Un sistema hiperpícnico constituye la extensión subácuea del sistema fluvial (Zavala et al., 2006). El mismo se origina cuando una descarga fluvial conteniendo una elevada carga de sedimentos en suspensión desemboca en un cuerpo de agua lacustre o marino. Como consecuencia de su exceso de densidad, el agua y los sedimentos transportados por el río se hunden en zonas costeras, moviéndose cuenca
... [Show full abstract] adentro como un flujo de fondo originado en el medio subaéreo (flujo hiperpícnico). En el caso de las cuencas marinas, las descargas fluviales con alto contenido de materiales en suspensión son portadoras de un fluido intersticial (agua dulce) el cual posee una densidad menor respecto a la del medio marino. En consecuencia, cuando el flujo hiperpícnico pierde progresivamente parte de su carga suspendida debido a la sedimentación, el mismo comienza a elevarse del fondo a consecuencia de una inversión en la flotación. La inversión de la flotación relacionada al empuje hacia arriba ejercido por un fluido intersticial menos denso se conoce como lofting, y ha sido documentada por Sparks et al. (1993) en una serie de experimentos. Los primeros en reconocer facies sedimentarias relacionadas a lofting fueron Hesse et al. (2004) en depósitos glacimarinos del Pleistoceno en el mar del Labrador. Estos autores sugieren asimismo que el lofting podría haber aportado un importante volumen de sedimentos finos a los niveles nefeloides. La identificación de facies de lofting es sumamente importante, ya que las mismas permiten diagnosticar en los depósitos la existencia de una conexión fluvial y por consiguiente un origen hiperpícnico para los mismos. En este trabajo se dan a conocer por primera vez las principales características de las facies de lofting, tomando como referencia ejemplos del Jurásico de la Cuenca Neuquina y del Terciario de la Cuenca Austral y Cuenca de Maracaibo (Venezuela). Las facies de lofting (o ritmitas de lofting) se componen por delgados niveles de areniscas finas a limos, separados por finas intercalaciones con restos vegetales y micas. Estos niveles a menudo no tienen más que uno o dos milímetros de espesor y muestran una continuidad lateral excepcional, la cual puede superar el centenar de metros. Los niveles areno-limosos y sus intercalaciones conforman paquetes de espesor decimétrico y aspecto laminado, los cuales internamente carecen o muestran una muy baja densidad y diversidad de trazas fósiles. Estas facies aparecen aisladas dentro de sucesiones pelíticas, o se ubican al techo de cuerpos tabulares de arenas masivas a laminadas, las cuales a menudo carecen de ondulitas (intervalo Tc de Bouma) en su porción superior. La ausencia de ondulitas en las capas arenosas asociadas se produciría en aquellos casos en que la reversión de la flotación ocurriría antes de que el flujo de fondo disminuya su velocidad lo suficiente como para entrar en el campo de formación de ripples. Consecuentemente, el flujo separado del fondo por efecto del lofting, deposita su carga por decantación configurando delgados niveles mantiformes de gran continuidad lateral. La gran dispersión de las facies de lofting hace que la identificación de las mismas sea de gran importancia para diagnosticar la proximidad de depósitos hiperpícnicos (canales y lóbulos) en intervalos equivalentes mediante estudios de testigos corona.