo es de 30-32 °C. Cuando ésta es alta tiene un efecto
negativo sobre la morera, lo cual se manifiesta en la deshidratación de las hojas y el
perturbamiento de sus procesos asimilativos. Particularmente negativo es cuando
la temperatura alta es acompañada de baja humedad relativa y baja humedad en el
suelo. Si esta situación persiste de manera continua y prolongada la morera puede
secarse y morir.
La morera soporta mejor temperaturas altas que bajas, el movimiento de la
savia comienza cuando la temperatura del suelo alcanza los 6-8 °C y el desarrollo
30
Manual de sericultura en hidalgo
de la planta cuando la temperatura ambiental es arriba de 12 °C. Del calor depen-
de, por tanto, la duración del periodo vegetativo de la planta, siendo éste de 220
a 300 días.
En el periodo vegetativo la morera es sensible a temperaturas bajas, parti-
cularmente graves son las heladas tempranas, ya que queman los nuevos brotes,
complicando el manejo de la plantación y poniendo en riesgo la primera crianza
de primavera, porque de momento las larvitas se quedan sin alimento y hay que
esperar de 12 a 15 días para la obtención de nuevos retoños.
Para aumentar la resistencia de la morera al frío, además de la selección, juega
un gran papel la agrotecnología aplicada como pueden ser las labores culturales,
tiempo de poda, riegos y fertilización.
6.3 Precipitaciones
La precipitación apropiada para el establecimiento de la morera es de 400 a 2,500 mm
anuales. La morera no produce buenos rendimientos en zonas de precipitaciones
bajas y mal distribuidas. La planta es una especie que no tolera los extremos am-
bientales y, a medida que el suelo se seca, disminuye su crecimiento hasta detener-
se, tampoco tolera suelos inundados.
6.4 Humedad
La morera no soporta humedad excesiva, pero sufre en tiempos de sequía. Asi-
mismo, cuando la humedad relativa de la atmósfera es baja las hojas se endurecen
rápidamente y se marchitan, mientras que los retoños no se desarrollan en un ve-
rano seco.
Estas plantas se desarrollan muy bien en las vegas de los ríos y canales de
riego, siempre y cuando estos sitios no sufran anegamientos temporales o perma-
nentes. También se crecen bien en lugares más secos, pero con acceso de agua para
su riego.
PrinciPios básicos
31
6.5 Viento
El viento es portador de oxigeno y bióxido de carbono, vitalmente importantes
para la actividad de la planta, porque le asegura respiración y fotosíntesis, influye
también con su movimiento; un viento frío o muy caliente, actuando como corrien-
te, ocasiona el helamiento o marchitamiento de las hojas.
Fuerte contenido de polvo en el aire disminuye la fuerza de la iluminación e
influye indirectamente de manera negativa sobre la fotosíntesis.
La saturación del aire con gases venenosos, principalmente con bióxido de
azufre, es una influencia negativa sobre la morera. Las hojas adquieren cualidades
venenosas y son inapropiadas para la alimentación de los gusanos.
6.6 Luminosidad
La morera es planta fotófila que exige suficiente luz para su desarrollo y soporta
sólo sombreado parcial. Los árboles sombreados disminuyen fuertemente la foto-
síntesis y por tanto la acumulación de sustancias alimenticias de reserva. Las hojas
sombreadas son delgadas, opacas, pobres en nutrientes, sobre todo de proteína
cruda, razón por la cual no son apropiadas para la alimentación de los gusanos.
La luz es condición importante para una recuperación rápida de la planta des-
pués de la poda. En un corto periodo de 2.5 a tres meses la morera recupera su
masa foliar y puede ser cosechada nuevamente.
6.7 Altitud
La mora se encuentra presente desde los 0 hasta los 4,000 msnm, sin embargo,
para establecer un cultivo comercial la altitud del lugar debe oscilar entre 500 y
1,500 msnm. Es conveniente que el terreno sea plano ya que la productividad de
hojas disminuye con pendientes.
32
Manual de sericultura en hidalgo
Desarrollo de las hojas según la pendiente del sitio de establecimiento:
Grado de pendiente Desarrollo de hoja
< 20% Buen desarrollo y producción de hoja
De 20 a 40% Mediana producción de hoja
por lixiviación de nutrientes.
> de 40% Pobre producción de hojas,
el establecimiento de morera
reduce la erosión.
En caso de que el terreno esté con pendientes como las mencionadas ante-
riormente será necesario construir mejoras en el terreno para que no se produzca
erosión. Un ejemplo son los cultivos en terrazas.
6.8 Suelo
La morera tiene la capacidad de adaptarse a una gran variedad de suelos, puede
sembrarse en diferentes clases, con excepción de los muy húmedos y duros. El
mejor crecimiento de la planta se da en suelos franco-arcillosos y franco-arenosos
con profundidad de 60 a 100 cm, de buen drenaje y pH de seis a siete, con buena
concentración de materia orgánica, no tolera los suelos encharcados y requiere
de un alto nivel de nitrógeno. El sistema radical de la planta es extenso, pueden
explorar hasta un metro de profundidad, aunque la mayor parte se concentran en
los primeros 0,6 m. Por lo tanto el manto freático no deberá estar a menos de un
metro de profundidad (García, 2004).
7. Métodos de propagación de la morera
La morera se puede reproducir por vía sexual o asexual, es decir, mediante semillas
o partes vegetativas de la planta. La reproducción se realiza en viveros especializa-
dos, donde se selecciona y prepara material de propagación mejorado o no mejora-
do, de acuerdo a necesidades y objetivos prácticos.
PrinciPios básicos
33
7.1 Propagación por semilla
La propagación mediante semilla nos permite obtener plantas más longevas y re-
sistentes, gracias a su raíz pivotante que penetra a gran profundidad, pero signifi-
cativamente más heterogéneas en cuanto al tipo de hojas, ramificación, cualidades
nutricionales y rendimientos (Cruz, 1993). Para este tipo de propagación, primero
hay que seleccionar y marcar las plantas progenitoras o bien establecer especial-
mente un lote de plantas madre, completamente sanas, con hojas enteras y valio-
sas cualidades productivas que pudieran heredar a la descendencia. Lo anterior se
determina después de largos años de investigación y seguimiento de los cultivos
obtenidos durante generaciones en plantas de tallo alto, crecimiento libre y no
obtenidas mediante injerto.
Para obtener las semillas se recolectan frutos completamente maduros prove-
nientes de árboles bien desarrollados y sanos, los cuales se maceran manualmente,
se lavan y escurren de manera continua para eliminar la pulpa y semillas vanas, las
cuales flotan, de esta manera quedan asentadas en el fondo del recipiente sólo las
semillas más viables.
Las semillas así obtenidas se ponen a secar en un sitio ventilado, pero a la
sombra. Una vez secas se almacenan en un sitio seco, sacándose para su siembra
al inicio de la primavera del siguiente año.
La tierra del semillero debe tener buena textura, porosidad, rica en nutrientes
y estar provista de suficiente agua para su riego. Los semilleros se construyen pro-
fundos o superficiales, dependiendo del suelo y clima de la región.
Las semillas se siembran una tras otra en hileras a 15-20 cm de distancia
entre si y a uno o dos centímetros de profundidad, bajo estas condiciones, se re-
quieren de 100 a 120 gramos para un semillero de 100 m2. Una vez germinadas
las plantulitas se van espaciando hasta quedar a 5-10 cm entre si.
34
Manual de sericultura en hidalgo
7.2 Propagación vegetativa
La propagación vegetativa permite reproducir completamente las cualidades pro-
ductivas de las variedades progenitoras, con este método se puede iniciar la explo-
tación productiva de la morera al segundo o tercer año de establecida. Se puede
dividir de la siguiente manera:
a) Propagación con vareta o estaca madura. (Con material obtenido en el pe-
riodo de reposo de la planta).
b) Propagación con vareta verde. (Esquejes obtenidos en el periodo vegetati-
vo de la planta).
c) Propagación por medio de acodos en aporcado. (Con la utilización de plan-
ta viva).
d) Propagación mediante injertos (injerto de yema e injerto de una púa de
variedad mejorada sobre un portainjerto ya enraizado).
7.2.1 Propagación con vareta madura
Este método de propagación utiliza ramas anuales, las cuales son recolectadas en
la época de dormancia de la planta. Estas ramas se recolectan y se almacenan en
cuartos fríos a temperatura de + 5° C y se sacan conforme se van utilizando. (Fi-
gura 20).
Figura 20. Corte y preparación de varetas maduras para su propagación.
PrinciPios básicos
35
Las varetas o estacas son cortadas a +20 cm de longitud se humedecen con
el enraizador y se insertan posteriormente en camas eléctricas para su propagación
y encallamiento (figura 21).
El proceso de encallamiento demanda humedad y temperatura del sustrato; el
calentamiento se logra, en el mejor de los casos, con el uso de resistencia eléctrica
y un termostato, para mantener una temperatura estable de + 28 °C, condiciones
bajo las cuales es posible obtener el encallamiento, e incluso el arraigo de algunas
varetas, en tiempo aproximado de 10 a 15 días.
Figura 21. Propagación de estacas en cama eléctrica.
Otra manera de lograr lo anterior es mediante la utilización de camas con ca-
lentamiento natural a base de estiércol, mismo que genera calor por efecto de los
procesos de descomposición de la materia. Se excavan las zanjas en cuyo fondo se
deposita el estiércol, para posteriormente devolver la tierra excavada y mejorada
con alguna materia orgánica (figura 22).
Figura 22. Camas y platabanda de enraizamiento de varetas.
36
Manual de sericultura en hidalgo
Las platabandas son otra alternativa de propagación, se coloca una lámina
de polietileno, en la cual se determina cada punto de inserción, haciendo con una
navaja un corte en forma de cruz, ahí se insertarán las varetas ya tratadas con pro-
motores de enraizamiento.
Las varetas, así logradas, se pasan a bolsas para su manejo posterior en el vi-
vero y para su expedición a los productores. Otro uso de las varetas enraizadas es
establecer nuevas plantaciones con inserción directa en campo.
7.2.2 Propagación con material vegetativo verde
Se seleccionan ramas anuales de 40 días o más, éstas deberán presentar signos
evidentes de lignificación, por lo tanto, se desechan las partes tiernas apicales de las
ramas y se cortan esquejes (varetas) de +20 cm de longitud (figura 23). A estas
varetas se les dejan dos hojas de la parte apical para que se pueda efectuar el pro-
ceso de la fotosíntesis, una vez cortadas, se les da tratamiento con fitorreguladores,
después de lo cual se insertan en camas calientes de reproducción. Es posible ob-
servar la formación del sistema radicular 30 o 40 días después. Debe mantenerse
una temperatura de 22-26°C, humedad relativa de 85-100% y fertilidad de la
cama o sustrato (Soria et al., 2001).
Figura 23. Propagación con material vegetativo verde.
PrinciPios básicos
37
En regiones con baja humedad relativa esta condición se logra de manera
artificial, mediante la construcción de un túnel, que se prepara con arcos insertados
sobre la zanja. Una vez insertadas las varetas en la cama de reproducción, se cu-
bre de inmediato con una hoja de polietileno, cuidando que sus extremos queden
perfectamente cubiertos con tierra para no permitir la evaporación de la humedad.
Sólo de tiempo en tiempo el polietileno deberá levantarse en algún extremo para
verificar la humedad y en su caso dar algún riego ligero.
El polietileno se retira hasta lograr el arraigamiento de los esquejes, los cuales
continúan atendiéndose en el mismo lugar en condiciones normales de temperatu-
ra y humedad, pero protegiéndolos de los rayos directos del sol.
7.2.3 Acodos
La longitud más apropiada de las ramas para la implementación de este método
es de 1.5 m, de las cuales es posible sacar cuatro o más plantitas ya arraigadas e
independientes. Los nuevos vástagos se aporcan nuevamente y en el invierno,
una vez que han tirado las hojas, se separan definitivamente de la planta madre.
(Figura 24).
Figura 24. Reproducción vegetativa por acodo.
38
Manual de sericultura en hidalgo
Este tipo de propagación es poco utilizado y sólo se realiza con especies
difíciles de generarse mediante los métodos convencionales, o con propósitos
educativos.
7.2.4 Injertos
El injerto en moreras fue ampliamente utilizado en la actividad sericícola. Con este
método se reproducen exitosamente las cualidades y características de las varieda-
des mejoradas mediante el acoplamiento de yemas o púas a un patrón o portain-
jerto ya arraigado. El patrón es una plántula obtenida mediante semilla (sexual) y
el injerto corresponde a una variedad mejorada.
En la práctica de propagación de frutales se conocen muchos tipos de injertos,
pero bien se pueden agrupar en dos: a) Injerto de yema o escudete y b) Injerto de
púa o clarinete.
a) Injerto de yema o escudete: es el más utilizado y fácil de realizar, se lleva
a cabo durante el periodo vegetativo de la morera, mientras haya movi-
miento de savia y la corteza pueda separarse con facilidad (figura 25). Se
emplean yemas de material recolectado en la época de reposo de la planta
y almacenado en un cuarto frío hasta el momento de su utilización, en la
primavera, o bien con material recolectado en el verano justo el mismo día
en que van a ser utilizados para el injerto.
Figura 25. Injerto de yema o escudete.
PrinciPios básicos
39
Primero se hace una incisión en forma de T en el patrón, posteriormente,
alrededor de una yema foliar se hace un corte en forma de escudo, el cual se retira
cuidadosamente, y haciendo a un lado las esquinas del corte en forma de T, se in-
serta y acopla en el patrón. Finalmente se liga el injerto con rafia o polietileno y se
retira una vez que se haya logrado exitosamente el injerto.
b) Injerto de púa o clarinete: frecuentemente se utiliza en plantas enveje-
cidas y gruesas, también en las que no se lograron propagar a través del
injerto de yema. El método es rápido y técnicamente fácil de utilizar, con
un alto porcentaje de planta lograda (figura 26).
Al igual que el injerto de yema es necesario que, cuando se haga, el árbol esté
en crecimiento, haya movimiento de savia y que la corteza pueda separarse con
facilidad, el tiempo más propicio es al inicio de la primavera. El injerto se realiza a
ras de suelo, descubriéndose la planta en su base y cortándose en ángulo de 45 °.
Figura 26. Injerto tipo púa o clarinete.
La púa deberá contar con dos o tres yemas. Se utiliza sólo material vegetativo
bien conservado, el cual fue recolectado en la época invernal. En la parte basal de
la púa se realiza un corte en forma de clarinete, afinando bien el corte con navaja
especial para injertos. La corteza del otro extremo de la púa se separa haciendo
presión con los dedos, retirándose ésta si se quiere. Acto seguido, se inserta fuerte-
mente la púa entre la corteza y la parte superior del patrón. Para mayor seguridad,
el corte hecho al patrón y el sitio de acoplamiento del injerto, se untan con algún
40
Manual de sericultura en hidalgo
cicatrizante especial, la arcilla humedecida también es amplia y popularmente
utilizada como protector. Finalmente la púa y el patrón se cubren con tierra ligera
hasta 2-3 cm por encima del extremo superior.
Para el éxito de los injertos tienen importancia también los factores climatoló-
gicos, la técnica, los instrumentos utilizados, la experiencia, así como el método más
adecuado, de acuerdo a las variedades. Una condición obligatoria es que quienes
realicen esta práctica empleen instrumentos bien afilados, precisos y desinfectados.
Existen muchos otros tipos de injertos en la sericicultura o en la fruticultura,
pero son, de alguna manera, sólo una variante de los aquí expuestos.
La propagación de la morera por medio de cultivo de tejidos es otro método
altamente ventajoso al que habría que acudir en el futuro.
8. Cultivo y manejo de la morera
8.1 Establecimiento de la plantación de moreras
Lo más conveniente para establecer una plantación de moreras es con plantas ob-
tenidas con varetas, es decir, mediante la reproducción asexual; gracias a este tipo de
propagación es posible reproducir todas las cualidades productivas de las plantas pro-
genitoras, al tiempo de adelantar los tiempos de su plena explotación. (Figura 27).
Figura 27. Plantaciones de morera con plantas obtenidas por estacas.
PrinciPios básicos
41
La densidad de la plantación se deja a criterio del productor y sobre todo a la
factibilidad de establecer la morera como cultivo mecanizado, lo cual simplifica y
facilita su manejo e incrementa su productividad.
Figura 28. Diseños de plantación de moreras, Tres bolillo y Marco real.
En terrenos con pendiente, las líneas de plantación deben seguir las curvas de
nivel. La mejor distribución de estacas entre líneas es la de Tres bolillo (triángulo),
mientras la siembra en líneas facilita la limpieza de maleza (figura 28).
8.2 Riego
El consumo de agua del cultivo es de aproximadamente 5 mm/día durante el pe-
riodo de mayor crecimiento vegetativo, lo que significa que se necesitan unos 150 mm
mensuales de lluvia o riego. Las hojas comienzan a amarillear y luego se caen cuando
hay deficiencia de agua, en ese caso, es necesario utilizar riego complementario.
Figura 28. Riegos de apoyo para el anclaje de estacas en la zona de cultivo.
42
Manual de sericultura en hidalgo
En la plantación es recomendable regar el cultivo especialmente en las épo-
cas de calor y pocas lluvias. En el caso de plantación directa es mayor el riesgo, en
cambio, si se usan estacas ya enraizadas los riesgos de pérdidas por deshidratación
son menores.
Los métodos de riego más convenientes para el cultivo de la mora son el go-
teo, microaspersión y riego por gravedad, suministrándole una lámina equivalente
a tres milímetros diarios. En caso de que se acumule agua en el terreno, se debe
estudiar la forma de retirar el excedente, debido a que las plantas no toleran con-
diciones de exceso de agua y sus raíces se pudren. La elección del sistema de riego
dependerá de los medios con que se cuenten. (Pescio et al., 2006).
8.3 Control de malezas
En los primeros años después de establecida la plantación de moreras se mantie-
nen cuidados especiales para el logro y formación de las plantas, la superficie de
cultivo se debe mantener limpia de maleza. (Figura 29).
Figura 29. Control mecánico de maleza (foto: técnico Gonzalo).
PrinciPios básicos
43
Para la explotación intensiva de la planta, con dos o tres cosechas anuales, es
necesario mantener el estado vigoroso y saludable de la planta; para lograr esto se
realizan deshierbes, labores culturales, riego y podas sanitarias durante el periodo
de crecimiento, sin olvidar abonar y fertilizar las plantas para mantener o restituir
los nutrientes del suelo y obtener hojas de morera con la calidad y rendimientos
óptimos.
8.4 Fertilización
Los nutrientes del suelo son la fuente principal de alimento de las plantas. El nitró-
geno se encuentra en forma de nitratos y sales de amonio formados en el suelo.
Nitrógeno. Fortalece el desarrollo vegetativo de la planta y la producción de
hojas. Si el suelo se fertiliza exageradamente, y se incorpora el nitrógeno des-
pués de septiembre u octubre, se retrasa la maduración de los retoños anuales
y son presa fácil de los fríos tempranos. La falta el nitrógeno origina que las
hojas sean de un verde pálido, opacas y pobres en sustancias nutritivas, sobre
todo de proteína cruda. Las hojas obtenidas de plantas fertilizadas con nitró-
geno son más gruesas, jugosas, más tiernas y nutritivas.
Fósforo. Se encuentra en forma de fosfatos, su presencia fortalece las raíces
y la resistencia general de la planta, acelerando además la producción de
frutos. El fósforo como fertilizante debe aplicarse al suelo en el otoño con el
barbecho.
Potasio. Intensifica la producción de clorofila, necesaria para el normal fun-
cionamiento de la planta, ante la deficiencia de potasio son susceptibles a las
enfermedades fungosas.
Calcio. Su presencia aumenta la resistencia al frío, mejora las propiedades fí-
sicas y químicas del suelo y conduce al fortalecimiento de los procesos micro-
biológicos. El calcio influye sobre la resistencia general de la morera e influye
directamente sobre su pH.
44
Manual de sericultura en hidalgo
En suelos normales, una mala fertilización conduce a salinidad con sodio y
magnesio (NaCl; Na2SO4; NaCo3; MgSO4) los cuales son particularmente dañinos
para la morera.
Además de esos elementos básicos, para el desarrollo de la morera, tiene gran
importancia los microelementos, los cuales, aunque en cantidades pequeñas incor-
porados al suelo, aumentan la resistencia y productividad de las plantas; tales mi-
cronutrientes son por ejemplo el manganeso, magnesio, boro, hierro, cobre y otros.
8.4.1 Fertilización química
La dosis dependerá del nivel de fertilidad del suelo, el tipo de plantación y la den-
sidad de las plantas. Los fertilizantes deben aplicarse después de seis meses de la
siembra. Se han elaborado diversas fórmulas de fertilización generales en Japón
(Yokohama, 1962) y en la India (Ray et al., 1973). En Japón, una aplicación de
fertilizantes químicos a los campos de mora en suelos aluviales es de 300 kg de
nitrógeno (N), 140 kg de fósforo (P) y de 120 kg de potasio (K) por hectárea
por año y para suelos de origen volcánico de 300 kg de N, 160 kg de fósforo y 200 kg
de K por hectárea.
8.4.2 Fertilización orgánica
Los abonos orgánicos, por ejemplo el estiércol de vaca y la composta, se caracteri-
zan por ser más eficientes a medida que liberan los nutrientes lentamente, mejoran
la textura del suelo y la retención de humedad. Además, están disponibles a nivel
local, son baratos y menos peligrosos que los fertilizantes minerales (figura 30).
En cualquier caso se recomienda una aplicación de al menos 15 ton/ha de com-
posta en dos aplicaciones (Hiroaki et al., 2000), se debe hacer durante la poda,
cada dos años.
En cultivos destinados a estudios bioquímicos y agronómicos se han emplea-
do dosis nitrogenadas a partir de gallinaza equivalentes a 100, 300 y 500 kg N/
ha/año (García, Ojeda y Pérez, 2002).
PrinciPios básicos
45
Figura 30. Fertilización con lombricomposta.
9. Tipos de podas
El árbol de morera se mantiene con poda de formación baja (altura de tallo princi-
pal de 50 cm o menos) con el propósito de facilitar su manejo y la cosecha de sus
hojas y ramas.
La poda de formación y sus resultados dependen en gran medida de las va-
riedades de morera con las cuales trabajamos, así como también del uso que les
queremos dar y las posibilidades de corte y cosecha de sus hojas y ramas.
Dependiendo de la altura del tallo principal, la poda de formación se puede
clasificar en tres categorías:
1. Poda de porte bajo o arbustivo.
2. Poda de porte medio.
3. Poda de porte alto.
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Manual de sericultura en hidalgo
Poda de porte bajo o arbustivo: el tallo principal mide de 15 a 20 cm o menos. La
distancia entre plantas es de 30 a 50 cm y entre surcos de 2.50 a 1.25 m. Es un
tipo de poda que se aplica sobre todo en explotaciones intensivas y alta tecnología
para el manejo de la plantación (figura 31).
La ventaja de la poda baja es que se pueden mecanizar algunos procesos labo-
riosos en grandes explotaciones, como son la cosecha de hojas y los cultivos. Las
plantas entran en explotación aún en el segundo año y los rendimientos de hoja
son altos desde el inicio, dada la alta densidad de plantación.
Figura 31. Poda de porte bajo.
Las desventajas son el rápido envejecimiento y amacollamiento de las plantas
como resultado del trabajo de la maquinaria (trabajo mecanizado), esto obliga que
después de algunas cosechas mecanizadas se deba realizar una poda más baja, de
rejuvenecimiento.
Poda de porte medio: la altura del tallo es de 50 a 70 cm, la distancia entre plantas
es de 3.00 X 1.5 m, 2.50 X 1.00 m o bien 2.00 X 1.00 m, este nivel permite el
PrinciPios básicos
47
manejo y cosecha de ramas y hojas cómodo y efectivo, ya que está acorde con la
altura de quienes realizan de manera manual la recolección. (Figura 32).
Figura 32. Poda de porte medio.
Las podas de porte medio permiten un manejo alternado de la cosecha de
ramas y hojas, realizándola arriba o abajo, según sea requerido, y adecuándola a la
programación de crianzas durante el año.
Poda de porte alto: altura del tallo de 1.20 a 1.50 metros. Se plantan las moreras
a distancias de 4 X4 o bien 3 X 3. Para el establecimiento de una plantación de
este tipo se requieren grandes superficies, ya que la distancia entre plantas y surcos
permite el laboreo del suelo con un tractor grande. Es apropiada para terrenos con
pequeñas pendientes porque se puede trabajar con comodidad desde la parte alta
de éstas.
Para determinar la altura más adecuada para el establecimiento de la planta-
ción son muchos los factores a tomarse en cuenta, por tal razón, se debe acudir
siempre con un especialista en la materia, quien determinará las variedades de
morera más adecuadas a la zona donde se pretende establecer la plantación.
De la misma manera, el especialista determinará la altura del tallo más apropiada,
considerando el tipo de suelo, pendiente del terreno, tipo y calidad del agua de
riego y las condiciones meteorológicas privativas de la región propuesta para su
establecimiento.
48
Manual de sericultura en hidalgo
En el caso particular de la región del Valle del Mezquital, en Hidalgo, lo mejor
es optar por una poda alta, para evitar que ramas y hojas puedan ser contamina-
das por las aguas negras que se utilizan para riego (figura 33). En esta región es
recomendable plantar barreras rompe vientos para aminorar, de alguna manera, la
contaminación en caso de tolvaneras.
10. Producción de hojas
La producción de hojas y materia seca por hectárea de morera depende de la va-
riedad, la localidad, la densidad de siembra, la aplicación de fertilizantes y la técnica
de cosecha (Espinoza et al., 1999). Incrementando la densidad de siembra se
aumentan los rendimientos de hoja (Gong et al., 1995).
Figura 33. Poda de porte medio.
El cultivo, durante los dos primeros años, se dice que está en establecimiento
y después del segundo que se encuentra en plena producción. La primera cosecha
se puede realizar a los 5/6 meses. La planta en el primer año de cultivo producirá
alrededor de 30% de hoja con respecto a la plena producción; en el segundo año
se puede alcanzar alrededor de 65% y 100% a partir del tercer año (Bustamante
et al. 1989). La producción de hojas se maximiza después del cuarto año, llegando
a 10-15 kg por árbol o 20 a 30 toneladas por hectárea.
PrinciPios básicos
49
Una plantación de 3,000 moreras soporta 25 telainos, se estima una produc-
ción de hojas por planta de 3.7 kilogramos. El telaino es un módulo de 20,000 hue-
vos o gusanos que consumen 450 kilos de hojas sin ramas y son capaces de producir
30 kg de capullos frescos, que equivalen a 10 Kg de seda cruda (Enciso, 2010).
11. Cosecha
La cosecha provoca muerte de raíces por falta de sustancias que producen las ho-
jas, por ello se debe dejar que las plantas se recuperen del corte. Una planta está
lista nuevamente para ser cosechada cuando las hojas inferiores de sus ramas lle-
garon a su madurez. Esto transcurre en un tiempo que va de dos a cuatro meses,
según sea la capacidad de rebrote que tenga la variedad, los posibles problemas de
sequía, fertilidad, etcétera. No es recomendable realizar podas antes de tiempo, ya
que la producción de hojas disminuye y la planta se debilita. Es importante realizar
una buena planificación de la producción de hojas.
Las hojas se cosechan ya sea a través de medios manuales o mecánicos. En la
producción de morera la mayoría de la operación de cosecha es manual (figura 34).
Figura 34. Cosecha de hojas de morera.
50
Manual de sericultura en hidalgo
La cosecha de la hoja después de las podas estará relacionada directamente
con la temperatura y ubicación de las zonas. La primera cosecha de hoja se realiza
de seis a ocho meses después del trasplante y luego se hace con regularidad cada
tres a cuatro meses después de podas y cosechas. (Cifuentes y Kee-Wook, 1998).
12. Plagas
12.1 Chinche harinosa (Panonychus citri MCG.)
Forma de ataque: se alojan sobre la hoja tierna, en muchos casos los brotes detie-
nen su crecimiento afectando la producción.
Figura 35. Chinche harinosa.
Control: cortar la rama que es parasitada por la chinche y quemarla lejos del campo
de morera. Desinfectar herramientas de trabajo.
12.2 Barrenador del tallo (Epialus spp.)
Este insecto produce engrosamiento en el tallo al nivel del cuello, penetra la planta
por la base y barrena completamente el tallo, construyendo galerías dentro de él. Se
manifiesta por clorosis, necrosis y posteriormente la muerte de la planta. (Figura 36).
Figura 36. Barrenador atacando un tallo.
PrinciPios básicos
51
Control: se basa en tratamientos químicos con productos insolubles en agua (ya
que los solubles se evaporan rápidamente y no tienen efecto alguno). Es importan-
te mantener libre de maleza y evitar toda clase de heridas en las plantas. Los pro-
ductos químicos se deben aplicar localizados en el sitio por donde entra el insecto.
12.3 Cochinilla escamosa
Absorben la savia de las plantas dañando principalmente las ramas tiernas y las
hojas, por lo que el crecimiento de las ramas se hace lento. (Figura 37).
Figura 37. Cochinilla escamosa.
Control: cortar la rama sobre la cual habita el insecto y quemarla en un lugar apartado.
12.4 Áfidos o pulgones (Aphis sp.)
Se localizan en los brotes tiernos, los áfidos chupan savia de las hojas nuevas, de-
formándolas y enrollándolas, detienen el crecimiento de las ramas y transmiten
enfermedades virosas. Abundan en época de seca. (Figura 38)
Figura 38. Infestaciones de pulgón.
52
Manual de sericultura en hidalgo
Control: aplicar riego adecuadamente y proteger a los enemigos naturales de los
áfidos (predadores y parásitos).
12.5 Mosca de la fruta
Causa la caída y destrucción de los frutos, abre puertas para que entren microorga-
nismos patógenos causantes de la descomposición o pudrición. (Figura 39)
Figura 39. Larva y adulto de mosca de la fruta.
Control: cosechar oportunamente la fruta, recoger los frutos caídos y enterrarlos.
Controlar la maleza y mantener limpia el área para visualizar la fruta caída. Colocar
trampas, con jugo de mora, para capturar las moscas.
12.6 Chinches chupadoras de hojas y frutos
Las chinches adultas se alimentan de hojas y frutos, el mayor daño lo causan al
chupar frutos, dejándolos pequeños, deformes y secos, su ataque es más grande
cuando hay presencia de malezas en el cultivo. (Figura 40).
Figura 40. Ataque de chinches en fruto y hoja.
PrinciPios básicos
53
Control: hacer control selectivo de maleza y evitar el uso indiscriminado de
plaguicidas.
12.7 Gusano quemador (Copaxa multifenestrata)
Hospedantes: se considera una plaga específica de aguacate.
Daño: la larva se alimenta principalmente de hojas maduras; en infestación
severa causa defoliación.
Distribución: se presenta en todas las zonas productoras de aguacate. (Figura 41).
Figura 41. Infestación de gusano quemador a planta de morera.
13. Enfermedades
13.1 Mildiu polvoriento (Phyllactinia moricola, P. Hennings)
Enfermedad que ataca las hojas, aunque no se encogen ni caen. Hay poco efecto
sobre la cosecha. Aparecen pequeñas manchas blancas en el envés, extendiéndose
sobre toda la hoja. En este momento la hoja aparece como si estuviese cubierta de
polvo. (Figura 42).
54
Manual de sericultura en hidalgo
Control: el hongo sobrevive sobre residuos de cosecha, por eso para controlar la
enfermedad es necesario mantener el cultivo limpio y con aireación.
Figura 42. Hojas dañadas por Mildiu.
13.2 Pudrición de la raíz
Este marchitamiento puede ser causado por Verticillum sp. Fusarium sp. o Rose-
llinia sp. La enfermedad se reconoce por que las hojas se ponen amarillentas y la
planta se marchita. (Figura 43).
Control: arrancar las plantas afectadas, aplicar formol en los sitios donde se des-
prendieron las plantas. Utilizar material de propagación de plantas sanas.
Figura 43. Plantas de moreras muertas por daño en la raíz.
PrinciPios básicos
55
13.3 Roya bacteriana (Pseudomonas mori)
Aparecen manchitas en el limbo de la hoja, luego la enfermedad ataca la vena y el
peciolo y surge una pus bacteriana amarillenta. Las hojas se llegan a deformar.
Control: evitar lesiones en los tallos durante el mantenimiento de la plantación.
Cuidar el uso excesivo de fertilizantes nitrogenados. Quemar hojas y tallo afecta-
dos. (Figura 44).
Figura 44. Hojas con síntomas de enfermedad por roya.
56
Manual de sericultura en hidalgo
PrinciPios básicos
57
PARTE II
LA CRÍA DE LOS GUSANOS
DE SEDA
58
Manual de sericultura en hidalgo
PrinciPios básicos
59
14. El gusano de seda
El gusano de seda es una larva que produce seda a partir de su alimentación con
la planta morera, es una especie domesticada que ha sido explotada por más de
5,000 años. Las razas criadas hasta hoy han sido derivadas de un gusano silvestre
Bombyx mandarina originario de China, India y Corea. El gusano de seda (Bombyx
mori) pertenece al mismo género, posee 28 pares de cromosomas, un par más que
el Bombyx mandarina, sin embargo, ambas especies pueden aparearse y reprodu-
cirse (Cifuentes y Kee-Wook, 1998).
15. Clasificación taxonómica
Salice et al. (2001), clasifica al gusano de seda de la siguiente manera:
Clase: insecta o hexápoda
Orden: lepidóptera
Familia: bombycidae
Género: Bombyx
Especie: mori
Nombre vulgar: gusano de seda.
16. Razas del gusano de seda
Según Veda et al. (1997) y Aruga (1994), el gusano de seda se clasifica de acuer-
do al lugar de producción, por región nativa: raza japonesa, raza china, raza euro-
pea, raza tropical. Como también de acuerdo al voltinismo: univoltinos, bivoltinos
y multivoltinos, y por la cantidad de mudas que presenten: trimudantes, tetramu-
dantes y pentamudantes.
17. Condiciones ambientales para la cría
Los gusanos de seda se crían en condiciones de cautiverio. Si hay condiciones
económicas para ello se construyen casas o salas especiales de crianzas o se apro-
vechan espacios desocupados de la casa, como bodegas, cocheras, salas u otros.
(Figura 45).
60
Manual de sericultura en hidalgo
Figura 45. Caseta de crianza de gusano de seda de la UPFIM.
También se pueden habilitar construcciones temporales del tipo túnel o in-
vernadero, con cubierta de polietileno, pues sumados los días efectivos de cada
crianza, el aprovechamiento de los espacios es de sólo unos pocos meses.
En la construcción de una casa especializada de crianza deben cuidarse algu-
nos aspectos importantes:
Que esté ubicada lo más cercano posible a la plantación de moreras.
Que cuente con energía eléctrica asegurada.
Que tenga además un cuarto o espacio para el almacenaje de ramas y hojas,
mesa de trabajo para el corte o picado de las hojas, espacio pequeño y más
abrigado para la cría de gusanos de seda en sus primeras edades, espacio
más grande para la cría abierta de los gusanos en las edades IV y V, facilida-
des para el trabajo de encapullado.
PrinciPios básicos
61
Para que los gusanos de seda crezcan y se desarrollen con normalidad, la casa
de crianza debe contar con temperatura y humedad adecuadas en cada etapa de su
desarrollo, facilidades para proporcionar ventilación en caso necesario, iluminación,
superficie suficiente, de acuerdo a la cantidad de gusanos que se crían, y equipo
adecuado.
17.1 Temperatura
Los gusanos de seda son animales de sangre fría, su cuerpo tiene la temperatura
del ambiente, porque no pueden autorregularla, por lo que necesitan condiciones am-
bientales particulares para desarrollarse: estos requerimientos son similares a los de la
morera, por lo tanto la crianza es posible donde se puede cultivar esta planta. El rango
de temperatura media óptima debe variar entre los 20º y 30ºC. Sin embargo, la pro-
ducción se puede realizar con temperaturas menores o mayores, aunque variando en
consecuencia la duración del ciclo y la productividad (Pescio et al., 2006).
17.2 Humedad relativa
La duración del periodo larval disminuye cuando aumenta la humedad, en términos
generales, el local debe tener entre 60% y 80% de humedad relativa (Pescio et al.,
2006). El mantenimiento de una temperatura adecuada debe estar en relación
estrecha con la humedad relativa de la sala de crianza. Para la cría de los gusanos
de seda en la etapa joven (primera, segunda y tercera edades) se requiere de más
temperatura y humedad, en comparación con los gusanos de la edad adulta (cuarta
y quinta).
17.3 Ventilación
El cuarto de crianza debe tener ventilación porque se va llenando de bióxido de
carbono debido a la actividad fisiológica de los gusanos y las labores del hombre
dentro de ésta, además si se suma baja temperatura y alta humedad, lo más proba-
ble es que los gusanos de seda se enfermen, de ahí la necesidad de ventilar perió-
dicamente la sala de crianza.
62
Manual de sericultura en hidalgo
El gusano necesita aire con suficiente oxígeno para desarrollarse. La cría ori-
gina gases que modifica la composición del aire y que afecta a los gusanos. Las
larvas, al respirar, consumen oxigeno y eliminan dióxido de carbono. La fermenta-
ción de los residuos vegetales aumenta la concentración de gases nocivos; es muy
importante no fumar dentro del área de cría para no viciar el local. Es recomendable
renovar periódicamente el aire mediante la apertura de las ventanas para permitir
la generación de corrientes de aire, aunque tampoco es recomendable que lleguen
directamente a las camas de cría (Pescio et al., 2006).
En explotaciones industriales se sugiere la instalación de un sensor de hume-
dad y temperatura que se active automáticamente cada que sea necesario.
17.4 Iluminación
Los gusanos necesitan luminosidad para desarrollarse correctamente, es sabido
que aumenta el consumo de alimento y la actividad con la presencia se luz; sin
embargo, se deben evitar los extremos. La luz directa del sol no es recomendable
sobre las camas de cría, ni la completa oscuridad; si no hay suficiente luz al agregar
las hojas, las larvas no subirán a la parte superior de la bandeja para consumir ali-
mento fresco, en cambio si una parte de la bandeja recibe luz y la otra se encuentra
en penumbras, los gusanos se van a agrupar en la parte iluminada, desuniformando
la densidad de cría. La iluminación ideal es aquella permita leer dentro de la sala
de cría, sin embargo no es necesaria la luz durante la noche. (Pescio et al., 2006).
18. Ciclo de vida
El gusano de seda es una larva u oruga de un insecto lepidóptero que tiene me-
tamorfosis completa, atraviesa por los estados de huevo, larva, pupa o crisálida y
adulto o mariposa en un periodo de 50 a 55 días (figura 46).
La etapa de huevecillo (periodo de incubación) tiene una duración de siete
a 10 días, la etapa larval se divide en dos fases: la primera es la alimentación y el
crecimiento que dura de 25 a 30 días y la segunda de construcción de capullo que
PrinciPios básicos
63
dura de tres a cuatro días, la etapa de pupa (metamorfosis dentro del capullo) es de
10 a 14 días, y la etapa adulta que se refiere a la salida del capullo, apareamiento,
puesta de huevecillo y muerte es de tres a cinco días (Marmolejo, 1982).
Figura 46. Ciclo de vida del gusano de seda (fuente, Cenase de SLP).
64
Manual de sericultura en hidalgo
18.1 Huevo
La etapa de huevo abarca el periodo de descanso de la vida activa del gusano de
seda y de ahí pueden clasificarse varios tipos de razas o grupos biológicos. Las razas
se clasifican según el tipo de diapausa en univoltinos y polivoltinos. Los gusanos
univoltinos tienen un solo ciclo por año; los bivoltinos, dos ciclos anuales, mientras
que los polivoltinos tienen una diapausa muy pequeña por lo que pueden desarro-
llar varias generaciones anuales (Pescio et al., 2006).
La duración del estado de descanso depende de la raza y tipo de diapausa (o
dormición). Se conoce como diapausa a la suspensión del desarrollo. Los huevos
con diapausa son aquellos que presentan dos etapas de desarrollo embrionario, la
primera transcurre durante 48 horas, en las que se detiene el desarrollo del em-
brión, y la segunda etapa, la hibernación, de duración variable, y que necesita con-
diciones ambientales determinadas para activarse.
Los huevos de los gusanos de seda son redondos, tienen una medida de uno a
1.3 mm de longitud y de 0.9 a 1-2 mm de ancho, pueden ser ovalados, aplanados
o elipsoidales. Los huevecillos en el momento de la ovoposición presentan una
coloración blanco amarillenta que variará en las horas siguientes, hasta que, final-
mente, se convierte en gris plomiza (figura 47).
Figura 47. Forma y color del huevecillo del gusano de seda.
PrinciPios básicos
65
Las razas que producen capullos blancos provienen de huevos amarillo pálido
y las que producen capullos amarillos proceden de huevos amarillos. Las razas ja-
ponesas producen huevos más oscuros que las razas chinas.
La cascara del huevecillo está formada por materia quitinosa, con canales
microscópicos por los que entra el aire, permitiendo la respiración. El huevo pre-
senta un orificio, llamado micrópilo, el cual puede verse a simple vista como un
punto negro en uno de los extremos, es el lugar por donde nacerá la larva; antes
de la eclosión, y en un periodo de 10-12 días, el embrión completa su desarrollo
a temperatura ambiente. La larva, al momento de nacer, golpea con su cabeza el
micrópilo hasta lograr una abertura que le permita emerger. La eclosión requiere
una temperatura entre 20 y 25 grados centígrados.
18.2 Larva
El gusano de seda es monófago naturalmente, come únicamente la hoja de morera
durante la etapa larval. La larva necesita alimento adecuado y suficiente, así como
ambiente apropiado para desarrollarse con normalidad, libre de enfermedades, pe-
ligrosas para su vida, provocadas o favorecidas por una alimentación inadecuada o
por excesos de temperatura y humedad. El insecto en la fase adulta consume 98%
del total de alimento suministrado en su estado larval, 10% en el cuarto ínstar y
88% en el quinto ínstar (figura 48).
Figura 48. Larvas de gusano de seda
66
Manual de sericultura en hidalgo
El estado larval del gusano es el de mayor actividad, por que ocurren una serie
de procesos y cambios como son la alimentación, metabolismo, cambios de piel
(mudas), secreción de seda, purga, elaboración de capullos, etcétera.
Las larvas poseen una cutícula rígida que limita de modo efectivo el tamaño
del insecto, por tal razón sólo puede crecer eliminando su viejo exoesqueleto y
elaborando uno más grande, a este proceso se le llama muda.
La larva pierde el apetito, levanta la cabeza, el cuerpo se torna tenso y de color
cremoso y parece inquieto al momento de acercarse a la muda. El gusano de seda
comercial en la fase larval tiene cuatro mudas y se divide en cinco ínstares o edades
(Salice et al., 2001).
18.2.1 Edades o ínstares de la larva
Las larvas de primeras edades se alimentan con las hojas más tiernas de la planta,
de donde toman el agua necesaria para su buen desarrollo, como consecuencia de
su elevada actividad fisiológica, gran parte del agua obtenida de las hojas se evapo-
ra de su cuerpo, por tal razón, la disminución del agua del organismo de las larvas
reduce la acción negativa del calor.
La larva del gusano de seda recién nacida tiene muchas setas o pelos, los cua-
les le dan una apariencia de oruga peluda con un color negro a café oscuro, tiene
una medida de 3 mm de longitud. Los gusanos, cuando se alimentan con morera
durante tres días después del nacimiento, alcanzan una longitud de 7 mm y entran
en la primera muda que dura de 20 a 24 hrs; al iniciar su crecimiento comienza a
cambiar rápidamente su color debido al aumento de la cutícula de la piel (Cifuentes
y Kee-Wook, 1998).
Primer ínstar: dura cuatro días, va de la eclosión a la primera muda, con un tamaño
aproximado de 1 cm. La temperatura óptima a esta edad es de 26 a 28ºC, con hume-
dad relativa de 90 %. Durante este ínstar el porcentaje de ingestión de morera es de
25.2 y el de digestión es 65.7%. Del 100% suministrada al gusano en esta edad
consume alrededor de 20% y el restante 80% debe sobrar en la cama (figura 49).
PrinciPios básicos
67
Figura 49. Gusanos de primer ínstar.
La cantidad de hojas de morera necesarias para la cría de 20,000 huevecillos
a esta edad va de uno a dos kilogramos, el patrón estándar del requerimiento de
espacio, para la cantidad de huevecillos antes mencionado, es alrededor de 0.8 m2
(Marmolejo, 1982).
Segundo ínstar: Dura tres días, comienza después de la primera muda y finaliza en
la segunda, la larva mide aproximadamente 1.5 cm (figura 50).
Figura 50. Gusanos de segundo ínstar.
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Manual de sericultura en hidalgo
La temperatura óptima a esta edad es de 26 a 28ºC, con humedad relativa
de 85%. Durante este ínstar el porcentaje de ingestión de morera es de 35.3 y de
digestión es 53%. Del 100% suministrada al gusano, consume alrededor de 40%
y el restante 60% debe sobrar en el camarote. La cantidad de hojas de morera
necesarias para la cría de 20,000 huevecillos a esta edad va de cinco a seis kilogra-
mos para razas productoras de una y dos generaciones por año. El patrón estándar
del requerimiento de espacio para la cantidad de huevecillos antes mencionado es
alrededor de 2.0 m2.
Tercer ínstar: Dura de cuatro a cinco días, va de la segunda a la tercera muda, el
tamaño aproximado de la larva es de 2.5 cm. La temperatura óptima a esta edad
es de 24 a 26ºC, con humedad relativa de 80%. Durante este ínstar el porcentaje
de ingestión de morera es de 35.3 y de digestión 42.9%. Del 100% suministrada
al gusano en esta edad consume alrededor de 50% y el restante 50% debe sobrar
en el camarote. (Figura 51).
Figura 51. Gusanos de tercer ínstar.
La cantidad de hojas de morera necesarias para la cría de 20,000 huevecillos
a esta edad va de 20 a 25 kg. El patrón estándar de requerimiento de espacio, para
la cantidad de huevecillos antes mencionado, es alrededor de 4.5 m2.
PrinciPios básicos
69
Cuarto ínstar: Dura cinco días, comienza en la tercera muda y finaliza en la cuarta,
con un tamaño aproximado de 4 cm. La temperatura óptima a esta edad es de
24 a 25ºC, con humedad relativa de 75%. Durante este ínstar el porcentaje de
ingestión de morera es de 51.8 y de digestión 42.2%. Del 100% suministrada al
gusano consume alrededor de 70% y el restante 30% debe sobrar en el área de
crianza. (Figura 52).
Figura 52. Gusanos de cuarto ínstar.
La cantidad de hojas de morera necesarias para la cría de 20,000 huevecillos
va de 80 a 90 kg. El patrón estándar de requerimiento de espacio en esta edad,
para la cantidad de huevecillos antes mencionado, es alrededor de 10 m2 (Marmo-
lejo, 1982; Cifuentes y Kee-Wook, 1998).
Quinto ínstar: Dura de seis a ocho días, va de la cuarta muda al encapullado, con un
tamaño de larva de 10 cm aproximadamente (figura 53). La temperatura óptima
es de 23 a 24ºC, con humedad relativa de 70%. Durante este ínstar el porcentaje
de ingestión de morera es de 73.9 y de digestión 38.6%. Del 100% suministrada
al gusano en esta edad consume alrededor de 90% y el restante 10% debe sobrar
en el camarote. La cantidad de hojas de morera necesarias para la cría de 20,000
huevecillos va de 450 a 475 kilogramos.
70
Manual de sericultura en hidalgo
Figura 53. Gusano de quinto ínstar.
El patrón estándar de requerimiento de espacio en esta edad, para la cantidad
de huevecillos antes mencionado, es alrededor de 20 m2.
La larva alcanza su peso máximo uno o dos días antes de empezar a hilar el
capullo. La glándula de seda crece más rápidamente durante el quinto ínstar. El
gusano, cuando está desarrollado completamente, deja de comer, el integumento
larval se ve como trasparente, busca el lugar de encapullado. En esta etapa se le
llama gusano maduro, empieza a formar capullo más o menos en dos días, al ter-
minar el encapullado el gusano se transforma en pupa en dos días (Cifuentes y
Kee-Wook, 1998).
18.2.2 Morfología de la larva
El gusano de seda en su estado larval puede ser observado externamente con clari-
dad, con todas sus características, en la quinta edad. El cuerpo se encuentra dividi-
do en tres regiones bien definidas: cabeza, tórax y abdomen (figura 54).
PrinciPios básicos
71
Los tres segmentos seguidos a la cabeza conforman el tórax y la parte com-
prendida entre el cuarto y el treceavo segmento se llama abdomen (figura 55).
Figura 54. Morfología del gusano de seda.
Figura 55. Morfología de la larva del gusano en el quinto ínstar.
Entre cada segmento larval hay una membrana inter segmental, la cual facilita
el movimiento del gusano; del primer al tercer segmento encontramos tres pares
de patas torácicas, del sexto al noveno segmento cuatro pares de patas abdomi-
nales, y en el último se encuentra una pata trasera. Las patas torácicas le sirven
para sostener las hojas de morera durante la alimentación, mientras que las patas
abdominales y traseras sirven para el movimiento. Los espiráculos se encuentran
en ambos lados, del primero y del cuarto al onceavo segmentos, dando como re-
sultado nueve pares. Los gusanos comerciales generalmente tienen tres tipos de
manchas larvales: ocular en el segundo segmento, mancha creciente en el quinto y
mancha estelar en el octavo segmento.
72
Manual de sericultura en hidalgo
La parte exterior de la cabeza en la larva del gusano de seda está cubierta por
varios tamaños de esqueleto cefálico compuestos de quitina. En la parte superior
de la cabeza se encuentran dos placas parientales y, entre ellas, una placa frontal.
La sutura de estas tres placas muestran una forma de Y invertida (figura 56).
Figura 56. Morfología exterior de la cabeza del gusano de seda.
La cabeza de la larva del gusano de seda tiene varios órganos importantes; en
el centro, debajo de la placa frontal, se encuentra la parte bucal que está constituida
por un labio, un par de mandíbulas y un par de maxilas.
Las mandíbulas tienen la función de cortar la morera para ingerirla; en el cen-
tro del labio hay un pezón hilador a través del cual secreta el filamento de seda
desde las glándulas, al lado de las mandíbulas se encuentran un par de antenas que
sirven como órgano sensorial con el cual perciben los alimentos; hay seis ocelos en
cada lado de la base de las antenas, que sirven sólo para percibir la intensidad de la
luz, mas no para percibir figuras ni colores (figura 57).
El tórax está compuesto por tres segmentos llamados protórax, mesotórax y
metatórax, cada uno de estos segmentos torácicos tienen ventralmente un par de
patas, las cuales a su vez se dividen en segmentos. Las patas verdaderas son cóni-
cas y terminan en unas finas uñas distales. Las uñas no son usadas para moverse
sino para sostener las hojas de morera durante la alimentación (figura 58).
PrinciPios básicos
73
Figura 57. Cabeza y aparto bucal del gusano de seda en el quinto ínstar.
Figura 58. Anatomía del gusano de seda: cabeza, tórax, abdomen y cuerno caudal.
El abdomen está dividido en once segmentos de los cuales sólo nueve pueden
distinguirse, ya que los últimos tres están fusionados, el plato anal y patas caudales.
De el tercero al sexto y último segmento abdominal, existen un par de falsas patas
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Manual de sericultura en hidalgo
o pseudopatas, que realmente son prolongaciones o protuberancias musculares,
en el extremo de cada una de ellas se forma una especie de disco con una serie
de ganchos curvados y arreglados en semicírculos, sobre el lado dorsal del octavo
segmento abdominal las larvas tienen un cuerno o remo caudal.
18.2.3 Sistema integumentario del gusano
El integumento es la envoltura del cuerpo compuesta por uno o más tejidos que
sirven para aislar y proteger el cuerpo del medio ambiente. El gusano de seda, como
otros insectos, tiene exoesqueleto o esqueleto externo, el cual es rígido y su fun-
ción es proteger y sostener el cuerpo y sus órganos internos.
18.2.4 Sistema digestivo y nutrición del gusano
Los principales órganos internos son: intestino, glándula de seda, tráquea, sistema
nervioso, tubo de malpighi, vaso dorsal y órganos reproductivos. El sistema digesti-
vo ocupa la mayor parte del cuerpo del gusano de seda en el quinto ínstar (figura 59).
Figura 59. Anatomía interna de la larva en el quinto ínstar.
El suministro de alimento es indispensable para que el gusano mantenga su
maquinaria metabólica en funcionamiento para crecer y reproducirse. Los alimen-
tos ingeridos deben ser sometidos a manipulaciones previas, que implican su rup-
PrinciPios básicos
75
tura mecánica y enzimática, para llegar en una forma capaz de ser asimilada por el
gusano, esto se logra en el proceso de digestión, que es seguido por la absorción de
los materiales alimenticios por el cuerpo del gusano de seda. La masa de alimento
está constituida por las tres clases principales: hidratos de carbono, proteínas y
grasa. La forma del canal digestivo del gusano de seda se modifica según el desa-
rrollo de la etapa de transformación, debido al cambio de su función. La figura 60
muestra las diferentes formas del canal alimenticio en las tres etapas de desarrollo:
larva, pupa y polilla. La pupa y la polilla no ingieren nada de alimento, por tanto,
el canal alimenticio de la larva se degenera notablemente y se transforma para las
funciones distintas de la etapa de polilla.
Figura 60. Transformación del sistema digestivo del gusano de seda.
18.2. 5 Glándula sericígena del gusano de seda
La larva del gusano tiene un par de glándulas de seda, son el segundo órgano más
grande; están situadas en ambos lados ventrales del intestino medio y posterior y
pueden ser divididas en tres regiones diferentes: anterior, medio y posterior. Las
regiones anteriores de las glándulas sericígenas están reunidas en una, cerca de la
cabeza, abierta al pezón hilador que es una parte del labro (figura 6).
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Manual de sericultura en hidalgo
Figura 61. Estructura de la glándula de seda en el quinto ínstar.
La región posterior de la glándula es muy larga, con muchas curvas, y secreta
exclusivamente la fibroína, la proteína principal del hilo de seda que aporta entre 75
y 85% de la seda (Cifuentes y Kee-Wook, 1998).
18.2.6 Sexado de las larvas
Los caracteres sexuales secundarios no son distintos en la etapa larval, aunque el
crecimiento de la hembra es más rápido que el del macho, con relación al tamaño
y al peso, después de la segunda muda.
Figura 62. Discriminación sexual de las larvas del gusano.
PrinciPios básicos
77
Cuando el gusano llega al cuarto o quinto ínstar sus caracteres sexuales apa-
recen sobre el lado ventral del onceavo y doceavo segmento (figura 62), si se
observa la parte ventral posterior del abdomen se puede discriminar el sexo de los
gusanos de acuerdo al número y lugar de unos puntos lechosos pequeños.
18.3 Pupa
El estado de pupa (figura 34) es generalmente llamado de descanso, un estado
inactivo, cuando el insecto es incapaz de comer y aparece en completa quietud.
Es una fase transitoria durante la cual se definen cambios en la forma del insecto
(figura 63).
Figura 63. Forma externa de las pupas del gusano de seda.
La etapa de pupa es importante porque se produce la histólisis en algunos
órganos larvales, tales como la glándula sericígena, patas abdominales, ocelos, etc.
Otros órganos también cambian su forma y las funciones específicas en el adulto.
La duración de esta etapa es de 12 a 15 días, es relativamente fija, y finaliza cuan-
do la mariposa emerge del capullo (Pescio et al., 2006).
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Manual de sericultura en hidalgo
18.3 Palomilla
La polilla está constituida por tres partes: cabeza, tórax y abdomen. El cuerpo está
cubierto por escamas blancas y hay tres pares de patas y dos pares de alas en el
tórax (figura 64). Su función es exclusivamente la reproducción, no pueden volar
y tampoco alimentarse. La cabeza del adulto presenta dos antenas plumosas que
sirven para percibir el olor de las feromonas, especialmente las del macho, que son
más grandes (Salice et al., 2001).
Figura 64. Emergencia de polillas y reconocimiento de machos y hembras.
El sexo se puede diferenciar fácilmente en este estado, la hembra presenta un
cuerpo más voluminoso que el macho y en el centro ventral del octavo segmen-
to tiene una arruga en forma de X, su abdomen termina redondeado. El macho
presenta un abdomen más delgado y un punto corporal en el noveno segmento
ventral, su abdomen termina en punta (figura 65).
PrinciPios básicos
79
Figura 65. Apareamiento de polillas.
Al emerger del capullo, rápidamente los machos buscan una hembra para la
cópula, luego de lo cual ésta comienza a colocar huevos (figura 66).
Figura 66. Ovoposición de la polilla hembra.
Las polillas no se alimentan, sólo copulan, la hembra pone más o menos 500
huevos en su ciclo de vida y, en caso de no haber copulado, también ovopondrá,
aunque los huevos serán infértiles. Las mariposas mueren luego de tres a cuatro
días (Pescio et al., 2006).
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Manual de sericultura en hidalgo
19. Manejo del gusano en la fase de crianza
19.1 Camas de crianza para las larvas
La cría se realiza en camas longitudinales o bien en estantería de hasta cuatro pisos,
lo cual permite aprovechar de manera más plena la casa o sala de crianza (figura
67). La distancia entre las camas de crianza o de la estantería, debe permitir la
circulación de quienes atienden a los gusanos y el manejo de las charolas de ali-
mentación, en el caso de la cría en estantería.
La técnica de cría en estantería es un poco más complicada, pues requieren
esfuerzos físicos extra para la carga y rotación de las charolas de alimentación. Los
estantes pueden ser construidos de madera, metal o plástico. La altura entre pisos
de la estantería debe ser cuando menos de 50 cm y el ancho de los pasillos de un
metro, la longitud de las camas de alimentación depende del tamaño de la sala de
crianza (figura 68).
Figura 67. Camas de crianza para gusano de seda.
PrinciPios básicos
81
Figura 68. Estantería de crianza de gusano de seda.
Las divisiones de la estantería deberán ser un máximo de cuatro, para mane-
jarse en condiciones normales. Se debe aprovechar el momento de la alimentación
para rotar las charolas o bandejas de la comida, es decir, la charola de la parte infe-
rior se coloca en la parte superior y así sucesivamente, logrando con esto ventilar
uniformemente a todos los gusanos; con esto se evita que algunas charolas tengan
ventilación deficiente y otras estén en mejores condiciones. La sala de crianza debe
ventilarse por principio cada determinado tiempo, ya que la actividad fisiológica de
los gusanos de seda hace más denso el ambiente.
19.2 Manejo alimenticio
La cantidad de hojas que se requieren para una caja de gusanos (18,000 a 20,000
y de 11 gramos de peso) es variable, pudiendo ser entre 350 y 650 kg, dependien-
do de la variedad o raza de gusanos que se está criando, así como la estación del
año. Se deben tomar en cuenta, también, la temperatura y humedad de la sala de
crianza y la calidad de las hojas en campo.
Las hojas de las moreras, que servirán como alimento de los gusanos de seda,
deberán tener un color y brillo adecuado a su especie o variedad, no deben estar
sombreadas ni dañadas o contaminadas por insectos, aves o algún agente químico
(figura 69).
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Manual de sericultura en hidalgo
Figura 69. Colecta de hoja para alimentación de gusano.
Las hojas se cortan de acuerdo a la edad, en la primera edad se parten en tiras
de aproximadamente 1 cm, en la segunda edad de 2 cm y en la tercera edad entre
3 y 4 cm. Dependiendo de la cantidad de gusanos que se atienden, las hojas se cor-
tan en tiras manualmente con cuchillo o tijeras o bien con el apoyo de una máquina
cortadora, en el caso de explotaciones grandes (figura 70).
Figura 70. Alimentación de larvas de primer y segundo ínstar.
En las primeras tres edades, el número de veces que se alimentan las peque-
ñas larvas depende de la cantidad de alimento que se les proporciona; de acuerdo a
nuestra experiencia, es suficiente con dos alimentos, uno por la mañana temprano
y otro por la tarde-noche, siempre y cuando la cantidad de hojas sea suficiente.
PrinciPios básicos
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Otro detalle importante a considerar es que las bandejas o cajas de alimentación
se deben cubrir con papel encerado fino o con una lámina de polietileno delgado y
suave, para evitar la deshidratación rápida del alimento.
En la alimentación de los gusanos de seda de las primeras tres edades se uti-
lizan solamente las hojas más tiernas de las ramas. Para el corte se procede de la
siguiente manera: primero se toma con la mano la parte apical de la rama, de tal
manera que a partir de las hojitas que quedan libres se empiezan a cortar para los
gusanos de la primera edad (las más tiernas, cuatro o cinco hojas); para la segunda
edad se seleccionan las siguientes dos o tres hojitas y para la tercera edad, las si-
guientes dos (figura 71).
El sericicultor, con base en su experiencia, irá seleccionando aquellas hojas
más adecuadas para la alimentación de las larvas, de acuerdo a la textura y aspecto,
además de su valoración de la aceptación y consumo del alimento por las larvas.
Figura 71. Alimentación con hojas tiernas a gusanos de primer ínstar.
Para lograr tener hojas jóvenes, aproximadamente 35 días antes del inicio de
la eclosión de larvas se selecciona un pequeño lote, única y exclusivamente para
la obtención de los nuevos brotes. El resto de la plantación será utilizada en su
totalidad para la cría de los gusanos en su etapa adulta (cuarta y quinta edades).
La etapa adulta es la comprendida entre la cuarta y quinta edad, los gusanos
son particularmente menos exigentes para la temperatura y la humedad y pueden
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Manual de sericultura en hidalgo
criarse en condiciones domésticas normales, es cuando ya deben estar en manos
de los productores sericícolas.
En estas dos edades, los gusanos son también menos exigentes con la alimen-
tación que se les proporciona, es práctica común, inclusive, que en explotaciones
sericícolas grandes se les alimente con toda la rama con hojas, lo que simplifica
grandemente la actividad de alimentación.
Para la alimentación de los gusanos adultos, las ramas se colocan sobre las
camas, de inmediato, los gusanos trepan y consumen las hojas, y sobre las ca-
mas quedan únicamente las ramas desnudas, éstas van formando un grueso
colchón sanitario, donde caerá su excremento entre las ramas desnudas, evi-
tando que los gusanos tengan contacto con él y resguardándolos de algún tipo
de contaminación.
Figura 72. Alimentación con hojas y ramas a gusanos de cuarta y quinta edad.
La alimentación se da de tres a ocho veces durante el curso del día, incluyendo
la noche. Esta cantidad está en relación directa con el volumen de alimento, a mayor
volumen, menos número de veces y a menor volumen más número de veces.
Las ramas quedarán en la cama hasta la maduración de los gusanos, por lo
que deberá cuidarse a detalle su sanidad con medidas preventivas que eviten que
PrinciPios básicos
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se acumule humedad excesiva en la sala de crianza, pues esto trae como conse-
cuencia la aparición de hongos en las ramas de la cama. Para evitar la proliferación
de hongos es conveniente colocar, dentro de la sala, cal en piedra, que absorbe la
humedad excesiva. Cuando el problema es lo contrario, es decir, falta de humedad,
entonces es recomendable regar la sala de tiempo en tiempo durante el día y colo-
car trozos de esponja húmeda en distintos rincones. Otra medida sanitaria es evitar
que dentro o cerca de la sala de crianza se utilicen o almacenen productos quími-
cos, además que las ventanas y puertas estén protegidas contra hormigas, avispas,
aves o roedores, enemigos naturales de los gusanos de seda.
19.3 Manejo sanitario de crianza de gusano
El traslado de las larvas del lugar de compra a la sala de crianza deberá realizarse
en contenedores previamente desinfectados, en días tranquilos, cálidos, evitando
fuertes corrientes de aire, lluvia o luz directa del sol.
El área de crianza, previamente a la llegada de las larvas, deberá desinfectarse,
la entrada deberá contar con un pediluvio con formalina, para que todo aquel que
entre pise este tapete sanitario y desinfecte sus zapatos; ninguna medida de sani-
dad preventiva estará de más.
En la primera edad se debe cambiar la cama cuando menos una vez, durante
la segunda edad de una a dos ocasiones y durante la tercera unas dos o tres veces.
La limpieza se realiza con el apoyo de hojas de papel perforado, o bien con tela
de tul o redes plásticas diversas que es posible encontrar en el mercado. El papel
perforado, o la red, se coloca sobre la superficie de alimentación en donde están
las pequeñas larvas, posteriormente se distribuyen las hojas finamente cortadas
en tiras, para que las larvas se trepen atravesando las aberturas de la red, una vez
sucedido esto, se levanta la red y se coloca en otra charola limpia, finalmente, se
retira a el material no consumido que, junto con las excretas de las larvas, puede
ser aprovechado posteriormente como abono directo para el campo de moreras, o
bien para el área de compostaje.
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Manual de sericultura en hidalgo
En la fase de crianza, si se identifican gusanos enfermos, se recomienda re-
tirarlos y desinfectar el área de incidencia de la patología, asimismo, el manejador
de larvas enfermas o muertas no deberá entrar en contacto con las sanas sin previa
desinfección de las manos o guantes.
El acceso al área de crianza deberá ser sólo para personal autorizado, el creci-
miento del gusano es eficaz en ausencia de ruido y contaminantes como humo de
tabaco e incidencia de moscas.
19.4 Manejo de las mudas del gusano
La duración de cada muda es más o menos de un día en las edades de la primera
a la cuarta y de un día y medio después de la cuarta edad. La entrada en muda se
puede observar de manera muy clara, pues los gusanos dejan de comer, se fijan
fuertemente a la superficie, se notan incluso un poco brillantes y con tórax y cabeza
levantados, de cerca, se puede advertir, por encima de la cabeza, un evidente trián-
gulo de color café claro y cómo poco a poco se desprende la cabeza (figura 73).
Figura 73. Posición de muda del gusano de seda.
En el proceso de muda no se deben alimentar, no molestarlos y proveerles de
un ambiente tranquilo, sin ruidos excesivos. En caso de que la entrada en proceso
de cambio no sea homogéneo, se debe dar un poco de hoja picada a los retrasados,
para igualar en lo posible la muda de los gusanos.
PrinciPios básicos
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Cuando manejamos de manera correcta las crías de gusanos simplificamos su
manejo, tomando descansos en tiempos de muda, facilitando al máximo el mo-
mento cumbre de la actividad sericícola, que es justo la maduración de los gusanos
y la subida a los montajes.
La primera comida después de la muda debe realizarse con hoja tierna y pi-
cada en las primeras tres edades, y en las edades cuatro y cinco esto es menos
importante, sólo debemos proveerles siempre de hoja limpia y fresca.
20. Producción de capullo
20.1 Construcción del capullo
La maduración de los gusanos sucede entre el octavo o noveno día de la quinta
edad. El gusano maduro busca el sitio adecuado para la construcción del capullo.
En la producción existen diversos materiales de montaje donde el gusano realizará
eficientemente el capullo (figura 74).
Figura 74. Montajes para la construcción del capullo de seda.
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Manual de sericultura en hidalgo
Los gusanos tardan alrededor de 72 horas en el proceso de formación de los
capullos. El clima juega un papel fundamental para que logren su la maduración
plena; así tenemos que a mayor temperatura, por arriba de los óptimos para los
gusanos, éstos maduran más temprano, de la misma manera, a menor temperatura
la maduración se retrasa.
El tiempo de espera para proceder a cosechar los capullos es de entre siete
y nueve días a partir de que los gusanos suben al montaje. En este lapso los gu-
sanos de seda ya se han transformado en crisálidas o pupas. La cosecha no debe
retrasarse, pues hay el riesgo de que emerjan las palomillas, lo cual no es deseable,
pues con esta acción, el capullo se perfora y ya no sirve para devanarlo y obtener
los hilos continuos.
La cosecha comienza retirando los residuos de morera de las camas de crian-
za. Los capullos se cosechan uno por uno, depositándolos, sin golpearlos, en un
cesto. Al mismo tiempo se separan los anormales, que son los dobles, manchados,
muertos e incompletos.
20.2 Características productivas del capullo
El capullo de seda es una estructura de protección que los gusanos construyen con
un único filamento de seda, antes de su transformación en mariposa (figura 75).
Figura 75. Capullos de gusano de seda.
PrinciPios básicos
89
El capullo está conformado por cinco partes: la borra, la corteza, la pupa, el fo-
rro de la pupa y la piel del gusano. La borra corresponde a 0.6-0.9% del peso total
del capullo fresco o 1.5-2.5 del seco. El filamento es muy delgado y rompible: su
contenido de sericina es alto y no se puedo devanar. (Figura 76).
Figura 76. Limpieza de la borra del capullo.
El gusano, después de que forma la borra, empieza a hilar la corteza de afuera
hacia adentro y cada 15 a 20 vueltas de filamento cambia de posición; los fila-
mentos se pegan y poco a poco forman la corteza del capullo que constituye de
15-24% del peso total del capullo fresco y 42-53% del seco. La larva cuando hila
el filamento mueve la cabeza y va tejiendo en forma de “S” u “8”, lo cual tiene re-
lación con la raza del gusano, el medio ambiente, la temperatura, la humedad de la
caseta, la sección de la corteza, etcétera. (Figura 77).
Figura 77. Tipo de hilado en los capullos.
Fuente: Cifuentes y kee wook, 1998
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Manual de sericultura en hidalgo
20.2.1 Forma del capullo
La forma es una característica importante definida por la raza e influye en su ca-
lidad, generalmente cada raza de gusano tiene una forma de capullo diferente,
vista por afuera puede ser: redonda, elíptica, cónica, en forma de cacahuate, cintura
apretada y poco apretada (figura 78).
Los capullos con mucha cintura dificultan el devaneo ya que el despegue del
filamento es disparejo, por el contrario, si son más redondos es más fácil el proceso.
Figura 78. Diversas formas de capullos de seda.
20.2.2 Tamaño
El tamaño del capullo se mide por el diámetro de la cintura más amplia. Hay una
relación directa entre el diámetro y el grosor del filamento del capullo: a mayor
diámetro mayor es el grosor del filamento (figura 79).
Figura 79. Longitud y diámetro del capullo.
PrinciPios básicos
91
Las dimensiones del capullo son una característica importante para verificar
la calidad tecnológica del filamento, generalmente los capullos con tamaño grande
presentan una tendencia a poseer un filamento grueso y largo.
20.2.3 Color y brillantez
El color y la brillantez son dos aspectos distintos pero guardan relación entre sí.
Cuando el capullo es blanco, la brillantez es normal; si es menos blanco, el brillo
también es menor (figura 80). En el caso del capullo blanco grisáceo o amarillen-
to, la brillantez es mínima (Cifuentes y Sohn, 1998).
Figura 80. Color y brillantez del capullo.
20.2.4 Dureza
La dureza se mide al tacto, cuando el capullo es muy duro y de alta resistencia se
dice que tiene la corteza dura, al contrario, cuando es flojo, blando y de baja firmeza
es de corteza floja.
20.2.5 Filamento del capullo
El filamento está conformado por babas secretadas de las glándulas serígenas. Los
filamentos de seda generalmente tienen entre 20-30% de sericina y 70-80% de
fibroína. Los componentes de la fibroína y la sericina son: C, H, O, N y S.
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Manual de sericultura en hidalgo
La longitud del filamento depende de la raza, el sistema de encapullado, el
tiempo, etcétera. La longitud del hilo de un encapullado varía de entre 800 a
1,400 m.
21. Limpieza y secado de los capullos
Los capullos se limpian de la borra externa de manera manual o por medio de una
máquina desborradora. También, se deben secar para sacrificar las pupas y evitar
que emerjan las palomillas. En las grandes regiones sericícolas, los capullos ya lim-
pios se llevan a un centro de acopio para su secado o venta. (Figura 81).
En los centros especializados se selecciona un pequeño porcentaje de capullos
limpios, aquellos que cumplen con las características propias de las razas, líneas o
cruzas que se manejan, para elegirlos se abren mediante un cuidadoso corte, se
extraen las pupas y se determina su sexo. Las pupas ya seleccionadas y sexadas,
se colocan en charolas en cuyo fondo se ha instalado papel o cartón acanalado,
cubriéndose con papel periódico perforado y se espera la emergencia de las palo-
millas. (Figura 82).
Figura 81. Secado de capullos en horno con circulación de aire.
PrinciPios básicos
93
Figura 82. Selección de capullos para la producción de huevecillo.
22. Plagas
La mosca parasitaria una de las más comunes, pone sus huevos sobre la piel del
gusano de seda, las larvas incubadas entran al cuerpo su cuerpo e invaden varios
tejidos. (Cifuentes y Sohn, 1998).
23. Enfermedades
Según Pescio et al., (2006), las enfermedades que atacan al gusano de seda son
las siguientes:
Hongos
Murcardina blanca o calcinosis. Es causada por el hongo Beauverla bassiana.
La larva infectada se momifica y toma un aspecto de yeso.
Muscardina amarilla. Es causada por el hongo Beauverla bassiana. La muerte
es similar a la producida por la calcinosis, se diferencian porque, en este caso,
los cuerpos tienden a ser elásticos después de un periodo determinado.
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Manual de sericultura en hidalgo
Muscardina verde. Es causada por el hongo Nomuraea rileyi afecta principal-
mente a larvas jóvenes, se le denomina así debido al color verdoso que toma
la larva infectada luego de unos días de muerta.
Apergiolis, Aspergillus sp. Los gusanos al morir aparecen cubiertos de un mi-
lecio (hongo) de color variable. Las esporas pueden sobrevivir más de un año
dentro del sitio donde hubo la infección.
Bacterias
Desmayo bacterial, Bacillus thurigiensis. La infección es por vía oral, a través
de una sustancia tóxica que produce el desmayo y parálisis; después de muer-
ta, la larva se descompone rápidamente.
Septicemia bacterial, Pseudomonnas sp., Streptococus sp. Las bacterias en-
tran por heridas o los espiráculos del gusano, los cuales dejan de alimentarse,
vomitan y pierden capacidad de agarre.
Enfermedad intestinal, producida por bacterias que atacan cuando el estado
nutricional es deficiente. Los síntomas son pérdida de apetito, diarrea, mueren
después de dos o tres días.
Virus
Poliedrosis nuclear que se produce cuando los gusanos se infectan con hojas
de morera contaminadas, las larvas jóvenes son más susceptibles. Los agentes
de contaminación son los restos de los gusanos, se puede reconocer porque
comienzan a hincharse, toman el aspecto de una caña de bambú y la larva ca-
mina serpenteando. La muerte puede producirse entre cuatro a cinco días de
la infección. La piel del gusano se rompe y se pierde la hemolinfa (la sangre),
que provoca el contagio a otros gusanos.
Poliedrosis citoplasmática, es introducida por vía oral, a través de hojas de mo-
rera de mala calidad. Los gusanos infectados dejan de alimentarse y se retrasa
su desarrollo. La forma de distinguir la enfermedad es por los excrementos
que se vuelven blancos. Para confirmarla sólo es posible abriendo el cuerpo,
para observar que el intestino medio queda totalmente blanco.
PrinciPios básicos
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Protozoos
Pebrina, es causada por Nosema bombycis. La infección se disemina por dos
vías, una transovárica (llamada sexual) en la que las polillas madres transmi-
ten la enfermedad a sus huevos, y la otra, más frecuente, es la infección oral,
cuando los gusanos consumen material contaminado. Las hojas se pueden
contaminar en el campo, con los desechos del gusano. La enfermedad ataca
larvas, polillas o huevos. La larva infectada retrasa su crecimiento y consume
poco alimento y muchas no llegan a hacer la muda, luego pueden aparecer
manchas oscuras en su cuerpo. Las pupas infectadas se ponen oscuras e hin-
chadas, si la infección es leve, no se detecta. Las polillas infectadas tienen
eclosión anormal y alas deformes, la producción de huevos es escasa, con alto
índice de infertilidad.
Intoxicaciones
Se producen por el contacto de los gusanos con sustancias tóxicas, ya que
son muy sensibles a los productos químicos. La intoxicación se puede dar
por contaminación de las moreras, aplicación directa en el lugar de cría o bien
contaminación a través del productor. La muerte se produce rápidamente si la
intoxicación es por insecticida. Los síntomas son temblores, vómitos y arru-
gamiento del cuerpo, el gusano se mueve rápidamente hacia ambos costados
y termina en forma de U; puede ocurrir que no muera la larva, pero el capullo
formado será de mala calidad. Cuando la afección es por herbicidas o fungi-
cidas los síntomas son leves, incluso pueden sobrevivir, aunque se retrasa su
crecimiento, no se alimenta y el desarrollo es pobre, por lo que el capullo será
de mala calidad.
96
Manual de sericultura en hidalgo
PrinciPios básicos
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Colofón
... Las condiciones ambientales al interior del laboratorio de cría, estuvieron acordes a las necesidades de la especie estudiada (Pescio et al., 2008;Rodríguez et al., 2012;Chauhan & Tayal, 2017); la temperatura promedio registrada fue de 25 a 26°C y humedad relativa 70 a 80%. ...
... Los resultados encontrados en los periodos de formación de capullo, pupa, apareamientos y duración del periodo de oviposición de las polillas, indican que AECVC con 16,6 días presentó el menor valor, mientras que AEBB con 18,3 días obtuvo el mayor periodo, etapas similares a los reportes de Rodríguez et al., (2012); Chauhan & Tayal, (2017), Nunes et al., ...
... La variedad de morera empleada por el Proyecto de Sericultura Caucana para la alimentación de las larvas, durante la evaluación productiva fue la variedad Kanva 2, que es una planta que presenta hojas de tamaño medio, color verde intenso, de forma elíptica caudada, con base acuñada y borde aserrado no pendular, de lámina de grosor y borde liso (Rodríguez et al., 2012). ...
Thesis
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Evaluation and characterization of the genetic resources that conform the germplasm banks are relevant activities in breeding programs and are aimed at selecting individuals with high productive performance. The main limitation of Caucana sericulture is the lack of renewed genetic material, highly productive, resistant and / or tolerant to diseases, adapted to the climatic conditions of the department. In this context, six phenotypes of B. mori were evaluated and as a control (Pilamo II), in a completely randomized design with three replicas, the variables studied were: yield of cocoon production / 10,000 larvae (YCP); cocoon length (CL); percentage of raw silk (% RS); filament length (FL); duration of the biological cycle (DBC); Weight of the cocoon (WC) and weight of the shell (WS). The results presented significant differences (p <0.05), showing higher values and similar to the control, the best answer corresponded to: AECA with YCP = 17,6kg; AEBVC with CL = 3,57cm; AECVC with% RS = 19,4%; AEBB with FL = 1205m; AECVC with = 50,9days; AECA with WC = 1,84g; AECVC with WS = 0.372g. According to the observed results, the phenotypes are within the ranges reported for pure lines throughout the world and could be used in selection and crossing processes, since they would have a source of genes of importance for the development for materials that exceed the productive response of each one. Hybrid commercial of B. mori in Colombia. Additionally, these materials has to be preserve like gene reservoir for enlarge the genetic base of germoplasm bank, because it is one of the fundamental components of Sericultura Caucana Project.
... Larvae can even survive, but their growth is delayed, they do not feed and their development is poor. This produces poor quality cocoons, and even pupa death within them (Rodríguez-Ortega et al. 2012). Disease control. ...
... Las larvas pueden sobrevivir incluso, pero se retrasa su crecimiento, no se alimentan y su desarrollo es pobre. Esto produce capullos de mala calidad, e incluso la muerte de las crisálidas dentro de los mismos (Rodríguez-Ortega et al. 2012). ...
Article
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Bombyx mori L. is one of the most important species for silk production internationally. Being a domesticated species, there are certain factors to be considered during its breeding. This paper discusses the influence of certain factors on silkworm rearing. Reference is made to B. mori breeds and their peculiarities regarding their productive characteristics. In addition, the effects of certain environmental factors are explained, as well as their interaction with food and diseases that affect silkworm. Regarding the latter, the main strategies used for fighting them are mentioned. The interaction of larvae, environment, food and diseases influence mainly on B. mori rearing. The success of this agribusiness is determined by the strict control over these factors.
... Larvae can even survive, but their growth is delayed, they do not feed and their development is poor. This produces poor quality cocoons, and even pupa death within them (Rodríguez-Ortega et al. 2012). Disease control. ...
... Las larvas pueden sobrevivir incluso, pero se retrasa su crecimiento, no se alimentan y su desarrollo es pobre. Esto produce capullos de mala calidad, e incluso la muerte de las crisálidas dentro de los mismos (Rodríguez-Ortega et al. 2012). ...
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Bombyx mori L. is one of the most important species for silk production internationally. Being a domesticated species, there are certain factors to be considered during its breeding. This paper discusses the influence of certain factors on silkworm rearing. Reference is made to B. mori breeds and their peculiarities regarding their productive characteristics. In addition, the effects of certain environmental factors are explained, as well as their interaction with food and diseases that affect silkworm. Regarding the latter, the main strategies used for fighting them are mentioned. The interaction of larvae, environment, food and diseases influence mainly on B. mori rearing. The success of this agribusiness is determined by the strict control over these factors. Keywords: silkworm, breeds, environment, pathologies
... The breeds of B. mori can be classified according to geographic origin, germplasm bank of origin, voltinism (number of cycles in 1 yr), and moltinism (number of molts per larval cycle). Geographically four breeds are identified: Chinese, Japanese, European, and tropical (Liu et al., 2010); according to the germplasm bank, four large groups are identified: Japanese, European, Spanish, and the hybrid group (Cifuentes and Sohn, 1998;Castejón, 2013); according to voltinism they can be univoltines, bivoltines and polyvoltines; and by moltinism they can be classified into trimolter, tetramolter, and pentamolter (Rodríguez et al., 2012). ...
Article
Improvement programs depend on characterizing genetic resources, this process being the fundamental basis for determining the diversity and genetic divergence of such resources and thereby enabling a rigorous, efficient selection of the parentals that, through hybridization, will go on to enhance heterosis. The aim was to use the resulting hybrids to improve population mean with respect to genetic parameters used for the qualitative and quantitative traits that affect commercial natural silk production. Bombyx mori L. is a domesticated insect of global economic importance, mainly due to the production of natural silk but also for its relevance in rural agro-industry in tropical and subtropical regions. Non-textile uses currently being developed are also to the fore. These relate to such fields as science and academia, biomedicine, biotechnology, the pharmacological industry and cosmetics. With this in mind, the aim of the current article was to provide a general context for sericulture and in so doing give an overview of the silk production scenario nationally and go on to describe the importance of genetic diversity to silkworm breeding programs and to demonstrate how genetic drift, inbreeding, and artificial selection contribute to loss of genetic diversity in B. mori
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El objetivo de este trabajo es presentar la producción de seda en Paraguay, con destaque al desarrollo de la actividad en el Departamento de San Pedro, comprendiendo la importancia y los principales retos de este rubro para los agricultores familiares campesinos. Por lo tanto, fue realizada una revisión bibliográfica, sistematización de datos secundarios e investigación de campo. En San Pedro, la producción de seda empieza en 2014 con un convenio entre la empresa italiana Seda y Fibras, el Ministerio de Agricultura y Ganadería y los agricultores familiares campesinos. Para estos últimos, la actividad se convirtió de gran importancia, siendo considerada la principal fuente de ingreso de la finca. No obstante, surgen algunas dificultades derivadas de problemas climáticos, de la expansión de la soja y de la gran dependencia en la empresa. Sin embargo, el principal reto fue la suspensión del convenio y, consecuentemente, de la producción de seda en San Pedro, generando una profunda crisis entre los agricultores involucrados en la actividad.
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It is necessary to promote science in our current society and so this promotion both can and should begin in the earlier stages of education. However, for teachers of Early Childhood Education to be able to teach Science doing science, they need to have done science in their formative stage, that is, at university. This article analyzes the suitability of using silkworms as a resource to promote inquiry in the degree in Early Childhood Education. It shows an experience in which the students had to study the silkworm cycle and propose its application in the Early Childhood classrooms. The results are very positive: the students made different research proposals about the species, and they exposed that it had been very interesting. Besides, they said their interest in science had increased and that they would use this methodology in their future teaching work.
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Background : Sericulture, since its discovery in China, has spread to become a valued activity in a range of other countries. China remains the leading producer of silk, followed by India and other Asian countries, Europe, Brazil and Colombia. This article examines the evolution of sericultural research between 1892 and 2016, identifying the main themes and applications. Methods : The SciMat software tool and the Bibliometrix R package were used as tools for data analysis in this study, based on records from the Clarivate Analytics Web of Science and SCOPUS databases. Results : The results show that research has been growing, both in number of publications from the 1990s onwards, and in the emergence of topics closely related to the sericulture research field, a field that proves to be multi-disciplinary, exhibiting expansion and vitality. Conclusions: The information gathered will contribute greatly to the definition of relevant research strands, bearing in mind a number of significant gaps in information in this field. It will furthermore provide a better insight into the development of sericulture research over time.
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El experimento se llevó a cabo en la Estación Experimental de Ganado Lechero “Alfredo Volio Mata” de la Universidad de Costa Rica. La semilla vegetativa se extrajo de una plantación establecida y sometida a cosecha intensiva a intervalos de 56 a 112 días durante cuatro años. Las ramas seleccionadas fueron divididas en tres secciones, extrayéndose una estaca típica de 40 cm de largo, con al menos tres yemas, en las secciones basal, medial y apical de cada rama. El mayor porcentaje de brotes, en un periodo de 35 días, se observó en las ramas de 112 días de edad, siendo un 9% foliares, 12% radiculares y 31% en ambos extremos. Se estimó que la edad óptima de la rama para lograrse la máxima brotación total fue a los 117 días. Las estacas extraídas de la parte basal y medial de la rama mostraron un 10% más de brotes foliar y radicular que en la estaca proveniente de la parte apical. La estimulación con AIB sobre la brotación total de yemas y raíces mostró diferencias apreciables (P≤0,01) entre la aplicación y no aplicación de AIB. Dependiendo de la edad de la estaca y el lugar de extracci ón de la rama, el uso de AIB estimuló entre 11 y 15% la brotación total de las estacas.
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A study was carried out in areas of the EEPF "Indio Hatuey" in order to evaluate the morphoagronomic performance of four mulberry (Morus alba L.) varieties (Criolla, Indonesia, Cubana and Tigreada), during the establishment stage of transplanted plants. The vegetative material (seedlings) was placed in a nursery for 120 days. The bud emergence dynamics was significantly higher in the varieties Indonesia, Tigreada and Cubana as compared to the Criolla. The variety Tigreada reached the highest average development rate of new branches (0,25 branches/day), although without significant differences with regards to the other varieties. The branch length was higher in the var. Tigreada (0,89 cm as average per day), followed by the varieties Indonesia, Cubana and Criolla (0,77; 0,73 and 0,63 cm/day, respectively). Nevertheless, the branch diameter was higher in the varieties Cubana and Criolla. The variety Indonesia had a significant growth in height and diameter of the stem base (154 cm and 14,6 mm) with regards to the rest of the varieties. All this had a remarkable impact on leaf production, in which the variety Tigreada stood out; it was followed, although with significant differences among themselves, the varieties Indonesia, Cubana and Criolla. Tigreada and Indonesia were concluded to be the varieties of better morphoagronomic performance during the establishment; the former had a high potential of leaf production and the latter showed a remarkable capacity of ligneous tissue accumulation.
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The performance of 9 mulberry cultivars Indonesia, Tigreada, Acorazonada and Criolla, and hybrids IZ-64, IZ-13/6, IZ-40, IZ-15/7 and IZ-56/4 during the nursery stage were evaluated. Indonesia recorded the highest survival (98%), number of buds per cutting (3.1), branch length (32.02 cm) and number of leaves (3.1 buds per plant). Differences among the hybrids in terms of the values of the parameters measured were not recorded.
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Summary Mulberry (Morus spp), the traditional feed for the silk worm, has been selected and improved for leaf yield and quality in many environments and is spread throughout the world. Mulberry leaves are highly palatable and digestible (70-90 %) to herbivorous animals and can also be fed to monogastrics. Protein content in the leaves and young stems, with a good essential amino acid profile, varies from 15 to 28 % depending on the variety. Mineral content is high and no anti-nutritional factors or toxic compounds have been identified. The establishment of this perennial forage is through stakes or seed, and it is harvested by leaf picking or cutting whole branches or stems. Yields depend on variety, location (monthly temperature, solar radiation and rainfall ), plant density, fertilizer application and harvesting technique, but in terms of digestible nutrients, mulberry produces more than most traditional forages. The leaves can be used as supplements replacing concentrates for dairy cattle, as the main feed for goats, sheep and rabbits, and as in ingredient in monogastric diets.
Sericulture in the tropics. Pub. By Association for international cooperation of Agriculture and forestry
AICAF. 1995. Sericulture in the tropics. Pub. By Association for international cooperation of Agriculture and forestry, Japan 150 p.
Principles of Sericulture (Translated from Japanese). A.A. Balkema/Rotterdam
  • H Aruga
Aruga, H. 1994. Principles of Sericulture (Translated from Japanese). A.A. Balkema/Rotterdam. pp. 376.