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innovar
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CORRESPONDENCIA: Beatriz Minguela-Rata. Universidad Complutense
de Madrid; Dpto. Organización de Empresas; Facultad de CC. Económi-
cas y Empresariales; Campus de Somosaguas; 28223 Madrid (España).
CITACIÓN: Minguela-Rata, B., Fernández-Menéndez, J., Fossas-Olalla, M.,
& López-Sánchez, J. I. (2014). Colaboración tecnológica con proveedo-
res en la innovación de productos: análisis de la industria manufacture-
ra española. Innovar, vol. 24, Edición Especial 2014, 55-65.
CLASIFICACIÓN JEL: M11, L23, L25.
RECIBIDO: Mayo 2012, APROBADO: Julio 2013.
Colaboración tecnológica con
proveedores en la innovación de
productos: análisis de la industria
manufacturera española
Beatriz Minguela-Rata
Doctora en ciencias económicas y empresariales. Profesora titular de organización de em-
presas. Grupo de investigación de producción y tecnologías de la información y las co-
municaciones. Universidad Complutense de Madrid.
Correo electrónico: minguela@ccee.ucm.es
José Fernández-Menéndez
Doctor en ciencias económicas y empresariales. Profesor contratado doctor de organización
de empresas. Grupo de investigación de producción y tecnologías de la información y las
comunicaciones. Universidad Complutense de Madrid.
Correo electrónico: jfernan@ccee.ucm.es
Marta Fossas-Olalla
Doctora en ciencias económicas y empresariales. Profesora ayudante doctor de organización
de empresas. Grupo de investigación de producción y tecnologías de la información y las
comunicaciones. Universidad Complutense de Madrid.
Correo electrónico: mfossas@ccee.ucm.es
José Ignacio López-Sánchez
Doctor en ciencias económicas y empresariales. Profesor titular de organización de empre-
sas. Grupo de investigación de producción y tecnologías de la información y las comunica-
ciones. Universidad Complutense de Madrid.
Correo electrónico: jilopez@ucm.es
RESUMEN: El diseño y desarrollo de nuevos productos se ha convertido en una actividad crucial
para seguir compitiendo en el mercado. Para llevar a cabo esta actividad de innovación, las empre-
sas deben valorar si disponen de los recursos y capacidades necesarios. En este trabajo se analiza la
colaboración tecnológica con proveedores como medio para llevar a cabo innovaciones en produc-
to, concretando en innovaciones radicales e innovaciones incrementales. A partir de una muestra
de empresas representativas de la industria manufacturera española, los resultados indican que las
empresas que colaboran tecnológicamente con sus proveedores tienen mayor propensión hacia las
innovaciones en producto, en concreto hacia las innovaciones radicales. Por tamaño de empresa,
las empresas medianas y las grandes tienen mayor propensión a innovar en producto, pero son las
de mediano tamaño las que tienden más hacia las innovaciones radicales.
PALABRAS CLAVE: proveedores, colaboración tecnológica, innovación en producto, innovación
radical, innovación incremental.
Introducción
El diseño y desarrollo de nuevos productos (bienes y servicios) se ha con-
vertido en una actividad crucial para las empresas que desean seguir com-
pitiendo en el mercado. Cualquier empresa, sin que importe el tipo de
actividad que realice o el tamaño que tenga, se siente obligada a renovar,
Innovación
TECHNOL OGICAL COLL ABORATION WI TH SUPPLIERS IN PR ODUCT
INNOVATION: ANALYSIS OF THE SPANISH MANUFAC TURING
INDUSTRY
ABSTRACT: The design and de velopment of ne w product s has become a
crucial a ctivit y for maintaining com petitiv eness in the mar ket. In order to
carry out these innovation activities companies need to assess whether
they have t he necess ary reso urces and ca pabilities . T his artic le ana-
lyzes t echnolog ical collabo ration wit h suppliers as a m eans of carr ying
out produc t innovation, foc using on radic al and increme ntal innova tions.
Based on a s ample of busine sses drawn f rom the Spanis h manufact uring
industr y the resul ts indicat e that compan ies that colla borate wit h their
supplier s in technolo gical innova tion are more lik ely to innova te in their
produc ts and in part icular to innovate r adically. In te rms of firm si ze, me-
dium and large e nterprises a re more likely to inno vate but it is medium e n-
terpri ses that most fr equently engag e in radical innovat ion.
KEY WOR DS: Suppliers, technological innovation, technological collabora-
tion, product innovation, radical innovation, incremental innovation.
COLL ABORATION TEC HNOLOGIQUE AVEC LE S FOURNISSEURS
DANS L’INNOVATION D E PRODUITS : ANA LYSE DE L’INDUSTRIE
MANUFACTURIÈR E ESPAGNOLE
RÉSUMÉ : L a concepti on et le dévelop pement de nou veaux produi ts est
devenu une a ctivité c ruciale pour co ntinuer d’être c ompétitif s ur le marché.
Pour mener à b ien cette act ivité d’innovat ion, les entrepri ses doivent éva-
luer si elles d isposent des re ssources et des c apacités néc essaires. Dan s ce
travail n ous analysons la c ollaboratio n technologi que avec les four nisseurs
comme moye n de mener à bien des in novations du pr oduit, en conc rétisant
des innova tions radic ales et des inn ovations in crémental es. A part ir d’un
échantillon d’entreprises représentatives de l’industrie manufacturière es-
pagnole, l es résultat s montrent que les e ntreprises qu i collaborent te chno-
logiquem ent avec leur s fournisse urs ont une plus gr ande propen sion aux
innovati ons de produit s, concrèt ement vers le s innovations r adicales. S elon
la taille de l’en treprise , les moyenne s et grandes en treprise s ont davan-
tage de pr opension à l’inn ovation de le urs produit s, mais celle s de taille
moyenne on t tendance à avoir plu s d’innovations ra dicales.
MOTS- CLÉS : Fournisseurs, collaborat ion technologique, innovation de
produit , innovation radi cale, innovatio n incrémentale .
COLA BORAÇÃO TECN OLÓGICA COM FOR NECEDORES NA INOVAÇ ÃO
DE PRODUT OS: ANÁLISE DA INDÚS TRIA MANUFATUR EIRA
ESPANHOLA
RESUMO: O projeto e des envolviment o de novos produt os virou uma ativ i-
dade cruc ial para seguir conc orrendo no merca do. Para realizar e sta ativi-
dade de inov ação, as empresa s devem avaliar se elas p ossuem os recur sos
e capaci dades necessá rios. Neste t rabalho, é analisada a c olaboração te c-
nológic a com fornece dores como mei o para realizar i novações em pr oduto,
concre tizando em ino vações ra dicais e inov ações incr ementais . A partir
de uma amost ra de empres as represe ntativa s da indústria ma nufatureir a
espanhola , os resulta dos indicam qu e as empresas q ue colaboram t ecno-
logicam ente com os seus for necedores tê m maior propensão às in ovações
em produt o, concret amente as ino vações ra dicais. Por t amanho de em-
presa, a s empresas mé dias e as grande s têm maior prop ensão a inovar
em produt o, mas são as de mé dio porte as q ue tendem mais p ara as ino-
vações radicais.
PALAV RAS -CHAV E: Fornecedores, colaboraç ão tecnológica, inovação em
produto , inovação radic al, inovação inc remental.
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expandir o incluso modificar los bienes o servicios que
oferta. Sin embargo, esta innovación es una condición
necesaria pero no suficiente. Muchas empresas se están
percatando de que la velocidad con la que introducen sus
productos en el mercado, la eficiencia en su producción y
la adaptación del producto a las necesidades de los consu-
midores van a determinar no solo su competitividad, sino
también su supervivencia (López-Sánchez, Minguela-Rata,
Rodríguez-Duarte y Sandulli, 2006).
Para llevar a cabo estas actividades de innovación, las
empresas de producción de bienes deberían valorar si dis-
ponen de los recursos (humanos, financieros, etc.) y las
capacidades (tecnológicas, de gestión, de operaciones,
etc.) necesarios para desarrollar un nuevo producto dife-
renciado de la competencia, y si no es así, evaluar las di-
ferentes opciones para disponer de dichas capacidades
(desarrollo interno, adquisición externa o colaboración)
apoyándose en la teoría de los costes de transacción y en
la de recursos y capacidades. Una opción intermedia entre
la empresa y el mercado es la colaboración tecnológica, de
manera que unas empresas proporcionen los recursos y ca-
pacidades de los cuales carecen otras o que se generen con
la consideración conjunta de todas ellas. Dentro de estos
tipos de colaboración haremos hincapié en la colaboración
con proveedores, ya que suelen tener mayor experiencia y
conocimiento de aquellos componentes clave para desa-
rrollar un nuevo producto, por lo que su implicación en la
actividad de innovación permite reducir riesgos y tiempos
de desarrollo y a la vez aumentar la flexibilidad, la calidad
del producto y su adaptabilidad al mercado. Por tanto,
uno de los objetivos de este trabajo consiste en analizar
si las empresas que colaboran en tecnología con los pro-
veedores tienen mayor propensión a realizar innovaciones
en producto.
Concretando el tipo de innovación en producto, las inno-
vaciones radicales se caracterizan por una mayor incerti-
dumbre y riesgo que las innovaciones de tipo incremental.
Dado que una de las ventajas de la colaboración tec-
nológica con proveedores es que permite compartir los
riesgos entre las partes implicadas, un segundo objetivo
de este trabajo consiste en analizar si las empresas que
colaboran tecnológicamente con los proveedores tienen
mayor propensión a llevar a cabo innovaciones en pro-
ducto de tipo radical.
Para analizar estas relaciones propuestas se lleva a cabo
un estudio empírico sobre una muestra representativa de
la industria manufacturera española. Luego se enuncia
una serie de conclusiones, limitaciones y futuras líneas
de investigación.
Marco teórico
La innovación puede definirse como la creación de cual-
quier producto, servicio o proceso nuevo para una unidad
de negocio. Comprende el conjunto de etapas científicas,
tecnológicas, organizativas, financieras y comerciales y
las inversiones en nuevos conocimientos, que conducen a
la implementación de productos y de procesos nuevos o
mejorados (OCDE, 2002). Casi siempre las innovaciones
se asocian a importantes productos o avances en el pro-
ceso, si bien es cierto que la mayoría de las innovaciones
de éxito se apoyan en el efecto acumulado de cambios
incrementales en productos y procesos y en una combi-
nación creativa de técnicas, ideas o métodos existentes
(Arias-Aranda, Minguela-Rata y Rodríguez-Duarte, 2001).
La innovación tecnológica es un elemento clave al deter-
minar la posición competitiva de las empresas y de los
países, puesto que puede aumentar las ventas y benefi-
cios de las empresas y el bienestar de los ciudadanos y
del país. Dentro de las organizaciones, el proceso de in-
novación se manifiesta mediante la creación y aplicación
de nuevos conocimientos tecnológicos en las actividades
realizadas por la empresa, de manera que sean capaces
de generar un producto (ya sea un bien o un servicio) o un
proceso nuevo, y que además proporcione un nuevo valor
para los clientes, obteniendo la empresa, de esta forma,
rentas satisfactorias.
Dentro de las innovaciones tecnológicas se pueden dis-
tinguir las innovaciones en producto (los nuevos conoci-
mientos tecnológicos se aplican para diseñar y desarrollar
nuevos productos o productos existentes pero mejorados)
y las innovaciones en proceso (los nuevos conocimientos
tecnológicos se emplean en aplicar nuevos procesos de
producción o perfeccionar los existentes). Para entrar en
los mercados las innovaciones en producto suelen ser
más apropiadas que las innovaciones en proceso, ya que
permiten responder con rapidez a las necesidades de los
clientes, aumentar la calidad y variedad de productos y
ganar cuota de mercado antes que los competidores (Nieto
y Santamaría, 2010). Por su parte, las innovaciones en pro-
ceso conducen a mejoras en la eficiencia de la producción
y reducciones de coste, gracias a inversiones materiali-
zadas en maquinaria o nueva tecnología, en el caso de las
pequeñas empresas, y en el de las grandes empresas, a la
búsqueda de mayor flexibilidad (Cohen y Klepper, 1996).
Tales innovaciones podrían explicar la mayor propensión
hacia la innovación en producto que en proceso parte de
las pequeñas y medianas empresas (pymes). Aunque las
innovaciones en proceso despiertan gran interés, en esta
investigación nos centraremos solo en las innovaciones en
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producto y en las empresas manufactureras productoras
de la innovación.
Dentro de las innovaciones en producto, según su grado
de novedad, es posible distinguir varios tipos de innova-
ciones que abarcarían desde simples modificaciones de
productos hasta las innovaciones extremas; de tal ma-
nera que, cuanto mayor sea el grado de originalidad, es
decir, cuanto más extrema sea la innovación, mayor será
el riesgo del mercado y la incertidumbre. En este sentido y
desde el punto de vista de la empresa, se pueden distinguir
las innovaciones incrementales (se refieren a mejoras rea-
lizadas sobre los productos existentes en las empresas) e
innovaciones radicales (en las que el producto es del todo
nuevo para la empresa).
En entornos bastante competitivos y turbulentos como los
actuales, las empresas deben estar preparadas para desa-
rrollar productos de excelente calidad que satisfagan las
necesidades de los consumidores, con rapidez y a un menor
coste que las empresas competidoras. Si las empresas de-
sean sobrevivir en el mercado, necesitan llevar a cabo esta
actividad de innovación. Para embarcarse en este proceso
de innovación, las empresas deberían integrar las necesi-
dades del mercado con las posibilidades tecnológicas y
las capacidades de operaciones y conseguir la colabora-
ción entre las diferentes áreas funcionales (operaciones,
investigación y desarrollo, marketing, finanzas, etc.). En
definitiva, las empresas deben valorar si disponen de las
capacidades necesarias para desarrollar un producto dife-
renciado de la competencia, lo que las obliga a plantearse
diversas opciones para conseguirlo.
Una posibilidad sería el desarrollo interno por medio de
las propias capacidades tecnológicas de la empresa y los
diferentes tipos de aprendizaje generados. La justificación
de esta internalización de las actividades de innovación
podría encontrarse en situaciones en las que los costes de
transacción fueran superiores en el mercado que dentro
de la empresa (Williamson, 1989). Otra posibilidad sería
la adquisición externa (esto es, recurrir al mercado) justo
en las situaciones contrarias a las planteadas, siendo cons-
cientes de que esta opción está disponible para todas las
empresas competidoras.
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Una opción intermedia entre la jerarquía y el mercado sería
la colaboración tecnológica, que se considera uno de los
instrumentos más eficientes para coordinar la actividad de
innovación de las empresas (Fossas-Olalla, López-Sánchez
y Minguela-Rata, 2010; Hoang y Rothaermel, 2005; Scho-
enmakers y Duysters, 2006; Tripsas Schrader y Sobrero,
1995; Ulset, 1996; Von Hippel, 1988). Así, las empresas
deciden colaborar entre sí para conseguir los recursos y
capacidades que no pueden generar dentro de ellas me-
diante los diferentes tipos de aprendizaje u obtener con
dificultad de manera eficiente en el mercado (Das y Teng,
2000). Las empresas intentarán seleccionar proveedores
que les proporcionen estos recursos y capacidades de los
que carecen para explotar las complementariedades que
puedan existir entre ellas, con el objetivo final de maxi-
mizar el valor de la empresa (Gulati, 1995; Kogut, 1988).
Aunque las empresas pueden colaborar en el aspecto tec-
nológico con clientes, competidores y determinados cen-
tros de investigación tales como universidades o institutos
tecnológicos (Cuervo-Cazurra y Un, 2007; Nieto y Santa-
maría, 2007), lo cierto es que gran número de empresas
recurren a sus proveedores al llevar a cabo actividades de
innovación. En estas situaciones, el papel del proveedor
puede consistir en apoyar el proceso de innovación de la
empresa cliente, ya sea porque esta plantee una idea pero
no sepa cómo materializarla o vaya más allá de sus com-
petencias clave (Fossas-Olalla et al., 2010), o bien el pro-
veedor puede desarrollar nuevas ideas que aporten a la
empresa compradora (Hakkanson, 1989). Esta visión pro-
viene del enfoque fundado en recursos y capacidades, con
el cual la red de proveedores de la empresa puede man-
tener e incluso aumentar su competitividad gracias al de-
sarrollo de innovaciones en producto como recurso valioso
difícil de imitar (Duschek, 2004; Dyer y Singh, 1998).
En definitiva, los proveedores casi siempre tienen mayor
experiencia y conocimiento sobre los componentes que
pueden ser críticos para el desarrollo de un nuevo pro-
ducto. Esta colaboración con proveedores permite reducir
los riesgos y tiempos de desarrollo en el avance de nuevos
productos, al par que aumenta la flexibilidad, la calidad
del producto y la adaptabilidad al mercado (Chung y Kim,
2003). La implicación de los proveedores permite identi-
ficar posibles problemas técnicos, acelerando así el tiempo
de desarrollo de un nuevo producto y la respuesta a las ne-
cesidades del mercado. Por consiguiente, los proveedores se
convierten en una fuente muy importante de conocimiento
sobre tecnologías, mercados y procesos para desarrollar
nuevos productos o mejorar los existentes (Eisenhardt y Ta-
brizi, 1995; Miotti y Sachwald, 2003; Nieto y Santamaría,
2007; Whitley, 2002). Como una de las ventajas de la co-
laboración tecnológica con proveedores consiste en que
permite compartir los riesgos entre las partes implicadas, y
precisamente las innovaciones en producto de tipo radical
se caracterizan por tener mayor incertidumbre y riesgo, nos
planteamos las siguientes hipótesis de investigación, para
cada una de las cuales se indica entre paréntesis su corres-
pondiente hipótesis nula:
H1: Las empresas que colaboran en tecnología con pro-
veedores tienen mayor propensión a realizar innovaciones
en producto (hipótesis nula: la colaboración tecnológica
con proveedores no afecta la probabilidad de que una
empresa innove en producto).
H2: Las empresas que colaboran en tecnología con provee-
dores tienen mayor propensión a desarrollar innovaciones
radicales (hipótesis nula: la colaboración tecnológica con
proveedores no afecta la probabilidad de que una em-
presa que innova en producto haga innovación radical).
Aunque cualquier empresa tiene disponibles las opciones
mencionadas, lo cierto es que las características que pueden
presentar algunas de ellas hacen desaconsejable ciertas
opciones. Si bien las pymes se caracterizan por su flexi-
bilidad y respuesta rápida, lo que fomenta la innovación
(Lewin y Massini, 2003; Nieto y Santamaría, 2010; Schum-
peter, 1942), suelen tener menores medios para acceder a
recursos y capacidades críticos para la innovación (Hewitt-
Dundas, 2006). Por su parte, las economías de alcance y
de escala generadas en las empresas de mayor tamaño
suelen situarlas en mejor posición al llevar a cabo activi-
dades de innovación que requieren inversiones en activos
tecnológicos e intangibles (Cohen y Klepper, 1996; Nieto y
Santamaría, 2010; Rogers, 2004).
La literatura sugiere diversas justificaciones de la exis-
tencia de un efecto positivo del tamaño de la empresa
sobre la actividad innovadora. Una de ellas se relaciona
con las imperfecciones del mercado de capitales, las cuales
les confieren una ventaja a las grandes empresas ya que
el tamaño se correlaciona con la disponibilidad y estabi-
lidad de fondos generados internamente (Arias-Aranda et
al., 2001; Rogers, 2004). Otro argumento es que la I + D es
más productiva en las grandes empresas gracias a las com-
plementariedades entre esta y otras actividades no manu-
factureras, o a la obtención de economías de alcance o la
reducción de riesgos asociados a los retornos positivos de
la innovación (Arias-Aranda et al., 2001; Rogers, 2004).
Otros argumentos hacen relación al acceso de las grandes
empresas a mayor conocimiento y capital humano, a que
los costes fijos de la innovación se pueden distribuir entre
un mayor número de unidades, etc. (Cohen y Klepper,
1996; Rogers, 2004).
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Por su parte, Scherer y Ross (1990) plantean que a medida
que las empresas crecen, la pérdida de control directivo
o el excesivo control burocrático reduce la eficiencia de
las actividades de innovación. Además, los incentivos de
los científicos individuales y de los emprendedores podrían
verse debilitados porque la capacidad para capturar los
beneficios de sus esfuerzos individuales disminuye, o sus
impulsos creativos se frustran porque las grandes corpora-
ciones suelen ser más conservadoras (Arias-Aranda et al.,
2001; Rogers, 2004).
Por lo que respecta a las pymes, Scherer (1965), Pavitt,
Robson y Townsend (1987) y Acs y Audretsch (1990, 1991) ar-
gumentan que este tipo de empresas suelen tener una cuota
desproporcionadamente grande de innovaciones respecto a
su tamaño. Suelen recurrir a la colaboración tecnológica
con otras empresas para suplir las carencias de recursos y
capacidades y mejorar así su posición competitiva (Hewitt-
Dundas, 2006; Rogers, 2004).
Metodología
Descripción de la población y de la muestra
Para contrastar las hipótesis planteadas se ha acudido a
la Encuesta Sobre Estrategias Empresariales (ESEE), desa-
rrollada por la Fundación SEPI (Sociedad Estatal de Par-
ticipaciones Industriales). La ESEE es una investigación
estadística que encuesta cada año desde 1990 a un panel
de empresas representativo de las industrias manufactu-
reras españolas. Su diseño es bastante flexible y está pen-
sado para generar información microeconómica de panel
adaptada a la especificación y contraste de modelos eco-
nométricos derivados de la teoría económica. Esta base de
datos se ha utilizado en gran variedad de estudios sobre
innovación (Beneito, 2006; Cuervo-Cazurra y Un, 2007;
Fossas-Olalla et al., 2010; Huergo, 2006; Nieto y Santa-
maría, 2007, 2010).
Una de las características más destacadas de la ESEE es su
representatividad. La selección inicial de empresas se rea-
lizó combinando criterios de exhaustividad y de muestreo
aleatorio. En el primer grupo se incluyeron las empresas
de más de doscientos trabajadores, a las que se requirió
su participación. El segundo grupo quedó formado por las
empresas con empleo comprendido entre 10 y 200 tra-
bajadores, que fueron seleccionadas por muestreo estra-
tificado, proporcional con restricciones y sistemático con
arranque aleatorio.
La ESEE se orienta a captar información acerca de las estra-
tegias de las empresas, es decir, relativas a las decisiones
que adoptan sobre los instrumentos de competencia a su
alcance. Estos instrumentos se consideran en un sentido
amplio y abarcan desde los más flexibles, de frecuente va-
riación en el corto plazo (precios), hasta los que requieren
plazos de tiempo más dilatados (gastos de I + D). Como
estas decisiones se adoptan en estrecha interacción con
el entorno competitivo de la empresa, la encuesta recaba
una amplia información sobre ese entorno (mercados de la
empresa). Esta información se completa con datos conta-
bles que permiten medir sus resultados.
Por tanto, la población de referencia de la ESEE son las
empresas con diez o más trabajadores de lo que se conoce
a menudo como industria manufacturera, que tengan al
menos un establecimiento productivo en España. El cues-
tionario tiene dos formatos, uno reducido que se lanza
cada año y otro completo que se lanza cada cuatro años.
Este cuestionario completo es el que recopila las variables
necesarias en nuestro estudio. En el momento de comenzar
nuestra investigación estaban disponibles los datos corres-
pondientes al año 2006. En la Tabla 1 presentamos su dis-
tribución por sectores de actividad.
TABLA 1. Distribución de la muestra por sectores de actividad
Sector de actividad Frecuencia Porcentaje
Industria cárnica 54 2,7%
Productos alimenticios y tabaco 182 9,2%
Bebidas 44 2,2%
Textiles 146 7,4 %
Cuero y calzado 54 2,7%
Industria de la madera 76 3,8%
Papel 64 3,2%
Edición y artes gráficas 107 5,4%
Productos químicos 127 6,4%
Productos de caucho y plástico 101 5,1%
Productos de minerales no metálicos 165 8,3%
Metalurgia 61 3,1%
Productos metálicos 260 13,1%
Maquinaria y equipo mecánico 135 6,8%
Máquinas de oficina, equipos
informáticos, de proceso, óptica 32 1,6%
Maquinaria y material eléctrico y
electrónico 97 4,9%
Vehículo de motor 94 4,7%
Otro material de transpor te 35 1,8%
Muebles 106 5,4%
Otras industrias manufactureras 40 2,0%
Total 1.9 80 10 0,0%
Fuente: Elaboración propia.
En cuanto al tipo de estudio, desde el punto de vista de la
dimensión temporal se trata de un estudio transversal, ya
que los datos utilizados corresponden a un único período.
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Según los objetivos de la investigación, se trata de un es-
tudio explicativo puesto que pretende analizar las causas
del fenómeno estudiado (en concreto, las causas de la in-
novación en producto). En cuanto al diseño de la investi-
gación, este trabajo constituye un estudio observacional
porque la información analizada se recopila a posteriori
y sin que los investigadores intervengan en el proceso
de generación de los datos, sino que su papel se limita
a compilarlos tras su generación (Babbie, 2000; Sánchez
Carrión, 1999).
Medición de las variables
Variables dependientes
Para contrastar la hipótesis 1, la variable dependiente “in-
novación en producto” (inn _pcto) se midió por medio de
una variable dicotómica, la cual toma el valor de 1 si la
empresa ha llevado a cabo innovaciones en producto y de
0 en cualquier otro caso.
Para el contraste de la hipótesis 2, la variable dependiente
“grado de innovación en producto” (gr _inn _pcto) tam-
bién se midió mediante una variable dicotómica. En este
caso, dicha variable tomaba el valor de 1 si la empresa
había llevado a cabo una innovación radical, es decir, si
afirmaba que al nuevo producto se le habían agregado
nuevas funciones. Por el contrario, la variable tomaba el
valor de 0 si la empresa había desarrollado una innova-
ción incremental, esto es, si había añadido cambios en el
diseño, en la presentación o en los componentes de los
productos actuales.
Variable independiente
La única variable independiente, la “colaboración tec-
nológica con proveedores” (col _t ec _prov), se midió
también con una variable dicotómica en la cual toma
el valor de 1 si la empresa afirma tal hecho y de 0 en
caso contrario.
Variables de control
Se decidió introducir las siguientes variables de control:
1) Tamaño de la empresa (tamaño). Al tratarse de una
variable categórica y ordenada, se ha medido codifi-
cándola utilizando un contraste basado en polinomios
ortogonales, de manera que pueda poner de manifiesto
la existencia de tendencias lineales, cuadráticas, cú-
bicas, etcétera (Fox y Weisberg, 2011). En este sentido,
la variable tamaño _l indicaría la existencia de una
tendencia lineal, mientras que la variable tamaño _q
mostraría la existencia de una tendencia cuadrática.
2) Antigüedad (edad). Esta variable podría ser un indi-
cador de la experiencia que puede tener la empresa en
tareas de innovación y su actitud hacia esta (si tiene
aversión al riesgo y por tanto es más conservadora o
si, por el contrario, es más propensa a asumir riesgos).
También se trata de una variable categórica y orde-
nada, por lo que se ha codificado utilizando un con-
traste basado en polinomios ortogonales. En este caso
la variable edad _l indicaría la existencia de una ten-
dencia lineal, edad _q reflejaría la existencia de una
tendencia cuadrática, edad _c mostraría la existencia
de una tendencia cúbica y la variable edad _4 indicaría
la existencia de otro tipo de tendencia.
3) Propensión exportadora (prop _exp). Dado que las em-
presas se encuentran en una situación en la que tienen
que desarrollar productos para mercados globales a
causa del aumento de la competencia tanto nacional
como global, puede resultar interesante que la propen-
sión exportadora tenga un efecto significativo sobre la
innovación en producto y en su grado de innovación.
En este sentido, esta variable se midió como la ratio
entre las ventas de la empresa en mercados extranjeros
sobre el total de ventas.
La Figura 1 resume las hipótesis planteadas en dos mo-
delos caracterizados por ser dicotomías anidadas, con lo
que se utilizarán sendas regresiones logísticas para con-
trastar dichas hipótesis.
Analíticamente:
Modelo A:
log_
_
__
prob INNPCTO
prob INNPCTO
COLTEC PROV
()
−
()
=
++
10
1
β
ββ
β
ββ
ββ
β
2
34
56
74
TAMAÑO L
TAMAÑO QEDADL
EDAD QEDADC
EDAD
_
__
__
_
++
++
+++β
8PROEXP_
(1)
Modelo B:
log__
-__
_
prob GR INNPCTO
prob GR INNPCTO
COLTEC
()
()
=
+
10
1
β
β_
__
__
__
PROV TAMAÑO L
TAMAÑO QEDADL
EDAD QEDADC
+
++
++
+
β
ββ
ββ
β
2
34
56
7EEDAD PROEXP__48
+β
(2)
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Análisis de los resultados
Antes de la contrastación de los modelos, la muestra se so-
metió a un proceso de depuración para eliminar las obser-
vaciones que tenían datos atípicos o missing values. Dado
que los modelos que se han de contrastar se caracterizan
por ser multinomiales anidados (en concreto, dicotomías
anidadas), para el modelo A la muestra se redujo a 1.952
observaciones, mientras que para el modelo B, a 373 ob-
servaciones (solo 373 empresas afirmaban haber llevado
a cabo innovaciones en producto). En las Tablas 2 y 3 se
FIGURA 1. Modelos de investigación
TABLA 2. Variables independientes y dependientes por tamaño de empresa
Variables Total muestra
(1.952 observaciones)
Pequeñas empresas
(998 observaciones)
Medianas empresas
(425 observaciones)
Grandes empresas
(529 observaciones)
Colaboración tecnológica con proveedores 411 84 84 243
Innovación en producto 380 103 91 186
Innovación radical 181 40 49 92
Innovación incremental 192 62 41 89
Fuente: Elaboración propia.
TABLA 3. Variables independientes y dependientes por edad de la empresa
Variables Total muestra
(1.952 observaciones)
Antes de 1940
(104 observaciones)
Entre 1940 y 1959
(149 observaciones)
Entre 1960 y 1975
(373 observaciones)
Entre 1976 y 1985
(369 observaciones)
Después de 1985
(957 observaciones)
Colaboración
tecnológica con
proveedores
411 41 53 97 66 154
Innovación en
producto 380 31 43 79 71 156
Innovación
radical 181 15 21 36 25 84
Innovación
incremental 192 16 22 39 46 69
Fuente: Elaboración propia.
Fuente: Elaboración propia.
¿Colaboración
tecnológica con
proveedores?
Variables de
control:
edad, tamaño,
prop. exportadora
¿Innovación en
producto? No
Sí
Incremental
Radical
Hipótesis 2
Hipótesis 1
Modelo A
Modelo B
¿Grado de
innovación?
62
Innovación
rev. innovar vol. 24, eDiCiÓn eSPeCial 2014
recogen algunos datos descriptivos de las principales va-
riables analizadas. A continuación se utilizó el programa R
de análisis de datos para la contrastación de los modelos,
cuyos resultados aparecen recogidos en las Tablas 4 y 5.
TABLA 4. Contrastación modelo A
Coeficiente estimado Error estándar
Constante –2,263896*** 0,097269
COL_TEC_PROV 1,948851*** 0,139847
TAMAÑO_L 12,631715*** 3,250396
TAMAÑO_Q –5,274516 + 2,787832
EDAD_L – 0,920624 2,846089
EDAD_Q 0, 242273 2,692736
EDAD_C 1, 895506 2,660536
EDAD_4 –4,223758 2,738733
PR OP_ E XP 0,007467 0,002418**
R2 26,8%
*** p ≤ 0,001; ** p ≤ 0,01; * p ≤ 0,05; + p ≤ 0,1.
Fuente: Elaboración propia.
En la Tabla 4, tal como están medidas las variables, los
coeficientes positivos y significativos indican mayor pro-
pensión de las empresas a innovar en producto, mientras
que los coeficientes negativos reflejan justo lo contrario.
Los resultados parecen indicar que, tal como se establecía
en la hipótesis 1, las empresas que colaboran tecnológi-
camente con sus proveedores tienen mayor propensión a
realizar innovaciones en producto, pues el coeficiente de
la variable col _tec _prov aparece con el signo positivo y
muy significativo.
En cuanto a la experiencia de la empresa, medida por
medio de la variable edad, se observa que sus coeficientes,
para las diferentes variables, no resultan significativos, por
lo que esta variable no tiene influencia en una mayor pro-
pensión hacia la innovación de producto (y tampoco se
detectan tendencias de tipo significativo). Con respecto a
la variable prop _exp, si bien su coeficiente es significativo,
apenas tiene influencia en la propensión hacia la innova-
ción en producto pues su valor es próximo a cero.
En cuanto a la variable tamaño, los resultados indican la
existencia de un efecto lineal muy significativo (es decir,
la propensión a innovar en producto crece de manera
lineal con el tamaño de la empresa), pero con cierta
corrección cuadrática dado que el coeficiente de la va-
riable tam año _q es marginalmente significativo y con
signo negativo.
Por lo que respecta a la segunda hipótesis (Tabla 5), los
coeficientes positivos y significativos obtenidos indican
mayor propensión a innovar radicalmente frente a las in-
novaciones incrementales. Los resultados parecen indicar
que, tal como se establecía en la hipótesis 2, las empresas
que colaboran tecnológicamente con sus proveedores
tienen mayor propensión a las innovaciones radicales, ya
que el coeficiente de la variable col _tec _prov aparece
con el signo positivo y significativo.
TABLA 5. Contrastación modelo B
Coeficiente estimado Error estándar
Constante –0,515923** 0,19568 0
COL_TEC_PROV 0,518553* 0,224787
TAMAÑO_L 7,12 340 3 5,198468
TAMAÑO_Q –10,2 33434* 4,880600
EDAD_L –8,667383+ 4,51814 9
EDAD_Q 7, 390 8 02+ 4,420730
EDAD_C –7,542295+ 4,2 97816
EDAD_4 5,738756 4,472722
PR OP_ E XP 0, 0 0 3118 0,003900
R2 7,4 %
*** p ≤ 0,001; ** p ≤ 0,01; * p ≤ 0,05; + p ≤ 0,1.
Fuente: Elaboración propia.
El valor de R2 de 7,4% es perfectamente satisfactorio, si
se tiene en cuenta que nuestro modelo pretende analizar
el papel que desempeña la colaboración tecnológica con
proveedores sobre el grado de innovación en producto y
no pretende ser un modelo sobre el grado de innovación
en producto en general, modelo que tal vez requeriría un
elevado número de variables explicativas. Por otra parte,
Hosmer y Lemeshow (2000) indican que los valores de R2
en las regresiones logísticas son normalmente muy bajos
en comparación con los que se observan de forma habitual
en el caso de regresiones lineales, pero que esto no supone
ningún problema, ya que para las regresiones logísticas la
utilidad esencial de R2 es la de comparar modelos para se-
leccionar el más apropiado (el propio valor de R2 supone
una comparación con el modelo nulo e indica la mejora
con respecto a este).
Los resultados parecen indicar que la propensión expor-
tadora no es significativamente diferente en las empresas
que innovan de manera radical de las que optan por inno-
vaciones incrementales.
En cuanto a la variable edad, algunos de sus coeficientes
son marginalmente significativos, por lo que es posible de-
tectar ciertas tendencias. La variable edad _l presenta un
coeficiente negativo, por lo cual identifica la existencia
de cierta tendencia lineal decreciente que se puede inter-
pretar como una menor propensión hacia la innovación
radical cuantos más años lleva funcionando la empresa.
Pero esta tendencia lineal decreciente no es perfecta, ya
que se detecta también una tendencia cuadrática (la va-
riable edad _q presenta signo positivo y marginalmente
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significativo) que indica que esa menor propensión hacia
la innovación radical con respecto a la edad es menos
que proporcional. Y a su vez, esta tendencia cuadrática
tampoco es perfecta porque los resultados indican la
existencia de una tendencia cúbica marginalmente signi-
ficativa. En definitiva, cuantos más años llevan operando
las empresas, la propensión hacia la innovación radical es
menor, aunque es menos que proporcional.
Con respecto a la variable tamaño, los resultados señalan
la existencia de una tendencia cuadrática negativa (la pro-
pensión hacia la innovación radical tendría forma de U in-
vertida respecto al tamaño de la empresa, tal como puede
observarse en la Figura 2), ya que el coeficiente de la va-
riable tamaño _q es negativo y significativo. Este resultado
indica que al aumentar o disminuir el tamaño de la em-
presa la propensión hacia la innovación radical es menor,
y además esta disminución es más que proporcional al au-
mento de tamaño.
FIGURA 2. Relación entre la propensión hacia la innovación
radical por tamaño de empresa
Propensión hacia la innovación radical
Pequeñas Medianas Grandes TAMAÑO
Fuente: Elaboración propia.
Conclusiones
El diseño y desarrollo de nuevos productos (ya sean bienes
o servicios) es una actividad esencial para las empresas
si quieren seguir compitiendo en el mercado. Sin que im-
porten el tipo de actividad que realice, el número de años
que lleve operando en el mercado o el tamaño que tenga,
cualquier empresa se siente obligada a renovar, expandir o
incluso modificar los bienes y servicios que oferta. Las em-
presas deben estar preparadas para desarrollar productos
de excelente calidad que satisfagan las necesidades de los
consumidores, con rapidez y a un menor coste que las em-
presas competidoras. Pero para llevar a cabo dicho proceso
de innovación deben valorar si disponen de los recursos y
capacidades necesarios para conseguir un producto dife-
renciado de la competencia.
Mediante la colaboración tecnológica con proveedores, las
empresas pueden conseguir esos recursos y capacidades
en aquellos casos en los que no son capaces de generarlos
ellas mismas mediante los diferentes tipos de aprendizaje
u obtenerlos con dificultad de manera eficiente en el mer-
cado. Basándonos en la Encuesta Sobre Estrategias Empre-
sariales (ESEE) para el año 2006, podemos observar que,
en efecto, la colaboración tecnológica con proveedores es
un factor importante en el resultado del proceso de inno-
vación, puesto que tanto la propensión hacia la innovación
en producto como hacia el desarrollo de innovaciones en
producto de tipo radical (innovaciones caracterizadas por
mayor incertidumbre y riesgo) son significativamente ma-
yores en las empresas que colaboran tecnológicamente con
proveedores. Estas empresas han percibido que la mayor
experiencia y conocimiento que tienen los proveedores
sobre los componentes clave de los nuevos productos per-
miten reducir riesgos y el tiempo de desarrollo asociados
al proceso de innovación y aumentar la flexibilidad, la ca-
lidad del producto y su adaptabilidad al mercado.
No obstante, al llevar a cabo el proceso de innovación tam-
bién deberían considerarse otras características de las em-
presas tales como tamaño y experiencia (medida en años
de operación en el mercado), puesto que pueden generar
ciertas rigideces que las hagan menos propensas a rea-
lizar innovaciones en producto en general o en producto
de tipo radical en particular. Así, esta investigación revela
que la experiencia de la empresa no influye en mayor pro-
pensión hacia la innovación en producto. Sin embargo,
cuando se concreta el tipo de innovación se detecta menor
propensión hacia la innovación en producto de tipo radical
cuantos más años lleva la empresa operando en el mer-
cado. Estos resultados reflejan una actitud más conserva-
dora al innovar de parte de las empresas más antiguas, la
cual se puede deber a que estas empresas son más reacias
a cambiar sus rutinas y procedimientos establecidos.
Por su parte, la variable tamaño de la empresa ha generado
un gran debate en la literatura relacionada con la inno-
vación. En esta investigación, los resultados indican que
cuanto mayor es el tamaño de la empresa, mayor es la pro-
pensión a innovar en producto. Este resultado está en con-
sonancia con aquella parte de la literatura que les confiere
una ventaja a las grandes empresas, ya que el tamaño se
correlaciona con la disponibilidad y estabilidad de fondos
generados internamente, la obtención de economías de
alcance, las complementariedades entre las actividades,
la reducción de riesgos asociados a los retornos positivos
de la innovación, etc. (Arias-Aranda et al., 2001; Cohen y
64
Innovación
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Klepper, 1996; Rogers, 2004). Sin embargo, cuando se
concreta el tipo de innovación, se observa que son las em-
presas de mediano tamaño las que se aventuran a llevar a
cabo innovaciones más arriesgadas, mientras que las pe-
queñas y las grandes empresas se decantan más por in-
novaciones en producto de tipo incremental y por tanto
asumen una actitud más conservadora. Scherer y Ross
(1990) ponían de manifiesto esta actitud conservadora de
parte de las grandes empresas, que provocaba la disminu-
ción de los impulsos creativos de los investigadores y em-
prendedores, disminuyendo así la eficiencia de la I + D en
este tipo de empresas.
Por último, la propensión exportadora apenas tiene in-
fluencia en la propensión hacia la innovación en producto
y no es significativamente diferente en las empresas que
innovan en productos radicales de las que optan por inno-
vaciones en producto de tipo incremental.
Estos resultados deben interpretarse con cierta cautela,
pues la investigación no está exenta de limitaciones, las
cuales se derivan sobre todo de la fuente de datos uti-
lizada. Entre otras limitaciones, la ESEE solo incluye em-
presas productoras de bienes de ámbito español, y casi
todas las variables utilizadas en el análisis son de tipo di-
cotómico. No obstante, la ESEE nos ha permitido obtener
un número de observaciones elevado y nos ha evitado
todos los problemas derivados de la recogida de informa-
ción individual.
En futuros trabajos de investigación pretendemos realizar
este análisis comparativo de distintos sectores (haciendo
distinción entre los sectores de tecnología de punta, media
y poco desarrollada) y considerando además la innovación
en proceso. También sería interesante ampliar el grupo
de variables planteadas en el modelo, con el objetivo de
aumentar su confiabilidad y considerar todos los efectos
cruzados. Por último, también resultaría interesante ana-
lizar las causas por las cuales las empresas más antiguas
adoptan esa actitud conservadora al llevar a cabo activi-
dades de innovación en producto.
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