Más allá de la definición clásica de amenaza híbrida como mezcla de actividad coercitiva y subversiva, métodos convencionales y no convencionales, que pueden ser utilizados de manera coordinada para lograr objetivos específicos mientras se mantiene por debajo del umbral de una guerra formalmente declarada, estas actividades cobran especial relevancia por los factores de la sociedad digital que aumentan su eficacia hasta llegar a que se perciba como uno de los principales riesgos que actualmente enfrentamos.
Uno de esos factores ha sido la realidad líquida y la falta de compromiso que potencian los llamados postpúblicos. Tanto la realidad como la modernidad líquida y customizada —junto con una falsa sensación de personalización y flexibilidad— conllevan, básicamente en la sociedad occidental y liberal, una falta de compromiso y un cambio en la forma de pensar y elaborar el conocimiento o de representar la realidad. Este cambio ha tenido implicaciones sociológicas que abordamos en este libro. En ese contexto veremos que aparecen como resultado los postpúblicos, el punto clave dentro de las estrategias de las amenazas híbridas.
De una forma correlacionada aplicaremos y deduciremos esos patrones conceptuales sobre lo que ha sucedido estos años en Ucrania y su guerra, el Reino Unido y el Brexit, EE. UU. y Trump, Cataluña y el procés, Irán, el asunto Israel/Hamás y el antisemitismo de nuevo cuño. Veremos que, junto a la amenaza híbrida y la teoría estratégica (TE), han emergido conceptos nuevos, como el control reflexivo (CR), los tropos y los tropos recurrentes, estructurados en narrativas adecuadas a fines estratégicos determinados. Hablamos de una realidad nueva, donde la naturaleza y la práctica democrática son otras —cuando no se cuestionan explícitamente—.
Pero sobre todo este libro quiere poner el foco, al elegir este tema, el de la amenaza híbrida, sobre cualquier otro de los muchos en los que se manifiesta la sociedad del conocimiento, es por la importante transcendencia en cómo van a ser los conflictos que las sociedades va a afrontar en los tiempos próximos o los están afrontando ya. Y cuáles van a ser nuestras condiciones de vida y por ende sobre qué ejes oscilará nuestra felicidad, así como la de nuestros hijos. Objetivo último de cualquier trabajo científico que, como tal, y en su componente de Ethos, debe contemplar.
Según la misma Zelenkauskaitė (2022) expone y desarrolla, en una primera fase cuando se descubre el troleo y la posible influencia en el proceso, los perjudicados niegan su existencia, les parece absurdo, o quizá tienen miedo de usar argumentos que, por su debilidad y falta de credibilidad, se vuelvan en su contra. Es lo que Zelenkauskaitė (2022) ha definido, como ya hemos introducido, como pussy State. Así hemos visto que sucedió en el Reino Unido con el troleo del Brexit y en EE. UU. con el troleo ruso en las elecciones de 2016 calificado por la propia candidata Clinton como un absurdo.