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MANEJO INTEGRADO
DE INSECTOS HERBÍVOROS
EN SISTEMAS GANADEROS SOSTENIBLES
Editores
Karen Castaño Quintana
Julián Chará Orozco
Carolina Giraldo
Zoraida Calle
MANEJO INTEGRADO
DE INSECTOS HERBÍVOROS
EN SISTEMAS GANADEROS SOSTENIBLES
ISBN 978-958-9386-92-7 Impresión
ISBN 978-958-9386-93-4 Digital
Editores
Karen Castaño Quintana
Julián Chará Orozco
Carolina Giraldo
Zoraida Calle
Cali - Colombia
Manejo integrado de insectos her-
bívoros en sistemas ganaderos sostenibles /
Castaño Quintana, Karen; Chará Orozco, Ju-
lián; Giraldo, Carolina; Calle, Zoraida. -- Cali,
CIPAV, 2019
306 páginas ilustradas
ISBN 978-958-9386-92-7 Impresión
ISBN 978-958-9386-93-4 digital
1. Ganadería sostenible – 2. Sistemas silvo-
pastoriles. – 3. Control biológico de insec-
tos. – 4. Manejo integrado de plagas – 5.
Insectos herbívoros. – 6. Hormiga arriera:
Aa cephalotes. – 7. Insectos en sistemas
ganaderos. – 8. Problemas del control quí-
mico. -- I. Karen Castaño Quintana, Julián
Chará Orozco, Carolina Giraldo, Zoraida Ca-
lle, Editores; Juan Fernando Escobar, Juan
David Sánchez, Carolina Giraldo, Francisco
López Machado, Taana Meza, Fotógrafos.
-- II. Título
632.96 CD 21
Fundación Centro para la Invesgación en
Sistemas Sostenibles de Producción Agro-
pecuaria CIPAV.
CIPAV - Fundación Centro para la
Invesgación en Sistemas
Sostenibles de Producción Agropecuaria
Carrera 25 No. 6-62 Barrio El Cedro
Cali, Valle del Cauca, Colombia
A.A. 20591
Teléfono (57) (2) 524 30 61
Fax: (57) (2) 519 00 61
e-mail: cipav@fun.cipav.org.co
hp://www.cipav.org.co
Título
Manejo integrado de insectos
herbíboros en sistemas ganaderos
sostenibles
Editores
Karen Castaño Quintana
Julián Chará Orozco
Carolina Giraldo
Zoraida Calle
Fotograas portada
Juan Fernando Escobar
Juan David Sánchez
Carolina Giraldo
Fotograas contraportada
Juan Fernando Escobar
Francisco López Machado
Juan David Sánchez
Taana Meza
Ilustraciones
Naturaleza Creava
Diseño gráco
José Antonio Riascos de la Peña
Impresión
Ingeniería Gráca S.A.
Primera edición, noviembre 2019
ISBN 978-958-9386-92-7 Impresión
ISBN 978-958-9386-93-4 Digital
Para citar este libro:
Castaño-Quintana, K., Chará, J.,
Giraldo, C., Calle, Z. 2019. Manejo
integrado de insectos herbívoros
en sistemas ganaderos sostenibles.
CIPAV, Cali Colombia. 306p.
108
Karen Castaño-Quintana1,2
Revisión de la biología y métodos de control
de la hormiga arriera Aa cephalotes
(Hymenoptera: Myrmicinae)
CAPÍTULO 5
1
Centro para la Invesgación en Sistemas Sostenibles de Producción Agropecuaria – CIPAV, Cali, Colombia.
2
Grupo GEAHNA, Universidad del Valle, Cali-Colombia
karen@fun.cipav.org.co
109
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Las hormigas cortadoras de hojas, también llamadas arrieras, son insectos herbívoros
de amplia distribución en Colombia. Estas hormigas son reconocidas como plaga en el
sector agrícola, forestal y pecuario, debido al corte y transporte de grandes candades de
material vegetal fresco al interior del nido para culvar un hongo, con el que manenen
una relación simbióca mutualista. En ncas ganaderas, el daño de las arrieras se ve
reejado en la disminución del alimento a causa de la defoliación de pastos y plantas
para el ganado. Como método de control, la mayoría de los productores y campesinos
ulizan productos de síntesis química para atacar a las hormigas cortadoras de hojas.
Sin embargo, este método no es eciente y genera diversos impactos negavos en
la salud humana y animal, en el medio ambiente y en la economía de la nca. Es por
esta razón que, en el presente capítulo, se comparte información importante sobre
aspectos biológicos y métodos de control de las hormigas cortadoras de hojas, para
tener en cuenta a la hora de seleccionar las estrategias más adecuadas que se ajusten
a las condiciones del productor y de cada nca.
Resumen
110
Introducción
Las hormigas cortadoras de hojas o arrieras, como se conocen comúnmente en
Colombia, son un grupo de insectos perteneciente a la familia Formicidae dentro del
orden Hymenoptera. Estas hormigas son reconocidas por su hábito de cortar y cosechar
una gran candad de material vegetal fresco, que incluye principalmente hojas, así
como ores, frutos, tallos y semillas de diversas especies de plantas (Della Lucia 2011)
(Figura 1). Por esta razón, las hormigas cortadoras de hojas son consideradas los
principales herbívoros de los ecosistemas Neotropicales (Wirth et al. 1997, Hölldobler
& Wilson 2011) y su impacto se relaciona con el corte y transporte de millones de
fragmentos de hojas que pueden alcanzar una cifra anual entre 70 y 500 Kg de material
vegetal seco por nido (Correa et al. 2016).
Figura 1. Obreras de hormiga arriera Aa cephalotes cosechando material vegetal (hojas y semillas) para
ingresar al nido.
111
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
En Colombia, las hormigas arrieras son conocidas en todas las regiones del país, espe-
cialmente en el sector agropecuario, debido a la frecuente presencia de estos insectos
en el campo, donde los productores y campesinos las perciben como organismos plaga.
En ncas ganaderas, por ejemplo, los productores deben enfrentarse al daño ocasio-
nado por la defoliación que las hormigas arrieras realizan a las plantas forrajeras y
pastos de los predios, lo cual afecta la candad de alimento disponible para el ganado
(Contexto ganadero 2016).
Figura 2. Hormiga arriera en la Hacienda El Haco, El Cerrito, Valle del Cauca. Izquierda: Parte exterior del
nido con numerosas bocas. Derecha: Ataque a árbol de caoba Swietenia macrophylla.
112
Giraldo (2005) también conrma este hecho al reportar que, durante la implementación
y desarrollo de sistemas ganaderos sostenibles en tres municipios del eje cafetero de
Colombia, estas hormigas ocasionan un problema importante en el establecimiento
inicial de silvopastoriles intensivos, cercos vivos, y arborización de potreros, debido al
ataque sobre plántulas y arbustos, tanto en la etapa de vivero como recién plantados
en los potreros.
113
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Si bien las hormigas cortadoras de hojas son ampliamente conocidas en el país, el
control de estos organismos en los sistemas producvos es aún poco eciente. Prueba
de ello es la búsqueda constante de productos y métodos para combar estas hormi-
gas en zonas rurales y urbanas de Colombia. En el municipio de Cali, por ejemplo, se
desnan anualmente alrededor de 50 millones de pesos del presupuesto municipal
para inverr en el control de esta especie, debido a la alta densidad de hormigueros en
zonas verdes de la ciudad (Chacón de Ulloa et al. 2019).
La poca eciencia en el control de las hormigas arrieras se
debe, en parte, a que no se enen en cuenta aspectos
biológicos y comportamentales de estos organismos a
la hora de diseñar los diferentes métodos para con-
trolar sus poblaciones. Entre los comportamientos
mas observados en estos insectos está el recono-
cimiento de sustancias tóxicas que perjudican a
las hormigas o al hongo simbionte (Della Lucia
2011). Una vez es detectada la sustancia en
cuesón, las obreras transportan el producto
tóxico hacia cámaras aisladas del nido (Ma-
rinho et al. 2006) o lo descartan fuera del
hormiguero.
Por esta razón, en este documento se com-
parte información biológica importante
para tener en cuenta en el momento de se-
leccionar un método de control para este in-
secto. También se presenta información re-
copilada sobre las diferentes experiencias de
manejo en el ámbito nacional e internacional,
con el n de que los productores y campesinos
tengan a la mano amplias opciones de manejo y
puedan seleccionar las estrategias que mejor se
ajusten a sus condiciones.
114
Las hormigas cortadoras de hojas son un grupo de insectos sociales, que, como se
mencionó anteriormente, se caracterizan por el corte y acarreo de material vegetal,
especialmente de hojas frescas, al interior de su colonia. Sin embargo, lo que algunos
desconocen es que el transporte de forraje hacia el interior del nido se realiza con
el n de culvar internamente un hongo para su alimentación. Las hormigas arrieras
hacen parte de los pocos animales que culvan hongos simbiontes para alimentarse,
conformando de esta forma un grupo especial dentro de las hormigas, llamado Tribu
Ani. Es así como toda esta labor de corte y acarreo es realizada para ofrecerle al
hongo los nutrientes necesarios para su crecimiento y desarrollo (Marnez & Servin-
Montoya 2002, Della Lucia 2003).
El hongo culvado por las hormigas pertenece a la familia Lepiotaceae (Agaricales:
Basidiomycota) dentro del grupo de los Basidiomicetos, y género Leucocoprinus
(Mueller et al. 2017), el cual es transmido vercalmente dentro de las especies de
hormigas. Esto quiere decir que el hongo es transmido de generación en generación
y esa transferencia sucede antes del vuelo nupcial, cuando futuras reinas recogen un
trozo del hongo con el cual comenzarán una nueva colonia, después de aparearse.
Dentro de la colonia el hongo es un organismo fundamental ya que es empleado para
alimentar a las hormigas, especialmente a la reina y a las larvas (Hölldobler & Wilson
1990, Fernández et al. 2003) (Figura 3). Por esta razón, algunos métodos de control
están enfocados en contaminar el hongo, para así atacar indirectamente a las hormigas
y dejarlas sin alimento. Sin embargo, las hormigas no son las únicas que se benecian
en esta relación. Debido a que el hongo necesita de la ayuda de las hormigas para su
crecimiento y dispersión, se considera su relación como una simbiosis mutualista, es
decir, que tanto las hormigas como el hongo se benecian y dependen el uno del otro
de manera obligada.
Hormigas cortadoras de hojas
Figura 3. Interior de un nido de hormiga arriera. Izquierda: Cámara subterránea con hongo simbionte.
Derecha: Hongo simbionte con presencia de la reina y obreras.
115
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Las hormigas de los géneros Aa y Acromyrmex son las únicas que emplean mate-
rial vegetal fresco para culvar el hongo simbionte (Della Lucia 2011). Por esta razón,
las hormigas pertenecientes a estos dos
géneros son conocidas como hor-
migas cortadoras de hojas
(Figura 4). De acuerdo con
Fernández et al. (2015),
existen 19 especies del
género Aa y 30 es-
pecies de Acromyr-
mex, distribuidas
desde Texas (EE.
UU.) hasta el nor-
te de Argenna.
Es decir, las hor-
migas arrieras se
encuentran única-
mente en el con-
nente americano.
En Colombia se en-
cuentran ambos gé-
neros, siendo más co-
mún el género Aa, el
cual está representado por
cuatro especies: Aa cephalo-
tes, Aa colombica, Aa laevigata y
Aa sexdens. La especie A. cephalotes ha sido registrada en 29 de los 32 departamen-
tos del país, solamente en Atlánco, Guajira y San Andrés y Providencia, no se han
reportado nidos de esta especie (Fernández et al. 2015). A connuación, se presenta
información sobre los nidos de Aa y Acromyrmex.
Caracteríscas principales de los nidos de hormigas cortadoras
de hojas Aa y Acromyrmex
116
Como todas las hormigas, las arrieras presentan una compleja organización social que
según Hölldobler & Wilson (1990), se caracteriza por:
1. Las hormigas obreras protegen y alimentan a las crías que se encuentran en dife-
rentes estados de desarrollo (huevo, larva y pupa).
2. En un mismo periodo de empo convive la reina y sus hijas obreras, lo cual se de-
nomina superposición de generaciones.
3. Existe una clara división del trabajo donde se disngue la casta reproductora (rei-
nas y machos) de la casta obrera.
Las hormigas cortadoras de hojas están compuestas por grupos de hormigas o castas.
Una casta es un grupo de individuos, que se especializan en desempeñar ciertas funcio-
nes o acvidades (Della Lucia 2011). En conjunto, las diferentes castas contribuyen al
efecvo funcionamiento y reproducción de la colonia. En una colonia se pueden presen-
tar tres grupos de hormigas: Reina, zánganos o machos y obreras (Fernández et al. 2015).
Tabla 1. Caracteríscas de los nidos de hormigas cortadoras de hojas.
Género Aa Género Acromyrmex
Las colonias alcanzan un gran tamaño.
Algunos nidos de Aa cephalotes pueden
superar los 900 m2 de área externa (Chacón
de Ulloa et al. 2019)
Las colonias son de menor tamaño que las de
Aa. Nidos de Acromyrmex rugosus reportan
áreas externas de 9,89 m2 (Versa et al. 2007).
Los nidos enen un gran número de
cámaras en su interior. El número promedio
de cámaras reportadas para Aa laevigata
es de 1.149 (en una colonia madura)
(Holldobler & Wilson 2011).
Las colonias enen pocas cámaras al interior
del nido. El número de cámaras reportadas
para Acromyrmex rugosus rugosus es de 26
(Versa et al. 2007).
Nidos más profundos.
Se han encontrado cámaras entre 7 y 8
metros de profundidad (Holldobler &
Wilson 2011).
Nidos menos profundos que los de Aa.
Se han encontrado cámaras del nido que
sobrepasan los 4 metros de profundidad en
A. landol (Della Lucia 2011).
Población abundante (de 1 a 7 millones
de hormigas, dependiendo de la especie)
(Fowler et al. 1986)
Alcanzan poblaciones de entre 10.000 y
20.000 hormigas (Fernández et al. 2015).
Tienen casta de hormigas grandes llamadas
soldados, que aparecen cuando la colonia
alcanza la madurez (aproximadamente a los
3 años) (Fernández et al. 2015).
No enen casta de soldados.
Organización social y castas
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Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
1. Reina
La reina es la hormiga más grande de la
colonia, llega a medir alrededor de
2,5 cm de longitud (Figura 5) y ene
la función de perpetuar la especie
a través del proceso reproduc-
vo. La reina es la única hormiga
de la colonia, que puede poner
huevos ferlizados y llega a
producir de 150 a 200 millones
de hormigas hembras durante
todo su empo de vida (Hölldo-
bler & Wilson 2011), que está
alrededor de 15 años (Fernández
et al. 2015). Durante los procesos
de manejo y control, extraer la reina
del nido es un método efecvo ya que
elimina directamente a la única hormiga
capaz de reproducirse. Figura 5. Reina de la hormiga arriera Aa cephalotes.
Figura 6. Zángano o macho alado de Aa cephalotes.
2. Zánganos o machos alados
Los zánganos son los únicos machos
en la colonia y solo se encuentran
durante las épocas de produc-
ción de nuevos nidos. Miden
alrededor de 2 cm de longitud
y enen una función netamen-
te reproducva (Figura 6). Se
encargan de proveer de esper-
ma a la reina, mientras ella lo
almacena y manene vivo por
muchos años en un órgano es-
pecial del aparato reproductor
llamado espermateca. Los machos
viven un empo muy corto y mue-
ren después de la cópula que ocurre
durante el vuelo nupcial (Vélez 1997).
118
3. Casta de obreras
Las obreras componen la mayoría de
las hormigas que se encuentran en
la colonia (Figura 8). Presentan un
polimorsmo marcado con fuer-
tes diferencias en tamaño y pro-
porción anatómica (Hölldobler
& Wilson 2011). En el caso del
género Aa, se pueden encon-
trar tres subcastas de obreras:
mínimas, medianas y mayores
(Weerer 1999).
A diferencia de la reina, las obreras
pueden vivir muy poco, desde un mes
hasta un año (Fernández et al. 2003).
Figura 8. Obreras de A. cephalotes, se observan
diferentes tamaños.
Figura 7. Alados hembra (derecha) y macho (izquierda) de Aa cephalotes después del vuelo nupcial.
La hembra en proceso de excavación para la construcción de la nueva colonia.
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Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
3.2. Obreras medianas
Son de mayor tamaño que las obre-
ras mínimas (ancho de la cabeza
entre 0,8 a 2,2 mm), y enen las
funciones de cortar y transpor-
tar el material vegetal al inte-
rior del nido (Figura 10), par-
cipar del culvo del hongo,
ayudar a construir las cámaras
y túneles al interior del nido y
rerar los desechos que se ge-
neran como: hormigas muertas,
material contaminado, trozos de
hongo contaminado o muerto, en-
tre otros.
Figura 9. Obreras mínimas de A. cephalotes realizando la labor
de cuidar a los estados inmaduros (larvas y pupas) (Izquierda)
y de ayudar en el culvo del hongo simbionte (Derecha).
3.1. Obreras mínimas
Son de tamaño pequeño (con ancho de la cabeza entre 0,8 a 1,6 mm), enen la la-
bor de culvar el hongo simbion-
te dentro de la colonia, así
como cuidar y alimentar
a las crías y a la reina
(Figura 9). En algu-
nos casos, obre-
ras mínimas son
observadas fuera
del hormiguero,
en la pista de
forrajeo. Se con-
sidera que estas
hormigas se en-
cargan de mante-
ner la feromona de
pista, usada por las
hormigas para marcar
el camino entre el nido y las
plantas que son cortadas.
Figura 10. Obrera mediana ayudando a transportar
material vegetal al interior del nido.
120
3.3. Obreras mayores
Son conocidas también como hormigas soldados que se encargan principalmente de
la defensa de la colonia, al enfrentar grandes enemigos, especialmente vertebrados
(Hölldobler & Wilson 2011). También colaboran en el corte de material vegetal de gran
tamaño. Se caracterizan por poseer grandes mandíbulas y el ancho de su cabeza varía
entre 4,4 y 8,8 mm (Giraldo-Echeverri 2009).
Figura 11. Arriba: Soldado de hormiga arriera.
Abajo: soldado y obreras medianas de Aa cephalotes.
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Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Cuando un nido de hormiga arriera está maduro (más de tres años de conformado), la
reina decide propagar su especie en la naturaleza, para lo cual, empieza a poner hue-
vos especiales que van a dar origen a futuras reinas y zánganos (Figura 12).
Reproducción y fundación de nuevas colonias
Figura 12. Grandes larvas y pupas de hormiga arriera
(Izquierda) se transformarán en reproductores alados (Derecha).
122
Para algunas zonas de Colombia, en dos periodos del año (abril-mayo y octubre-
diciembre) que coinciden con las épocas de lluvia, nacen y emergen del nido las reinas
y machos, los cuales vuelan y copulan en el aire. Este comportamiento se conoce
como vuelo nupcial y es el preámbulo a la colonización y fundación de nuevos nidos.
La futura reina copula con varios machos (se ha reportado de tres a ocho machos en
reinas de la hormiga A. sexdens), para guardar gran candad de esperma en su interior.
Se calcula que cada reina almacena aproximadamente 200 a 320 millones de células
espermácas (Hölldobler & Wilson 2011), y luego se enerra para formar el nuevo
hormiguero (Figura 13). El macho por su parte muere pocas horas después de la cópula.
Figura 13. Formación de nuevas colonias de las hormigas cortadoras de hojas Aa cephalotes.
A. Reina alada excavando para formar el nuevo hormiguero.
B. Reina enterrándose durante la formación del hormiguero.
C. Interior de un nuevo hormiguero de A. cephalotes.
A
B
C
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Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Figura 14. Nido incipiente de hormiga arriera A. cephalotes.
Después del vuelo nupcial las reinas jóvenes se encuentran expuestas en el suelo
mientras realizan la excavación de su nuevo nido, proceso que puede tomar algunas
horas y durante el cual es muy fácil capturar las reinas y así evitar la formación de
nuevos hormigueros. De igual manera, las reinas son vulnerables al ataque de aves o
mamiferos. Las reinas que consiguen nalizar la excavación construyen una pequeña
cámara entre 20 y 30 cm de profundidad (a veces menos), después de cerrar el ingreso
desde el exterior (Hölldobler & Wilson 2011). Debido a su poca profundidad, es
relavamente sencillo realizar su extracción.
La formación del nuevo nido se puede observar externamente a través de la presencia
de un pequeño monculo de erra (Figura 14), el cual aparece con el nacimiento de las
primeras obreras, aproximadamente 60 días después del vuelo nupcial.
124
Las hormigas cortadoras ofrecen diferentes funciones ecológicas importantes en la na-
turaleza como la dispersión de semillas, la incorporación de nutrientes al suelo, y la
descompactación y remoción de suelo (Montoya-Lerma et al. 2012). En Panamá, por
ejemplo, la especie Aa colombica incrementa las concentraciones de macronutrien-
tes en los nidos, comparado con suelos de áreas circundantes donde no hay nidos de
hormigas (Haines 1978).
A pesar de estos benecios eco-
lógicos, las arrieras han sido
acusadas de ser organis-
mos plaga, especial-
mente por el sector
agrícola y forestal,
debido a su hábito
de cortar una gran
variedad de vege-
tación. Esta defo-
liación conlleva
a la disminución
de la producción
en los culvos,
afectando la ren-
tabilidad de los
sistemas agrope-
cuarios.
Sin embargo, calcu-
lar las pérdidas eco-
nómicas resultantes del
ataque de las hormigas
cortadoras es dicil debido al
amplio rango de daño que ellas
causan (Knapp 1990). De acuerdo con
Montoya-Lerma et al. (2012), las hormigas cortadoras de hojas se consideran una pla-
ga “cuando su presencia y abundancia amenazan el retorno o la ganancia de una in-
versión en una granja, disminuyendo la candad y/o calidad de un producto agrícola’’.
Debido a la distribución principalmente tropical de las hormigas arrieras, los culvos
más atacados son el café, cacao, cítricos, yuca y algodón (Montoya-Lerma et al. 2012).
Se calcula que 47 culvos agrícolas y horcolas y 13 especies de pastos son atacados
por las cortadoras de hojas (Fernández et al. 2015). También, algunas especies que se
encuentran en bosques o especies ulizadas en sistemas silvopastoriles son afectadas
(Cherre 1968, Moulaert et al. 2002, Montoya-Lerma et al. 2012).
¿Por qué la hormiga arriera es considerada plaga?
125
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
En ncas ganaderas la hormiga arriera constuye un problema por la defoliación de
plantas forrajeras y pastos. En Colombia, los sistemas silvopastoriles intensivos con
Leucaena leucocephala (Lam.) de Wit son altamente atacados por las arrieras, limitan-
do el culvo durante la fase de establecimiento (Giraldo 2007).
En Cuba la situación es similar. Los culvos de L. leucocephala ulizados en alimenta-
ción animal, son altamente sensibles al ataque de Aa insularis, especialmente duran-
te el período de establecimiento de las plántulas (Barrientos 1987).
Por su parte, Serrano et al. en el año 1993
encontro que Acromyrmex landol
y Aa laevigata son las hormigas
arrieras más importantes de pas-
tos en América del Sur. Las colo-
nias pequeñas de A. laevigata
muestran una alta preferen-
cia por los pastos y son más
diciles de controlar, cau-
sando un mayor daño eco-
nómico a los paszales. La
hormiga Ac. landol puede
ser responsable de pérdidas
de producvidad de hasta el
98% en los pastos de ganado
en la región de Caquetá en
Colombia (Serrano et al. 1993)
y, además, parece que la pre-
sencia de estos insectos afecta la
acvidad de los rebaños y reduce el
valor económico de las erras (Fowler
& Saes 1986).
Más allá del efecto evidente de defoliación de las hormigas cortadoras sobre las plan-
tas y pastos, el desarrollo de los nidos subterráneos y las excavaciones realizadas por
las hormigas, ejercen un efecto importante en el suelo. En estructuras como diques,
carreteras, o edicaciones, la presencia de la hormiga arriera se idenca como un po-
tencial problema (Figura 16), dado que durante la construcción de sus nidos remueven
gran candad de erra, desestabilizan las bases y facilitan los procesos de subsidencia
en las construcciones. Básicamente, sus nidos pueden alcanzar hasta siete metros de
profundidad con cámaras interconectadas por túneles (para la especie Aa laevigata)
(Moreira et al. 2004, Della Lucia 2011), generando vacíos al interior o debajo de estruc-
turas, lo que ocasiona una disminución en la resistencia de éstas. Por su parte, en las
zonas verdes también genera inconvenientes al anidar en parques, zonas de recreación
y deportes. En Cali se ha esmado que afecta aproximadamente el 60% de las zonas
verdes de la ciudad (Chacón de Ulloa 2003).
126
Control biológico
Control de hormigas arrieras
Los métodos de control para las hormigas cortadoras involucran el uso de sustancias
químicas como principal estrategia, seguido en menor proporción por el control bio-
lógico, mecánico y cultural (Della Lucia 2003). Sin embargo, el uso de plaguicidas de
síntesis química es un procedimiento limitado e insasfactorio (Boulogne et al. 2014,
Hebling et al. 2000, Castaño et al. 2013). Además, ocasiona grandes desventajas en
los sistemas agroecológicos debido a que genera una disminución de los enemigos
naturales que ayudan a controlar naturalmente a la hormiga arriera. Por otro lado, las
hormigas adquieren resistencia a los inseccidas, a través del despliegue de compor-
tamientos que evitan los efectos negavos causados por estos, lo cual ocasiona una
demanda de productos más tóxicos y costosos.
Sumado a esto, los efectos nocivos en la salud animal y humana, la contaminación de
los alimentos y el medio ambiente, así como el incremento en los costos de produc-
ción, hacen necesaria la implementación de métodos alternavos para el control de
las hormigas arrieras.
En este sendo, el Manejo Integrado de Plagas – MIP, se perla como una buena al-
ternava de control, ya que, además de reducir el uso de los inseccidas y su efecto
nocivo, ene la ventaja de combinar diferentes métodos de control (biológico, sico,
cultural, mecánico o incluso el control químico bajo condiciones reguladas), con el n
de buscar la estrategia más eciente para combar a las arrieras. En el caso de las
hormigas cortadoras de hojas, la efecvidad de cualquier po de control está ligada a
la afectación del hongo simbionte o de la reina, eslabones claves en el funcionamiento
de la colonia (Chacón de Ulloa et al. 2019).
A connuación, se describen algunas estrategias de
manejo de las hormigas cortadoras de hojas dentro
de un Manejo Integrado de Plagas:
Consiste en la ulización de organismos vivos
para combar a las hormigas arrieras. Dentro
del control biológico, el método más usado en
la actualidad es la aplicación de microorganis-
mos que afecten al hongo simbionte (hongos
antagonistas) o a las hormigas (microorganis-
mos entomopatógenos). Por ejemplo, Quiroz et al.
(1996) encontraron que los hongos entomopatógenos
son uno de los agentes más importantes en la mortalidad
de reinas A. mexicana.
127
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Tabla 1. Microorganismos con acvidad entomopatógena y antagonista usados en el control de hormigas
arrieras de acuerdo con estudios llevados a cabo por López &Orduz 2003, Pérez 2002, Quiroz et al. 1996,
Rodríguez et al. 2008 y Santos et al. 2007.
Los microorganismos registrados en el control de las hormigas arrieras se presentan
en la tabla 1.
MICROORGANISMO CLASE ACCIÓN
SOBRE
Beauveria bassiana (Hypocreales: Clavicipitaceae) Hongo Hormigas
Metarhizium anisopliae (Hypocreales:
Clavicipitaceae) Hongo Hormigas
Aspergillus parasicus (Euroales: Trichocomaceae) Hongo Hormigas
Bacillus sublis (Bacillales: Bacillaceae) Bacteria Hormigas
Aspergillus sp. (Euroales: Trichocomaceae) Hongo Hormigas
Fusarium sp. (Hypocreales: Nectriaceae) Hongo Hormigas
Paecilomyces sp. conocido ahora como
Isaria (Hypocreales: Clavicipitaceae) Hongo Hormigas
Paecilomyces farinosus o
Isaria farinosa (Hypocreales: Clavicipitaceae) Hongo Hormigas
Lecanicillium sp. (Hypocreales: Clavicipitaceae) Hongo Hormigas
Trichoderma sp. (Hypocreales: Hypocreaceae) Hongo Hongo mutualista
Trichoderma viride (Hypocreales: Hypocreaceae) Hongo Hongo mutualista
Trichoderma lignorum (Hypocreales: Hypocreaceae) Hongo Hongo mutualista
A nivel comercial, Beauveria, Metarhizium y Trichoderma son los géneros de hongos
más ulizados en el control de la hormiga arriera (López & Orduz 2002, Castro &
Marnez 2008, Orz-Giraldo et al. 2013, Chacón de Ulloa et al. 2019).
128
En las casas comerciales es posible encontrar productos biológicos que tengan los mi-
croorganismos mencionados en la tabla 1. En algunos casos los productos ulizan solo
un microorganismo y en otros conenen mezclas de ellos con el n de buscar acción
sobre las hormigas y sobre el hongo simbionte al mismo empo.
De acuerdo con el Instuto Colombiano Agropecuario - ICA, en el país existen alrede-
dor de 120 productos comerciales a base de microorganismos, los cuales están cla-
sicados como agentes de control biológico, y pueden emplearse teniendo en cuen-
ta la información de la tabla 1. Los productos comerciales se pueden consultar en la
página web de ICA que se enseña a connuación: hps://www.ica.gov.co/getdoc/2a-
d9e987-8f69-4358-b8a9-e6ee6dcc8132/productos-bioinsumos-mayo-13-de-2008.aspx
Insumos biológicos a base de microorganismos pueden encontrarse en presentaciones
líquidas, polvos, granulados, soluciones o incluso en cebos, por tanto, se pueden apli-
car a través de fumigadora (líquidos y soluciones), insuadora (polvos) o manual (cebos
y polvos), de acuerdo a las instrucciones de la equeta de cada producto, y siguiendo
siempre las recomendaciones de seguridad. La termonebulizadora puede emplearse
en la aplicación de microorganismos termoresistentes como la bacteria Bacillus sub-
lis, que, de acuerdo a ensayos realizados en la Universidad del Valle, connúa viable
y con buen crecimiento en laboratorio después de su paso por la termonebulizadora
(Castaño-Quintana & Rodríguez 2015).
Sin embargo, es importante tener en cuenta que las hormigas enen diferentes me-
canismos de defensa que pueden dicultar la efecvidad de los métodos de control
con microorganismos. Uno de esos mecanismos consiste en la limpieza constante que
realizan las obreras a sus compañeras (Abramowski et al. 2011) y al material vegetal
que ingresan al nido (Peña-Estrella et al. 2013). Además, las hormigas enen glándulas
metapleurales, que secretan varias sustancias ácidas y que inhiben la germinación de
algunos hongos entomopatógenos (Poulsen et al. 2002).
Por otro lado, A. cephalotes ene asociado a su exoesqueleto una bacteria, Serraa
marcescens (Enterobacteriaceae), que al parecer protege a la colonia al inhibir el cre-
cimiento de hongos entomopatógenos (Orz-Giraldo et al. 2013; Rengifo-Ruiz et al.
2013). Asimismo, se ha reportado que hormigas del género Acromyrmex podrían pre-
sentar sistemas, probablemente olfavos, con la función de reconocer hongos ento-
mopatógenos (Machado et al. 1988).
Todos estos comportamientos de las hormigas cortadoras de hojas podrían ayudar a
la defensa y reducción en la diseminación, y en los efectos de los microorganismos
aplicados a las colonias.
129
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Entre los enemigos naturales de las hormigas
cortadoras de hojas, los dípteros de la familia
Phoridae son uno de los grupos más reconoci-
dos y estudiados (Della Lucia 2011). Los Pho-
ridae son moscas de tamaño pequeño que
se caracterizan por sobrevolar y perseguir a
las hormigas cuando éstas salen del nido a
forrajear, para introducir en ellas sus huevos
a través de un ovipositor (órgano para depo-
sitar huevos). Posteriormente, la larva eclo-
siona dentro de la hormiga y consume los
tejidos internos, causándole la muerte (Della
Lucía et al. 2014, Montoya-Lerma et al. 2012,
Holldobler & Wilson 2011).
Por otra parte, aves como el Pellar Vanellus chilensis,
la Pigua Milvago chimachima, el garrapatero Crotopha-
ga anni y el Coclí Theryscus caudatus, han sido ob-
servadas consumiendo alados de hormiga arriera,
evitando así la formación de nuevos nidos (Gi-
raldo et al. 2015). Otras aves reportadas en la
depredación de hormigas arrieras son: el sirirí
común (Tyrannus melancholicus), el bicho-
fué (Pitangus sulphuratus), las golondrinas
(Hirundinidae), los vencejos (Apodidae), los
pinches (Zonotrichia capensis), y el abejero
escarlata (Merops rubicus) (Madrigal 2003,
Fernández et al. 2015).
Entre los mamíferos se conocen el armadillo
(Dasypus novemcincta) y los osos hormigue-
ros del género Tamandua, quienes ayudan al
control natural de las hormigas arrieras a través
de la depredación. Así mismo, las hormigas No-
mamymex esenbecki, N. hargi y Paratrechina longi-
cornis; los chinches Vescia agrensis (Hemiptera: Reduviidae)
y cucarrones como Canthon virens (Scarabaeidae) y Taenilobus sulcipes (Carabidae)
depredan a las arrieras (Madrigal 2003, Della Lucia 2011, Fernández et al. 2015).
Enemigos naturales
130
Para fortalecer la regulación de las poblaciones de hormigas arrieras a través de la ac-
ción de enemigos naturales, es necesario favorecer la presencia de estos organismos
en los sistemas producvos a través de práccas agroecológicas, entre las que se in-
cluye la reducción del uso de plaguicidas y la siembra de vegetación nava. En planta-
ciones de Eucalipto en Brasil, por ejemplo, un estudio realizado por Zane et al. (2000)
vericaron una reducción de la densidad de colonias de hormigas cortadoras cuando
el culvo era rodeado por franjas de vegetación nava, sugiriendo que estas podrían
servir de refugio para los enemigos naturales de las hormigas.
Control sico
Consiste en el uso de barreras sicas que impidan el acceso de obreras forrajeras a
las plantas. Las barreras más comunes consisten en el uso de neumácos, pegantes y
bras o algodón, que obstruyan o di-
culten el paso de las obreras. De
acuerdo con Yepes (1999), an-
teriormente ataban manojos
de hierbas, a los trancos de
los árboles para reducir el
ataque de las hormigas
arrieras. El uso de ras
de plásco embebidas
en grasa o vaselina
también es una prác-
ca común. El control
sico es un método
fácil y económico para
usar a pequeña escala
(Montoya-Lerma et al.
2012). Dentro de este
método, también se pue-
de emplear los desechos de
otros nidos de hormigas cor-
tadoras alrededor de las plantas,
aplicados como abono. Estos dese-
chos enen un olor parcular que repele
el ataque de las obreras forrejeras y minimiza la defoliación de las plantas por varias
semanas (Zeh et al. 1999).
Este método se recomienda ulizar en árboles aislados y áreas pequeñas.
131
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Se reere a la aplicación de
técnicas artesanales como
el consumo de reinas (hor-
migas culonas), ene-
rro de cadáveres en los
nidos, preparación de
compostaje, siembra de
plantas repelentes, di-
versicación de culvos,
entre otros. En el depar-
tamento de Santander,
en Colombia, las personas
enen la costumbre de
capturar las reinas aladas
de la especie A. laevigata
durante el vuelo nupcial, y con-
sumirlas en diferentes preparacio-
nes. En esta zona las reinas son llamadas
hormigas “culonas” o “santandereanas”. La captura
de alados y la ingesón de las hormigas reinas como
alimento ejerce una presión sobre la población de
hormigas cortadoras.
Por otra parte, la siembra de plantas que afec-
ten la acvidad de forrajeo por parte de las
hormigas, es otra técnica de control cultural.
Por ejemplo, plantas con acción repelente se
siembran alrededor de los culvos como ba-
rreras, para disminuir el ataque de las hor-
migas. En la tabla 2 se mencionan algunas
plantas ulizadas en el control de las hormi-
gas arrieras de acuerdo con diferentes inves-
gadores (Bigi et al. 2004, Bueno et al. 2005,
Castaño-Quintana et al. 2013, Giraldo-Eche-
verri 2005, Méndez 2000, Oliveira et al. 2006,
Rodriguez et al. 2015, Serna & Correa 2003, Val-
derrama-Eslava et al. 2009 y Yepes 1999).
Control cultural
132
Tabla 2. Uso de plantas con diferentes propiedades que afectan el forrajeo de las hormigas arrieras.
NOMBRE
COMÚN
NOMBRE
CIENTÍFICO USO AUTOR
Botón de
oro, falso
girasol,
mirasol.
Tithonia
diversifolia
(hemsl.) Gray
(Asteraceae)
Abono verde: se corta la mayor parte de la
biomasa de la planta y se deposita sobre la
base del árbol que se quiere abonar y proteger.
Aplicación cada diez semanas aprox.
Culvo de barrera: se siembra alrededor o
al interior del culvo de interés para evitar o
reducir el ingreso y la defoliación por parte
de las hormigas. Tiene efecto insecda en las
hormigas.
Mulche: se cubre el nido de arriera
completamente con ramas y hojas de la planta.
Aplicación cada 15 días. Nidos pequeños a
medianos.
Cebo: Se uliza las hojas secas del botón de
oro para preparar un cebo y así esmular
el acarreo del cebo al interior del nido. La
elaboración del cebo se explica más adelante.
Giraldo-
Echeverri
2005, Castaño-
Quintana et al.
2013, Rodríguez
et al. 2015,
Universidad
Tecnológica del
Chocó 2013.
Frijol
blanco,
Haba
blanca
Canavalia
ensiformis L.
(Fabaceae)
Culvo trampa: Se siembra el frijol blanco
alrededor del culvo, o intercalado con el
culvo principal, con el n de que el frijol
blanco sea objeto de defoliación.
Mulche: Se cubre el hormiguero y sus
alrededores con 10 o 20 kilogramos de hojas
de Canavalia. La Canavalia posee metabolitos
secundarios que afecta tanto a las hormigas
como al hongo de la colonia.
Yepes 1999,
Universidad
Tecnológica del
Chocó 2013,
Méndez 2000,
Valderrama-
Eslava et al.
2009.
Ajonjolí o
sésamo
Sesamun
indicum L.
(Pedaliaceae)
Culvo trampa: Se siembra el ajonjolí
alrededor del culvo, para que sea defoliado
en lugar del culvo de interés. Esta planta
posee metabolitos secundarios que afectan a
las hormigas.
Yepes 1999,
Universidad
Tecnológica del
Chocó 2013.
Caléndula,
clavel
Tagetes sp.
(Asteraceae)
Culvo de barrera: la caléndula es una planta
repelente, por tanto se siembra cerca de los
hormigueros o alrededor del culvo de interés
para evitar o reducir el ingreso y forrajeo de las
hormigas a los culvos.
Méndez 2000.
133
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
NOMBRE
COMÚN
NOMBRE
CIENTÍFICO USO AUTOR
Tomate
Solanum
lycopersicum L.
(Solanaceae).
Culvo trampa: Debido al efecto
fagoinhibidor encontrado en algunos
extractos de esta planta, se puede
ulizar como culvo trampa, sembrando
alrededor o interior de otros culvos.
Serna & Correa
(2003).
Higuerilla,
ricino
Ricinus comunis L.
(Euphorbiaceae)
Culvo trampa: Se siembra la higuerilla
alrededor o interior del culvo, para
que sea defoliada en lugar del culvo de
interés. Estas plantas poseen metabolitos
secundarios que afectan a las hormigas y
a su hongo.
Universidad
Tecnológica del
Chocó 2013,
Bigi et al. 2004.
Batata,
camote,
papa dulce
Ipomoea
batata L. (Lam)
(Convolvulaceae)
Culvo trampa: Se siembra la batata alre-
dedor o interior del culvo, para que sea
defoliada en lugar del culvo de interés.
Estas plantas poseen metabolitos secunda-
rios que afectan al hongo de las colonias.
Universidad
Tecnológica del
Chocó 2013.
Cedro
misionero
Cedrela ssilis
Vell. (Meliaceae)
Culvo trampa: Gracias al efecto inseccida
encontrado en algunos extractos de esta
planta, se puede ulizar como culvo
trampa, sembrando alrededor o interior
de otros culvos.
Bueno et al.
2005.
Neem
Azadirachta
indica A. Juss
(Meliaceae)
Culvo trampa: El efecto inseccida
encontrado en algunos extractos de esta
planta, hace posible ulizarla como culvo
trampa, sembrando alrededor o interior de
otros culvos.
Oliveira et al.
2006.
Clibadium
Clibadium
asperum (Aubl.)
DC. (Asteraceae)
Cebo: Se uliza las hojas secas del botón de
oro para preparar un cebo y así esmular
el acarreo del cebo al interior del nido.
La elaboración del cebo se explica más
adelante.
Universidad
Tecnológica del
Chocó 2013.
Chirrinchao,
barbasquillo,
jobillo,
candelillo,
catalina.
Phyllanthus
acuminatus
(Phyllanthaceae)
Cebo: Se uliza las hojas secas del
chirrinchao para preparar un cebo y así
esmular el acarreo del cebo al interior del
nido.
Universidad
Tecnológica del
Chocó 2013.
134
A connuación, se describen los pasos de acuerdo con la información reportada por
la Universidad Tecnológica del Chocó (2013) para elaborar cebos con hojas de algunas
plantas mencionadas en el cuadro anterior, que afectan a las hormigas o al hongo sim-
bionte o a ambos:
1. Recolectar suciente material verde de alguna de las especies mencionadas an-
teriormente, y secar al aire, bajo sombra, durante dos a tres semanas. Remover
periódicamente el material para lograr un secado uniforme.
2. Después de este empo, extraer los tallos gruesos y los peciolos de las hojas.
3. Pulverizar las hojas. Se puede ulizar un molino casero.
4. Mezclar 5 kilogramos de avena en hojuelas con un kilogramo del polvo vegetal
(proporción 5:1) y luego agregar 1 litro de jugo de naranja, el cual actúa como
atrayente. Durante la mezcla se recomienda proteger las manos con guantes o
bolsas pláscas.
5. Mezclar los ingredientes uniformemente.
6. Aplicar entre 20 y 30 gramos del cebo preparado por metro cuadrado de hormi-
guero.
La aplicación del cebo debe realizarse a un lado de los caminos y cerca a las bocas
acvas del hormiguero, y se recomienda hacer la aplicación en horas tempranas de la
mañana o al anochecer, donde las arrieras enen picos altos de acvidad. No aplicar
cuando hay lluvia y evitar exponer el cebo a los rayos directos del sol.
Si es necesario se puede realizar una nueva aplicación a la quinta o sexta semana con
una planta diferente a la que se ulizó inicialmente
135
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
El compostaje, por su parte, es otra técnica evaluada por Armbrecht et al. (2012) quie-
nes observaron que el 26,5 % de los nidos cubiertos con “compost” murieron. El com-
postaje evaluado por los invesgadores estaba constuido por materia orgánica e inor-
gánica. Los materiales se describen a connuación:
• Hojarasca (5 kg).
• Esércol de aves (15 kg).
• Melaza (1 kg) puede ser reemplazada por azúcar.
• Levadura (1 kg).
• Cal agrícola (5 kg).
• Agua 25 litros.
De acuerdo con los autores, la melaza y la levadura se disuelven previamente en el
agua. Previo a la aplicación de los materiales, recomiendan palear mecánicamente el
suelo, y luego distribuir los materiales descritos uniformemente sobre el nido. Todo el
compostaje se distribuye en 25 m2 del área externa del nido, donde están concentradas
las bocas acvas. Posteriormente se cubre inmediatamente el compost y el nido con
una lámina de plásco negro durante 30 días.
Esta es una prácca económica y ecológicamente sustentable, que además de contro-
lar la población de hormiga arriera, enriquece el suelo.
En la Reserva Natural Pozo Verde, ubicada en Jamundí (Valle del Cauca), la aplicación
de abono compostado en nidos pequeños resultó en la reducción total de los hormi-
gueros, mientras que en nidos grandes la reducción fue del 67% (Chaves 2006). La
autora de este estudio recomienda erradicar nidos pequeños (<30m2) a través de la
aplicación de compostaje, y para nidos grandes (>62m2) sugiere complementar con
otros métodos de control.
136
Consiste en la excavación del nido para sacar a la reina y parte del hongo, destruyendo
sicamente el hormiguero. Es un método muy efecvo, ya que, al eliminar la única
reina de la colonia, el hormiguero perece al cabo de unos meses. Por esta razón, es el
método más efecvo y recomendado en la actualidad para el control de colonias de
hormiga arriera (Chacón de Ulloa et al. 2019).
El control mecánico es fácil de realizar en
nidos pequeños (menores a 20m2),
donde la reina está ubicada super-
cialmente y aún no se han for-
mado numerosas cámaras sub-
terráneas.
Autores como Vélez (1997),
Madrigal (2003) y Vergara
(2005) consideran que el me-
jor momento para localizar la
reina es tres meses después
de los vuelos nupciales. Es en
este empo, donde las prime-
ras obreras salen al exterior y
la única cámara se encuentra
entre unos 20 y 30 cm de profun-
didad, permiendo encontrar fácil-
mente la reina, con la ayuda de herra-
mientas como palín, pala o barra.
Este método también es posible hacerlo en nidos grandes y maduros, teniendo en
cuenta la acvidad, el tamaño y la ubicación del nido. En este caso, es necesario evaluar
el costo-benecio del control, ya que un nido más grande requiere de mayor esfuerzo,
trabajo y mano de obra. Sin embargo, es más rentable económica y ambientalmente
realizar una inversión de uno o dos días de excavación, que varios años de aplicación
de plaguicidas.
Para el control mecánico de nidos grandes se recomienda trabajar con un equipo de
personas expertas en idencar la reina y el hongo, además de conocer la estructura
interna del nido, para tener mayor probabilidad de éxito en encontrar a la reina. En un
estudio reciente se logró realizar la extracción de reinas de nidos de 100 m2 e incluso
más grandes, con personas experimentadas, en zonas verdes de la ciudad de Cali.
Control mecánico
137
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Sin embargo, es importante tener en cuenta algunas caracteríscas como la ubicación
del nido, que puede dicultar la remoción. Cuando los hormigueros se encuentran es-
tablecidos cerca de raíces de árboles o edicaciones, por ejemplo, no es posible reali-
zar excavación y se debe recurrir a la implementación de otras estrategias de control.
En la época previa al vuelo nupcial, también es dicil realizar la captura de la reina,
debido a la candad de futuras reinas y machos alados que se encuentran al interior
del nido en ese momento, los cuales se confunden con la reina madre del hormiguero,
a pesar de que esta no ene alas.
Algunas recomendaciones para tener en
cuenta en el momento de excavar un
nido de hormiga arriera se mencionan
a connuación:
1. Emplear buenas herramientas
para realizar la excavación,
las más importantes son la
barra para profundizar, la
pala para extraer erra y
una pala pequeña de jardi-
nería que se uliza para sa-
car las porciones del hongo
simbionte en cada una de
las cámaras.
2. Ulizar buena protección
personal para reducir las mor-
didas por parte de las hormi-
gas. Ulizar guantes, botas altas
(se les puede aplicar un aceite o
vaselina para dicultar la subida de
las hormigas) y ropa protectora.
3. Empezar la excavación por donde se en-
cuentra el conglomerado de bocas del hormiguero, o por donde se observa que las
hormigas están ingresando las hojas forrajeadas (Figura 24).
4. Seguir internamente los túneles y cámaras. Para no perder los túneles internos du-
rante la excavación se recomienda señalarlos con una rama o palito.
5. Una vez se encuentren las cámaras con hongo simbionte, extraer todo el hongo y re-
visar cuidadosamente si en él se encuentra la reina (Figura 25). En la mayoría de los
estudios de control mecánico realizados por el grupo de invesgación de hormiga
arriera de la Universidad del Valle, la reina se encuentra dentro del hongo simbion-
te. La búsqueda de la reina se debe intensicar en el momento que se encuentran
las cámaras de hongo con formas inmaduras (larvas y pupas), ya que generalmente
ella se encuentra en esta parte del hormiguero. Estas cámaras no reciben material
vegetal y son dedicadas exclusivamente al cuidado de las hormigas en sus primeras
etapas de vida.
138
6. Se recomienda colocar el hongo simbionte en una bandeja u otra supercie para
facilitar la búsqueda de la reina. La reina generalmente se encuentra rodeada de
obreras, quienes la resguardan y protegen (Figura 26).
Otro método de control mecánico consiste en arar el suelo durante su preparación
previa a la siembra de plántulas o semillas, ya que en el proceso de arado se destru-
yen principalmente los nidos superciales. Las especies del género Acromyrmex son
las más perjudicadas en el proceso de arado, debido a la estructura supercial de sus
nidos, los cuales pueden ser eliminados durante el proceso de preparación del suelo
(Lapointe et al. 1993, Armbrecht et al. 2012). Este po de manejo de los hormigueros
puede ser una buena opción en sistemas ganaderos de Caquetá, donde la hormiga
arriera Acromyrmex landol ha generado grandes problemas en la producvidad de
los pastos.
Figura 25. Secuencia de extracción del hongo simbionte del hormiguero.
Figura 26. Hongo simbionte a la izquierda y reina encontrada a la derecha.
139
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
La mayoría de los agricultores ulizan productos de
síntesis química para el control de las hormigas cor-
tadoras de hojas. Los productos químicos contra
las arrieras presentan acción por contacto e in-
gesón (Boareo & For 1997), y enen varias
presentaciones y formas de aplicación. Estos
productos se pueden encontrar en polvos
secos, cebos granulados y soluciones líqui-
das (Mariconi 1970, Della Lucia 2011).
Los cebos granulados conenen un atra-
yente para que las hormigas transporten el
producto directamente hacia el hongo sim-
bionte al interior del nido. La aplicación de
los cebos se realiza de forma manual directa-
mente sobre el suelo, los caminos o las bocas
de los hormigueros.
Para nidos de tamaño pequeño a mediano se ulizan
ampliamente insuadoras (productos en polvo) y fumigado-
ras (productos líquidos) para la aplicación de inseccidas (Montoya-Lerma et al. 2012)
(Figura 27).
Sin embargo, cuando los hormigueros son muy gran-
des (mayores a 100 m2) se emplea una termone-
bulizadora, la cual genera una niebla, que se for-
ma por la quema de un combusble (gasolina
o aceite mineral), en la que se suspende y di-
semina el inseccida (Chacón de Ulloa et al.
2019). La formación de la niebla permite la
entrada del producto químico a una mayor
candad de comparmientos en las colonias
de las hormigas (Figura 28).
Dentro de los compuestos químicos que
más se ulizan en el control de las hormigas
arrieras se encuentran los organofosforados,
piretroides y sulfuramidas (Della Lucia 2014,
Fernández et al. 2015). Sin embargo, existen
restricciones de uso para la mayoría de estos pro-
ductos, debido a alta toxicidad que perjudica a las es-
pecies no blanco y al medio ambiente.
Control químico
140
A pesar de la alta toxicidad de los plaguicidas, el control químico es insasfactorio por-
que no siempre llega a eliminar el hormiguero, sino que, en muchos casos, lo inacva
temporalmente. Por otro lado, el método de aplicación del producto químico puede
no ser adecuado para las caracteríscas del nido. La aplicación de los productos por
fumigadoras o insuadoras no alcanza a llegar a todas las cámaras internas del nido,
afectando de esta forma solo una parte del hormiguero. De esta manera, se reducen
las posibilidades de alcanzar la reina por el producto aplicado.
Por todo lo anterior, se re-
comienda ulizar este mé-
todo solo cuando sea es-
trictamente necesario, en
combinación con otras es-
trategias de control y a tra-
vés del uso de agroquímicos
de baja toxicidad, siguiendo
siempre las dosicaciones
espuladas en el producto
y las normas de seguridad.
No se recomienda el uso de
plaguicidas de categorías
toxicológicas IA, IB y II por
su alta peligrosidad. Las ca-
tegorías menos tóxicas de
plaguicidas que se encuen-
tran en el mercado son las
categorías III y IV.
Finalmente, un factor importante para tener en cuenta en el éxito de control de los
nidos de hormiga arriera consiste en la constancia y frecuencia de aplicación de las
estrategias de manejo seleccionadas. Un control connuo diculta la recuperación de
los hormigueros y disminuye su acvidad externa. Debido a que las colonias de hor-
miga arriera son complejas y enen diferentes estrategias de defensa, se recomienda
un manejo integrado que involucre diversas acciones que se apliquen connuamente,
para obtener resultados más sasfactorios.
CLASIFICACIÓN DE PLAGUICIDAS
DE ACUERDO CON SU SEGURIDAD
Categoría Leyenda Frase de
advertencia
Color
de la
banda
Ia Extremadamente
peligros Muy tóxico
Ib Altamente
peligroso Tóxico
II Moderadamente
peligros Nocivo
III Ligéramente
peligroso Cuidado
IV No representa
riesgo agudo en
uso normal Precaución
141
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
141
142142
143
Manejo integrado de insectos herbívoros en sistemas ganaderos sostenibles
Conclusiones y recomendaciones
Las hormigas cortadoras de hojas son percibidas
como insectos plagas por productores y
campesinos del país, debido a la acvidad
de corte y acarreo de material vegetal fresco
que afecta a diferentes culvos en sistemas
agrícolas, forestales y pecuarios.
La poca efecvidad de control de las hormigas
arrieras se debe en parte a la falta de arculación
de la biología y comportamiento de las arrieras
con las estrategias de manejo. En este sendo,
es importante resaltar que la efecvidad de los
métodos de control está ligada al efecto que
éstos tengan, principalmente, sobre el hongo
simbionte y/o la reina.
El método más efecvo para controlar a las
hormigas cortadoras de hojas consiste en
realizar un control mecánico a los nidos. De
esta forma se elimina el problema de raíz, al
extraer la única reina del nido, lo que conlleva
a la muerte de la colonia. Sin embargo, esta
acvidad debe ser realizada en nidos pequeños
y medianos. Para nidos grandes es necesario de
experiencia y mayor esfuerzo sico y logísco.
Existen diferentes alternavas que, dentro
de un manejo agroecológico en las ncas,
pueden ayudar a reducir las poblaciones de
hormiga arriera. Sin embargo, es importante
que los métodos empleados se realicen
frecuentemente para una mayor probabilidad
de éxito.
144144
145
Fotograas
Andreas Kay: Figura 11 izquierda (hps://
creavecommons.org/licenses/by-nc-sa/2.0/
legalcode)
Cristhian Alessandro Perez: Figura 4 (hps://
creavecommons.org/licenses/by-nc-sa/2.0/
legalcode)
Karen Castaño Quintana: Figuras 1B, 2A, 2B, 3
izquierda, 3 derecha, 5, 7 izquierda, 7 derecha,
9 izquierda, 9 derecha, 10, 12 izquierda, 12
derecha, 13 A, 13B, 13C, 17, 19, 21 izquierda,
21 derecha, 22, 23, 24, 25A, 25B, 25C, 25D, 26
izquierda, 26 derecha, 27, 28.
Francisco López Machado: Figuras 1A y 8
Gustavo Zabala: Figura 6
Joao P. Burini: Figura 18 (hps://
creavecommons.org/licenses/by-nc-sa/2.0/
legalcode)
Jim Skovrider: Figura 11 derecha (hps://
creavecommons.org/licenses/by-nc-sa/2.0/
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Archivo Hormiga Arriera Univalle: Figura 14
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