Erigido en torno al año 500 a. C., el monumento turriforme de Pozo Moro (Chinchilla de Montearagón, Albacete) es uno de los testimonios arqueológicos con mayor relevancia, tanto arquitectónica como iconográfica, no sólo de la Cultura Ibérica, sino del conjunto de la Protohistoria peninsular. Descubierto a inicios de la década de 1970, cuando su proceso de excavación y anastilosis todavía no había
... [Show full abstract] concluido se había establecido ya como axioma en la literatura científica que su interpretación debía realizarse teniendo en cuenta de manera prácticamente exclusiva la documentación arqueológica y literaria originaria del ámbito cultural sirio-fenicio. Durante el medio siglo siguiente, esta ha sido casi la única línea de investigación desarrollada. Como resultado de ello, numerosos estudios han hecho hincapié en las similitudes perceptibles entre algunos de los elementos del monumento y otros testimonios arquitectónicos e iconográficos procedentes tanto del Levante mediterráneo como del Norte de África. Pero aunque el monumento ibérico comparte diversas características con otros testimonios arqueológicos originarios tanto del ámbito cultural sirio-fenicio como del área de influencia cartaginesa, el predominio de esta línea metodológica ha llevado a obliterar que otras de sus características encuentran una explicación mucho más clara y directa mediante el examen de testimonios arqueológicos e iconográficos que proceden de otras áreas culturales.