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Enseñar a argumentar: un desafío para la escuela actual

Authors:
Introducción: Enseriar a argumentar:
un desafío para la escuela actual
Anna Camps y Joaquim Dolz
Los estudios que hemos reunido en este monográfico sobre la argumentación y
su enseñanza sugieren toda una gama de posibilidades que ese tipo de discurso
puede jugar en la educación ética del ciudadano moderno y en el aprendizaje de la
expresión oral y escrita.
La razón de ser de toda argumentación es la de exponer un punto de vista, des-
tacarlo y justificarlo, tratando de convencer a uno o varios interlocutores o «adversa-
rios» de su valor.
Desde 1958, gracias principalmente a los trabajos de ChaYm Perelman y de
Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
los procedimientos argumentativos y las interacciones entre los interlocutores.
Los trabajos de la «nueva retórica» interesaron primeramente a los publicita-
rios y a los políticos y sólo en epocas más recientes a los educadores y a los profesores
de lengua; la enseñanza de la argumentación apenas tenía espacio hasta ahora en los
programas de lengua en nuestro país. Sin embargo su importancia en todos los
dominios de la vida social es comúnmente reconocida en la actualidad. Por ello, el
dominio de la argumentación empieza a ser hoy un objetivo de enseñanza en los pro-
gramas de primaria y de secundaria.
Aprender a argumentar en una sociedad democrática
No es una novedad para nadie que en las situaciones habituales de lectura y
escritura en la enseñanza primaria y secundaria predominan las actividades sobre la
narración. La enseñanza metódica de la argumentación apenas se contempla en los
programas o se introduce tarde y con resultados considerados poco satifactorios por
los profesores de bachillerato, por los profesores universitarios y por la sociedad en
general. No sólo no se enseña a los estudiantes a expresar sus opiniones oralmente o
por escrito, a discutir y a debatir temas controvertidos, sino que muy pocos manua-
les de lectura presentan textos argumentativos.
A pesar de ello, niños y jóvenes viven inmersos en una sociedad de la persua-
sión en que se intenta influir en la opinión de los ciudadanos y también en la de ellos
a través de todos los medios de comunicación orales y escritos.
Incluso los cuentos y la fábulas dirigidos a los más pequeños intentan transmi-
tir, más o menos directamente, juicios de valor y opiniones morales. Ya La Fontaine
justificaba el interés de la ficción para transmitir valores morales con el argumento
siguiente:
«Una máxima moral desnuda aporta aburrimiento.
El cuento lleva a aceptar sutilmente el precepto.»
1995 by Aprendizaje, ISSN: 0214-7033
Comunicación, Lenguaje y Educación,
1995,
25,
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La literatura infantil tuvo en en sus orígenes intención moralizadora y didácti-
ca y en nuestros días muchas obras para jóvenes e incluso para niños les enfrenta a
conflictos sociales y personales que exigen juicio moral. Vemos pues que la narración
puede presentar una orientación argumentativa. Ocurre, sin embargo, que en este
tipo de obras se argumenta indirectamente sin que, en general, el autor tome explí-
citamente la responsabilidad de la opinión que defiende. Las experiencias actuales
sobre la enseñanza precoz de la argumentación relativizan la posición de La Fontaine.
De un lado, las narraciones de ficción no son los únicos textos que interesan a los
alumnos. Por otro lado, tratar de transmitir valores éticos sin precisar quién toma la
responsabilidad de los mismos, sin pasar por un debate, no parece ser la forma de
educación cívica más adecuada en una sociedad democrática.
En el momento actual asistimos, a todos los niveles de la enseñanza, a un rena-
cimiento del interés por la argumentación. Sin embargo existen, quizás no del todo
explícitas, algunas cuestiones que inciden en la decisión de incluir o no la enseñanza
del discurso argumentativo en primaria y en secundaria:
—¿Aceptará la sociedad que confrontemos al alumnado con verdaderas situa-
ciones polémicas?
—¿Puede ser la argumentación una fuente de conflictos?
—¿Es la argumentación contraria a la neutralidad deseable de la escuela
democrática?
—¿Es éticamente aceptable enseñar en la escuela estrategias para persuadir, y
de alguna manera «manipular», al destinatario?
Es verdad que toda argumentación surge de una situación polémica, de una
controversia, de un desacuerdo, de un conflicto de intereses. Sin embargo argumen-
tar es justamente lo contrario de aferrarse a un punto de vista. Si el argumentador
pretende conseguir su objetivo (ya sea crear una opinión favorable sobre un tema, ya
sea modificar la posición del interlocutor), no le quedará más remedio que:
1.
reconocer un tema polémico y ser consciente de los diversos puntos de
vista que existen sobre él;
2.
discutir los diferentes puntos de vista y los recursos argumentativos posi-
bles para defenderlos;
3.
tener su propia opinión sobre el tema discutido;
4.
valorar los argumentos contrarios;
5.
justificar su punto de vista con un conjunto de argumentos adecuados;
6.
utilizar de manera rigurosa y consciente los argumentos;
7.
tratar desarrollar estrategias para atraer los sentimientos de los otros;
8.
reconocer los argumentos del oponente y saberlos refutar;
9.
aceptar e incorporar algunos de los argumentos del adversario como con-
cesiones;
10.
saber negociar una posición de compromiso.
Este pequeño decálogo no es más que una lista abierta para mostrar la comple-
jidad de las conductas argumentativas y la dificultad de su gestión autónoma. Com-
prender lo que está en juego en las situaciones sociales en las que se vive un conflicto
de opiniones constituye un objetivo educativo en si, sin el cual dificilmente se puede
aprender a argumentar.
HACIA UNA DIDÁCTICA
DE
LA ARGUMENTACIÓN
Por lo que se refiere a la comprensión de los discursos argumentativos pode-
mos formulamos diversas preguntas: ¿Qué comprenden los alumnos de primaria
cuando leen un texto de opinión? ¿Qué comprenden los alumnos de secundaria
cuando leen un editorial de prensa, un artículo de opinión, un texto de filosofía, un
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panfleto, un documento histórico? ¿Cómo leen los eslógans publicitarios incitando a
consumir alcohol o a comprar un coche?
A veces, los alumnos no comprenden ni el carácter de la controversia, ni los
intereses que representan los diferentes actores sociales. No son capaces de identificar
la posición del argumentador, ni la del adversario. No comprenden el razonamiento
subyacente, las ironías, los contra-argumentos, les concesiones, etc. Saturados de
mensajes contradictorios, se ven sometidos a presiones ideólogicas, se dejan influen-
ciar sin poder justificar su elección o son incapaces de tomar una decisión autónoma.
Así pues el profesorado debe plantearse cuestiones como las siguientes: ¿Cómo
hacer para desarrollar una lectura crítica? ¿Cómo enseñarles a interpretar las presu-
posiciones y los argumentos implícitos de la publicidad?
ComprInder cómo funciona la argumentación supone la constitución de un
corpus de textos argumentativos (orales o escritos) destinado a servir de referencia
para el profesor y para el alumno. Aprender a argumentar supone pasar por activida-
des de lectura, de observación, de comparación y de análisis de textos auténticos
publicados por la prensa (editoriales, cartas de los lectores, artículos de opinión),
. fragmentos de obras de la literatura clásica y contemporánea, anuncios difundidos en
las campañas publicitarias o textos escritos por los propios alumnos. La selección de
dicho corpus es una de las tareas más difíciles y delicadas Cuatro tipos de criterios
intervienen en la selección:
a)
el interés del contenido temático para el alumnado, desde el punto de vista
de la motivación;
b)
la aceptabilidad del contenido temático, desde el punto de vista ético;
c)
la presencia de recursos argumentativos y de características lingüístico -
discursivas que se pretende estudiar;
d)
la posibilidad de intervención didáctica sobre los mismos.
Desde el punto de vista de la producción surge una pregunta crucial: ¿Pode-
mos enseñar a argumentar sin confrontar a los niños y jóvenes con situaciones con-
trovertidas, con los textos polémicos? Tanto las unas como los otros nos parecen
indispensables. Leyendo atentamente el decálogo anterior, se llega rapidamente a la
conclusión que la controversia es la base misma de la argumentación. Saber argu-
mentar constituye, para todos los actores de una democracia, el medio fundamental
para defender sus ideas, para examinar de manera crítica las ideas de los otros, para
rebatir los argumentos de mala fe y para resolver muchos conflictos de intereses. Para
un joven o un adolescente, saber argumentar puede ser aún más importante: consti-
tuye el medio para canalizar, a través de la palabra, les diferencias con la familia y la
sociedad. Así pues surge la conveniencia de crear situaciones reales o simuladas en
que los niños o los jóvenes tengan posibilidades de llevar a cabo todas las operaciones
propias de la argumentación y ejercitarse en las estrategias implicadas
Los criterios discursivos y didácticos (puntos c y d) serán los aspectos centrales
tratados en este monogáfico, lo cual no significa que los otros no tengan su impor-
tancia. En cuanto a los contenidos éticos vehiculados por los textos (punto b), al
abordar ciertos temas delicados sería aconsejable seleccionar las controversias en fun-
ción del nivel de madurez de los alumnos y del contexto social en el que viven. Es
necesario sobre todo fomentar, en la medida de lo posible, la confrontación de textos
presentando puntos de vista distintos sobre el mismo problema.
De lo que hemos dicho hasta ahora se desprende que no sólo es razonable sino
necesario que en la escuela se enseñe a argumentar y para ello será necesario confron-
tar a los alumnos con situaciones de argumentación en dos aspectos: el de la com-
prensión de los argumentos que se vehiculan a través de los discursos sociales, orales
y escritos y a través de la creación de situaciones de argumentación en que ellos
deban poner en práctica las esteategias a que hacían referencia los 10 puntos citados
anteriormente.
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EL CONTENIDO DE ESTE MONOGRÁFICO
Un buen conocimiento del funcionamiento del discurso argumentativo consti-
tuye una condición necesaria (aunque no suficiente!) para la elaboración de un proyec-
to didáctico sobre la enseñanza y el aprendizaje de la argumentación. Desde ese punto
de vista, el lector encontrará en las contribuciones de Jean-Michel Adam y de Maria
Josep Cuenca una exposición teórica y una serie de proposiciones metodológicas para
analizar los textos argumentativos, ilustradas con numerosos ejemplos. Mientras que
el trabajo de Adam se centra en la estructura elemental que, según su hipótesis, tiene
toda argumentación, el estudio de Cuenca aborda de manera más detallada el funcio-
namiento de los principales mecanismos lingüísticos y discursivos de la misma.
Para conseguir una enseñanza eficaz y diversificada de la lectura y de la escri-
tura de textos argumentativos, es necesario examinar y seleccionar los contenidos
que parecen más adecuados para organizar su enseñanza. En la contribución de
Dominique Guy Brassart, los profesores encontrarán una discusión sobre la perti-
nencia de una serie de nociones para abordar los problemas complejos de compren-
sión y producción de textos argumentativos.
Discutir un punto de vista en público, participar en un debate contradictorio,
escribir un texto para justificar una decisión, dirigir una carta a un periódico para
refutar los argumentos de un editorial, argumentar en defensa de una tesis, escribir
un texto de protesta, etc. son actividades verbales que deberían ocupar un puesto
importante en los currículos escolares. Los autores de este monográfico parecen todos
de acuerdo en la necesidad de abordar la argumentación en la escuela, pero la coinci-
dencia de pareceres sobre esa cuestión va mucho más allá. Para aprender a argumen-
tar, no basta con crear situaciones de argumentativas interesantes para los alumnos,
es preciso organizar de forma sistemática las intervenciones didácticas.
Se trata, en primer lugar, de observar y analizar las capacidades de los alumnos
cuando leen o escriben un texto argumentativo; en segundo lugar, de proponer
secuencias didácticas adaptadas a las capacidades iniciales observadas; y, una vez
experimentadas las secuencias, evaluar los progresos realizados por los alumnos. Las
propuestas didácticas de Anna Camps, Jany Cotteron y Joaquim Dolz, destinadas a
alumnos de primaria y de secundaria van en esa dirección. Los puntos más relevantes
de las nuevas propuestas didácticas son los siguientes:
creación de medios para comprender y analizar las situaciones de comuni-
cación en las que se argumenta;
elaboración de ejercicios y actividades sobre algunos de los recursos lin-
güísticos característicos de la argumentación;
reflexión sobre las strategias y procedimientos retóricos;
busqueda de una articulación entre los usos lingüísticos y las actividades
de reflexión sobre la lengua.
diversificación de las actividades sobre la planificación del texto argumen-
tativo.
La contribución de Ana Cros merece mención aparte por su originalidad Cros
analiza los argumentos de autoridad y otras estrategias persuasivas típicas del discur-
so educativo del profesor para ganar la benevolencia del alumnado y despertar su
interés. Muchos de nuestros lectores se reconocerán en las observaciones de Cros y al
mismo tiempo descubriran la dimensión argumentativa del discurso académico.
Hemos querido en esta breve introducción mostrar el interés que suscita hoy a
diversos niveles un tema como el de la argumentación y de su enseñanza. Esperamos
que este número de Comunicación, Lenguaje y Educación ofrezca a cada uno la posi-
bilidad de continuar su reflexión.
... Las secuencias didácticas son concebidas como unidades de enseñanza que tienen como principal objetivo el desarrollo de competencias desde la comprensión o la producción de textos, a partir de una situación real de enunciación (Pérez y Rincón, 2009;Camps y Dolz, 1995). Esta consta de 3 fases que, según Camps y Colomer (2003), consisten en la fase de preparación donde se planean los contenidos y se construyen actividades de activación de esquemas en los estudiantes. ...
... Frente a este planteamiento, es posible definir la argumentación como un ejercicio cotidiano que segúnDolz (1995), parte de un desacuerdo, una controversia o incluso polémicas y por medio de esta, se intenta persuadir a uno o varios sujetos para incidir en la toma de decisiones, posturas y opiniones. Todo ejercicio de argumentación debe incluir una opinión y unas razones que la sustentan, las cuales se nutren de evidencias, explicaciones e incluso sofismas que tienen la intención de ser tomados como válidos o racionales.En el contexto educativo, la competencia argumentativa tiene una gran relevancia, en especial para hacer conscientes a los estudiantes de la influencia que ejercen los medios de comunicación por medio de mensajes contradictorios, que pueden hacer presión en la toma de decisiones, sin tener las herramientas para justificar sus elecciones(Camps y Dolz, 1995). Por todo lo anterior, los autores consideran imprescindible el desarrollo de estrategias que expongan a los estudiantes a situaciones argumentativas, como el análisis del discurso oral y escrito de otros y orientarlos hacia técnicas que les permitan argumentar sus puntos de vista en situaciones reales de comunicación, mismas que se aplicaron en la producción de ensayos en este proyecto.Al respecto, un ensayo es difícil de definir debido al carácter dual de la rigurosidad con la libertad literaria y la búsqueda de la objetividad, con la subjetividad del autor(Vásquez, 2019). ...
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Introducción: El presente artículo es el resultado de una investigación en la que se llevó a cabo una secuencia didáctica con un grupo de estudiantes de un preuniversitario. El propósito de esta, era desarrollar competencias en la producción de textos argumentativos tipo ensayo, mediado por la fotografía y generar una reflexión sobre las prácticas de enseñanza de lenguaje por parte de las investigadoras. Metodología: El estudio se realizó desde un enfoque cuantitativo con un diseño cuasi experimental intragrupo, en el que se aplicó una prueba Pre test, seguido de una intervención didáctica y por último un Pos test. Los instrumentos utilizados para la recolección de la información fueron una rejilla con la que se evaluaron los textos producidos por los estudiantes y el diario de campo, utilizado para el análisis de las prácticas de enseñanza del lenguaje. Resultados: Los resultados muestran la eficacia de la secuencia didáctica para el fortalecimiento de las capacidades argumentativas en los estudiantes. Por otro lado, las docentes investigadoras tuvieron transformaciones en la manera de concebir y enseñar el lenguaje. Conclusiones: La aplicación de una secuencia didáctica con la mediación de la fotografía, la retroalimentación colectiva, el uso de las TIC y la tarea integradora fueron fundamentales para el cumplimiento de los objetivos. Sin embargo, el desarrollo de habilidades argumentativas y la creación de ensayos requieren de un proceso constante, lo que da cuenta de la necesidad de incluir en los currículos de los programas de educación superior la alfabetización académica.
... Según, la Universidad Católica de Oriente (1993), Camps y Dolz (1995), Tezinkievicz, Peralta y Santibañez (2018), Camps (1995), la argumentación escrita es exponer ideas razonadas para convencer y persuadir al lector sobre su postura o tesis planteada, para lo cual el emisor busca pruebas, como datos y hechos, además recurre a citas de autoridad, entre otros, para justificar la funcionalidad de la argumentación. Sin embargo, no basta con la argumentación, sino que también es necesario la contrargumentación, ya que esta permite adelantarse a las posibles objeciones que el destinatario podría hacer ante tal planteamiento. ...
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Este trabajo analiza las percepciones del estudiantado de bachillerato de la Unidad Educativa “Luis Fernando Ruiz” sobre el desarrollo de su argumentación en trabajos escritos. Es una investigación cualitativa, ya que aborda un hecho social, como es el conocimiento de los elementos de la argumentación escrita cuya aplicación es fundamental en los textos argumentativos. En cuanto al conocimeinto de los elementos de la argumentación escrita, los investigados desconocen: tesis, premisas, entimemas, contraargumentos, evidencias probatorias, cuerpo argumentativo y falacias. En cuanto a la aplicación de estos, se encuentra un alto procentaje que no aplica: planteamiento de premisas, conclusiones en textos argumentativos cortos; ni el planteamiento de la tesis, introducción, sustentación basada en datos y evidencias probatorias, y uso de los argumentos de autoridad en textos argumentativos largos. Sobre la aplicación de las propiedades textuales se encuentra que el mayor porcentaje de investigados no aplican las siguientes: coherencia, cohesión y adecuación a la situación comunicativa. Esto demuestra que los textos que producen los estudiantes investigados, son débilmente argumentativos.
... En esa secuencia, incluimos una serie de actividades disparadoras con el objetivo de introducir y, posteriormente, debatir en el aula el tema de la Reforma Penal Juvenil y la baja de edad de punibilidad/imputabilidad de los menores de edad en Argentina. Además, debemos tener en cuenta que esta secuencia didáctica supone la lectura de un corpus de textos argumentativos (Camps y Dolz, 1995), en el que se aborda la misma temática desde diferentes puntos de vista 12 . En la propuesta pedagógica que presentamos más adelante, proponemos un acercamiento al texto a partir de la identificación de los paratextos que pueden contribuir a la determinación del género discursivo (artículo de opinión) y del contexto enunciativo (medio gráfico, autor y fecha). ...
... No obstante, las investigaciones hacen evidente las dificultades en el desarrollo argumentativo de los estudiantes en todos los niveles educativos (Camps y Dolz, 1995;Crowell & Kuhn, 2014;Cruz y Carmona, 2014;Risco, 2018;Rodríguez y Valencia, 2013). Estas dificultades disminuyen sus posibilidades de inserción y participación en la sociedad actual, al no contar con las herramientas para diferir de la opinión de otra persona, anticipar el punto de vista que puede tener el interlocutor sobre un tema, juzgar y poner en entredicho la información que recibe, posicionarse de forma motivada ante un desacuerdo, comprender los diferentes puntos de Lo anterior no es ajeno al nivel universitario, pues los resultados de algunas investigaciones muestran las dificultades de los universitarios al construir textos y discursos académicos de orientación argumentativa. ...
... No obstante, las investigaciones hacen evidente las dificultades en el desarrollo argumentativo de los estudiantes en todos los niveles educativos (Camps y Dolz, 1995;Crowell & Kuhn, 2014;Cruz y Carmona, 2014;Risco, 2018;Rodríguez y Valencia, 2013). Estas dificultades disminuyen sus posibilidades de inserción y participación en la sociedad actual, al no contar con las herramientas para diferir de la opinión de otra persona, anticipar el punto de vista que puede tener el interlocutor sobre un tema, juzgar y poner en entredicho la información que recibe, posicionarse de forma motivada ante un desacuerdo, comprender los diferentes puntos de Lo anterior no es ajeno al nivel universitario, pues los resultados de algunas investigaciones muestran las dificultades de los universitarios al construir textos y discursos académicos de orientación argumentativa. ...
... No obstante, las investigaciones hacen evidente las dificultades en el desarrollo argumentativo de los estudiantes en todos los niveles educativos (Camps y Dolz, 1995;Crowell & Kuhn, 2014;Cruz y Carmona, 2014;Risco, 2018;Rodríguez y Valencia, 2013). Estas dificultades disminuyen sus posibilidades de inserción y participación en la sociedad actual, al no contar con las herramientas para diferir de la opinión de otra persona, anticipar el punto de vista que puede tener el interlocutor sobre un tema, juzgar y poner en entredicho la información que recibe, posicionarse de forma motivada ante un desacuerdo, comprender los diferentes puntos de Lo anterior no es ajeno al nivel universitario, pues los resultados de algunas investigaciones muestran las dificultades de los universitarios al construir textos y discursos académicos de orientación argumentativa. ...
Book
El objetivo fue analizar, críticamente, si la educación formal que ofrece el Estado peruano al pueblo Matsigenka en los departamentos de Cusco, Ayacucho y Madre de Dios está en clave de derechos humanos. Se utilizó la metodología de revisión bibliográfica. Uno de los resultados muestra que, en algunos casos, los padres de familia, estudiantes y líderes comunales no son incluidos en los procesos de toma de decisión, (tal como señala el Convenio 169 de la OIT), especialmente en los de formulación y ejecución de los programas de educación y en la enseñanza de la lectura y escritura en la lengua materna. Por otro lado, los padres de familia y líderes comunales perciben que algunos docentes de los primeros ciclos de la educación básica regular (1 y 2 grado de primaria) priorizan la enseñanza de la lengua materna. Una gran limitación de las ofertas de educación intercultural bilingüe, tanto para el pueblo Matsigenka como para las sociedades tradicionales de la Amazonia peruana en general, es que no surgen de una negociación consensuada entre oferta (procedente del Estado o las ONG), las expectativas (de los usuarios potenciales) y las demandas de la sociedad real (la comunidad).
... Debido a la complejidad que reviste la tipología textual argumentativa, se reconoce que para lograr un aprendizaje real y significativo es necesario apelar a la puesta en marcha de un plan didáctico que se centre en la apropiación de diversas herramientas lingüísticas. Así, se adhiere a lo planteado por los autores Camps & Dolz (1995), quienes enuncian al respecto: ...
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Este artículo tiene como objetivo mostrar los resultados de una investigación en la que se aplicó una secuencia didáctica que promueve la producción escrita argumentativa en estudiantes preuniversitarios. Dicho estudio se llevó a cabo en dos escuelas, una de población vulnerada y de régimen público y otra de gestión privada y de población no vulnerada. La secuencia implementada se elaboró considerando los aportes de diversas disciplinas que conciben el acto de escribir como un proceso cognitivo, social y afectivo, este es el caso del Análisis del Discurso (Maingueneau, 2005; van Dijk, 1997), la Lingüística Cognitiva (Cuenca y Hilferty, 1999), la Psicología Cognitiva (Vigotsky, 1979), la Psicolingüística (De Vega, Cuetos, 1999) y la Teoría de la Enunciación (Benveniste, 1985). El estudio se realizó a partir de una metodología de tipo descriptiva, interpretativa y cuasi experimental con la que se analizó cada texto a la luz de diferentes taxonomías que tienen en cuenta la explicitación o no de la tesis (Golder y Coirier, 1996), el tipo de argumento (Sánchez y Álvarez, 2011) y factores de cohesión y coherencia tanto a nivel local como global, así como la estructura tipológica (Parodi, 2000). Los resultados determinan un fortalecimiento sustancial de las habilidades argumentativas y de la producción textual en ambos grupos experimentales, mientras que los grupos control no sufrieron modificaciones relevantes. Algunas de las conclusiones a las que se arribó tienen que ver con la importancia de desterrar prácticas áulicas tradicionales y dedicar más tiempo a la enseñanza de las tipologías textuales.
Article
El presente artículo revisa el panorama actual de la investigación en argumentación infantil, sus perspectivas de análisis y evaluación, y los principales resultados que de ellas emergen. Cabe hacer notar cómo dichos estudios reflejan ciertas contradicciones- reales o aparentes-producto de una visión parcial del fenómeno argumentativo en sus dimensiones lógica, retórica o dialéctica, que se trasluce en sus resultados. Se propone analizar dichos datos desde una perspectiva teórica integral de la argumentación que permita visualizarlos de un modo complementario y no excluyente. Esta panorámica global evitaría la contradicción, explicitaría y delimitaría las habilidades argumentativas esperables en diversos rangos etarios infantiles y a nivel educativo permitiría comprender mejor la actuación argumentativa en edad infantil.
Research
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Bibliografía, actualizada periódicamente, sobre teoría de a argumentación en español.
Article
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Investigaciones previas muestran las repercusiones de la enseñanza temprana de la argumentación en, al menos, dos ámbitos: formación de ciudadanía y éxito académico. No obstante, el derecho a la enseñanza temprana de capacidades de lectura y escritura críticas se convierte en una desventaja para poblaciones que habitan en contextos rurales. El objetivo del artículo es mostrar el efecto de una secuencia didáctica basada en un género textual argumentativo en las producciones textuales de alumnos de telesecundaria. Como herramienta metodológica retomamos la secuencia didáctica basada en el género textual. Ésta ha sido utilizada en diferentes partes del mundo para la enseñanza de las lenguas. En lo que respecta al español, en México, se ha explorado su efectividad con géneros textuales que implican argumentar. Este trabajo muestra que los alumnos mejoraron la organización global y la cohesión textual en las producciones finales, así como el conocimiento del tema de discusión.
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