La remunicipalización de los servicios de agua urbanos apareció en América Latina como respuesta a las políticas neoliberales de privatización de los servicios públicos y esenciales. De ahí surgieron ideas centrales como la lucha por el Derecho Humano al Agua (que no fue reconocido por la Asamblea de la ONU hasta el año 2010) y la desmercantilización del agua.
Por su parte el 15 de mayo de 2011 las plazas del Estado Español y Catalunya se llenaron de personas que fueron a ocuparlas. Las acampadas con más proyección fueron las de la Puerta del Sol de Madrid y la de Plaza Catalunya de Barcelona. Se reclamaba más democracia. Era la respuesta social a los años de pauperización de la vida de las personas a raíz de los efectos de la Crisis financiera de 2008. Una Crisis que ha marcado un antes y un después en la sociedad del Estado Español, que se encuentra aún inmersa en un escenario de tensión y cambios.
La Crisis del 2008 resultó ser el catalizador que permitió la conexión sentida, no sólo discursiva, entre la remunicipalización y los efectos de las políticas neoliberales y sus planes austeridad. De este modo, aparecieron grupos locales que pusieron en el centro la lucha por el agua en el espacio urbano, por medio de la recuperación de un servicio de debía ser público, democrático, ecológicamente sostenible, local, transparente y bajo control ciudadano.
La tesis analiza la relación existente entre el contexto en el que se dan iniciativas para promover cambios en términos de más democracia que se vehiculan por medio del servicio de abastecimiento urbano, y que ponen en relación las instituciones, tanto en su papel como en su naturaleza, desde lo local, de ahí, la importancia del municipio como institución de gobierno histórica. En segundo lugar, a la ciudadanía, que parece redefinirse en tanto que se considera como actor necesario en el ejercicio de la política. Y en tercer lugar el agua, como algo inmensurable en sus cualidades, desde la noción de agua como vida, que se relaciona tanto con el modelo de toma de decisiones (quién y por qué) como en su trascendencia ambiental. Todo ello tejido en torno la idea del común a partir de la cual establecer los valores y principios que dirijan de ahora en adelante cómo debe ser y funcionar, qué debe tener en cuenta desde esta perspectiva el servicio urbano de agua, en otras lógicas de qué se entiende por democracia.
Estos aspectos se analizan a través del grupo la Taula de l’aigua, que desde el año 2014 empezaron a trabajar para la recuperación de este servicio, en su ciudad, Terrassa, y que estaba en manos de una empresa privada desde el año 1842, poniendo sobre la mesa que la problemática que se abría iba más allá del neoliberalismo, y que sus raíces eran más profundas y complejas. Para ello se ha partido de la Taula de l’aigua y su perspectiva, para exponer el conjunto de los actores que intervienen, con el acento puesto en la dimensión institucional, en tanto que responsabilidad pública y ver así, cómo se teje el común en el espacio de lo público a través de este servicio básico y esencial.