En el contexto de la globalización, la interdependencia y la incertidumbre que caracterizan al capitalismo moderno, este libro explora los cambios que se producen y reconstruye la ruta de los liberalismos en la crisis actual. Sostiene el autor que mientras en el neoliberarlismo la libertad individual y el libre mercado son inseparables del "darnwinismo social", el liberalismo social, como el que se implementa en México, implica un Estado solidario que procura corregir las desigualdades e imperfeccines del mercado, para darle una orientación social al desarrollo.