El verano de 2017 dejó en la zona centro-sur de Chile un registro de los grandes incendios registrados en la historia del país. Cuatro incendios superaron las 40.000 ha y 7 las 10.000 ha. Las estadísticas oficiales señalan que las plantaciones forestales fueron las más afectadas por incendios, secundadas del bosque nativo y de matorrales y praderas. Estos datos fueron confirmados en la entrega anterior (De la Barrera & Ruiz 2017) en su tendencia, pese a diferir en algunas magnitudes Menos de un 10% del bosque nativo existente en la zona central fue afectado (8% en la RM y menor a 5% las otras regiones). Contrastantemente, se incendió aproximadamente un 15% de las plantaciones forestales de Chile centro-sur (22% en O'Higgins y 31% en el Maule). La superficie total incendiada entre las regiones de Valparaíso y el Bío-Bío alcanzó entre 594.783 hectáreas según CONAF y 529.794 hectáreas según la primera entrega. Esta segunda entrega es parte de un estudio independiente y ad-honorem, coordinado desde IALE-Chile con el apoyo del Instituto de Geografía de la P. Universidad Católica de Chile. Aquí se analiza la diferencia entre las áreas calculadas planimétricamente (2D) y considerando el relieve 3D, señalando sesgos en algunos ecosistemas. Adicionalmente se identifican áreas pobladas potencialmente expuestas a riesgos de deslizamientos en masa o deslizamientos. Todos los resultados serán presentados en la Reunión Anual de IALE. 2. Metodología De la entrega anterior se dispone de las áreas quemadas, la severidad de los incendios y los ecosistemas afectados. La extensión de las áreas incendiadas corresponde a un modelo validado y su área total fue calculado a través de superficies planimétricas, al igual que otros estudios. En este caso se utilizó el modelo de elevación digital Aster GDEM (resolución espacial de 30m), de toda el área de estudio, para calcular área 3D, es decir considerando el relieve. Así, se calculó para cada área incendiada la diferencia entre el área 2D y 3D. Asimismo se identificó por área el ecosistema dominante en cada uno de los incendios (ej. bosque, plantación forestal), de manera de conocer aquellos ecosistemas más subestimados en su área efectiva. Paralelamente se realizó una evaluación para identificar áreas pobladas que están en zonas de riesgo de procesos de remoción en masa, en caso de lluvias intensas que puedan causar un deslizamiento de los suelos sin vegetación, por causa de los recientes incendios. Así, se seleccionaron las áreas pobladas localizadas aguas abajo y cercanos a áreas incendiadas de mediana y alta severidad, utilizando las áreas incendiadas mayores a 500 ha, cuerpos de agua y curvas de nivel 1:250.000 para inferir la dirección de los flujos de agua y material, y microcuencas para delimitar el efecto sobre las áreas pobladas extensas. Una vez seleccionadas las áreas pobladas expuestas a estos riesgos, se estimó la población potencialmente afectada usando cifras del Censo del año 2002 y se calculó la distancia mínima entre las áreas pobladas y las áreas incendiadas. Finalmente, considerando la dirección de los flujos, el grado de severidad del incendio más cercano y el tamaño del área incendiada se identificaron las localidades con mayores niveles de riesgo.