La creatividad junto con la innovación son elementos que han venido interactuando en el entorno empresarial desde hace mucho tiempo. La creatividad por sí sola, es la capacidad que posee un individuo de crear e idear algo nuevo y original, mientras que la innovación por su lado, es el arte de convertir y realizar las ideas. La innovación es producir, asimilar y explotar con éxito una novedad, de manera que aporte soluciones inéditas a los problemas y permita responder a las necesidades de las personas, de las empresas y la sociedad en general. La creatividad y la innovación son herramientas diferentes, pero que trabajan en conjunto para dar como resultado la generación de aquellos cambios dentro de la organización que conlleven una mayor satisfacción a sus clientes. Por esta razón, es importante inculcar a los jóvenes universitarios que sean creativos e innovadores en sus aspiraciones y proyectos para encontrar soluciones ingeniosas a diversos problemas mediante la aplicación sus conocimientos y habilidades.