Revisión de evidencias científicas de la terapia cognitivo-conductual
... En segundo lugar, Gálvez (2009) en Colombia aplicó un estudio titulado "Revisión de evidencias científicas de la terapia cognitivo-conductual" similar al anterior, en donde mediante terapia cognitiva conductual en adultos a través de estudios de algunos patrones que se repetían en los efectos del acúfeno, emplearon diferentes métodos para desviar la atención del zumbido mediante la aplicación de sonidos leves de la naturaleza en ambientes controlados que disminuyeron los niveles de acúfeno en 60% de los pacientes tratados. Finalmente, Cima et al., (2012) en su estudio titulado "Specialised treatment based on cognitive behaviour therapy versus usual care for tinnitus: A randomised controlled trial" 7 en Estados Unidos. ...
... En segundo lugar, en lo referido a la caracterización del implante coclear, es importante acotar que este es uno de los tratamientos de mayor efectividad en la disminución del acúfeno, sin embargo, es una medida definitiva que implica la pérdida auditiva en el oído de forma obligada. Sus efectos beneficiosos han sido demostrados en la literatura por varios autores entre los que se destacan Alvo y Nazar (2010) en su estudio titulado "Aproximación inicial para el diagnóstico y manejo del paciente con acúfeno", Bonilla et al., (2015) y Gálvez (2009) en sus estudios mencionados anteriormente. En los cuales se afirman que el implante coclear unilateral tiene la potencialidad de beneficiar a pacientes con acúfeno bilaterales. ...
El presente artículo muestra una revisión sistemática de la literatura acerca de los tratamientos terapéuticos para el acúfeno en adultos que han tenido resultados positivos, tanto en estudios nacionales como internacionales. Por consiguiente, se realizó un estudio de tipo documental, en el cual se buscaron y consultaron documentos bibliográficos relacionados con el tema. Para ello se desarrollaron diversas etapas de recolección de información. En un primer momento, se hizo un rastreo en diversas bases de datos, consideradas fuentes primarias y secundarias en las cuales se ubicaron los 50 artículos relacionados con la temática a través de una estrategia de exploración
determinada. En un segundo momento se ejecutó la organización y descripción de los materiales encontrados para finalmente hacer la discusión de los hallazgos. Dado lo anterior, se establece que existen diversos tratamientos terapéuticos para el acúfeno, no obstante, no hay todavía un tratamiento contundente que pueda eliminar este síntoma
en un 100% de los pacientes. El uso de terapias de reentrenamiento continúa siendo un punto principal, sin embargo, estos se encuentran en proceso de mejora para establecer resultados de mayor avance en la disminución total de este síntoma. Las ciencias de la salud especializadas para este campo no han determinado terapias estándar que puedan
ser aplicadas en todos los casos de pacientes con acúfeno por la gran variedad de posibles etiologías que aún no son comprobadas. Por ende, los tratamientos terapéuticos disminuyen en un alto porcentaje los efectos del acúfeno en adultos, no obstante, requieren de mejoras.
... En segundo lugar, Gálvez (2009) en Colombia aplicó un estudio titulado "Revisión de evidencias científicas de la terapia cognitivo-conductual" similar al anterior, en donde mediante terapia cognitiva conductual en adultos a través de estudios de algunos patrones que se repetían en los efectos del acúfeno, emplearon diferentes métodos para desviar la atención del zumbido mediante la aplicación de sonidos leves de la naturaleza en ambientes controlados que disminuyeron los niveles de acúfeno en 60% de los pacientes tratados. Finalmente, Cima et al., (2012) en su estudio titulado "Specialised treatment based on cognitive behaviour therapy versus usual care for tinnitus: A randomised controlled trial" 7 en Estados Unidos. ...
... En segundo lugar, en lo referido a la caracterización del implante coclear, es importante acotar que este es uno de los tratamientos de mayor efectividad en la disminución del acúfeno, sin embargo, es una medida definitiva que implica la pérdida auditiva en el oído de forma obligada. Sus efectos beneficiosos han sido demostrados en la literatura por varios autores entre los que se destacan Alvo y Nazar (2010) en su estudio titulado "Aproximación inicial para el diagnóstico y manejo del paciente con acúfeno", Bonilla et al., (2015) y Gálvez (2009) en sus estudios mencionados anteriormente. En los cuales se afirman que el implante coclear unilateral tiene la potencialidad de beneficiar a pacientes con acúfeno bilaterales. ...
... En segundo lugar, Gálvez (2009) en Colombia aplicó un estudio titulado "Revisión de evidencias científicas de la terapia cognitivo-conductual" similar al anterior, en donde mediante terapia cognitiva conductual en adultos a través de estudios de algunos patrones que se repetían en los efectos del acúfeno, emplearon diferentes métodos para desviar la atención del zumbido mediante la aplicación de sonidos leves de la naturaleza en ambientes controlados que disminuyeron los niveles de acúfeno en 60% de los pacientes tratados. Finalmente, Cima et al., (2012) en su estudio titulado "Specialised treatment based on cognitive behaviour therapy versus usual care for tinnitus: A randomised controlled trial" 7 en Estados Unidos. ...
... En segundo lugar, en lo referido a la caracterización del implante coclear, es importante acotar que este es uno de los tratamientos de mayor efectividad en la disminución del acúfeno, sin embargo, es una medida definitiva que implica la pérdida auditiva en el oído de forma obligada. Sus efectos beneficiosos han sido demostrados en la literatura por varios autores entre los que se destacan Alvo y Nazar (2010) en su estudio titulado "Aproximación inicial para el diagnóstico y manejo del paciente con acúfeno", Bonilla et al., (2015) y Gálvez (2009) en sus estudios mencionados anteriormente. En los cuales se afirman que el implante coclear unilateral tiene la potencialidad de beneficiar a pacientes con acúfeno bilaterales. ...
... En segundo lugar, Gálvez (2009) en Colombia aplicó un estudio titulado "Revisión de evidencias científicas de la terapia cognitivo-conductual" similar al anterior, en donde mediante terapia cognitiva conductual en adultos a través de estudios de algunos patrones que se repetían en los efectos del acúfeno, emplearon diferentes métodos para desviar la atención del zumbido mediante la aplicación de sonidos leves de la naturaleza en ambientes controlados que disminuyeron los niveles de acúfeno en 60% de los pacientes tratados. Finalmente, Cima et al., (2012) en su estudio titulado "Specialised treatment based on cognitive behaviour therapy versus usual care for tinnitus: A randomised controlled trial" 7 en Estados Unidos. ...
... En segundo lugar, en lo referido a la caracterización del implante coclear, es importante acotar que este es uno de los tratamientos de mayor efectividad en la disminución del acúfeno, sin embargo, es una medida definitiva que implica la pérdida auditiva en el oído de forma obligada. Sus efectos beneficiosos han sido demostrados en la literatura por varios autores entre los que se destacan Alvo y Nazar (2010) en su estudio titulado "Aproximación inicial para el diagnóstico y manejo del paciente con acúfeno", Bonilla et al., (2015) y Gálvez (2009) en sus estudios mencionados anteriormente. En los cuales se afirman que el implante coclear unilateral tiene la potencialidad de beneficiar a pacientes con acúfeno bilaterales. ...
... Las creencias racionales, son probabilidades o deseos futuros, interpretados silábica y mentalmente con mensajes del tipo querría, me gustaría, etc. Las creencias irracionales, se tratan de órdenes, expresadas en lenguaje dogmático de tipo debo, tengo que, etc. Los pensamientos irracionales generan en el ser humano exigencias absolutas llamadas distorsiones cognitivas (Gálvez, 2009). Las distorsiones cognitivas son errores que se producen en el ser humano al tener pensamientos inconscientes no ajustables al entorno que lo rodea. ...
Esta investigación se centra en el modo en que influyen las distorsiones cognitivas en nuestras emociones cotidianas y cómo dichas emociones, cuando son de sesgo negativo, pueden ser eliminadas y sustituidas por parte del alumnado, por otro tipo de pensamientos positivos que aumenten su confianza de cara a una futura actuación musical delante de un público. El objetivo es, por tanto, aumentar la confianza y la motivación del estudiante de Bachillerato de cara a una actuación en público, haciéndole ver que emociones negativas como la vergüenza se producen de forma inconsciente en todas las personas y que estas pueden disminuir la calidad de nuestra interpretación o actuación si se piensan de manera consciente y repetitiva. La metodología que vamos a desarrollar es de tipo descriptiva en la que expondremos a nuestros alumnos diferentes conocimientos sobre ansiedad escénica, para que intenten evitarla. Los resultados aportan claves didácticas y propuestas que pueden favorecer un descenso de la aparición de esta, si ya se ha producido. Como conclusión final, de muestra cómo el estudiante que tiene una futura actuación pública, ya sea un concierto o un musical, en el caso de alumnos de Bachillerato, son susceptibles de tomar sus propias decisiones, y sobre todo pensamientos, reducir su preocupación de cara a dicha interpretación, enfrentándose y disminuyendo la ansiedad escénica si ya se ha producido, aumentando al mismo modo su motivación y confianza.
... Respecto al primer punto, ambas intervenciones fueron grupales. Tanto la TCC (Gálvez, 2009) y ACT (Murrell y Scherbarth, 2006), han reportado diversos estudios desde la intervención psicoterapéutica individual logrando cambios efectivos, pero también han sido adaptadas a trabajarse en grupos. De acuerdo con Hayes et al. (2006) se han registrado aproximadamente 20 ensayos controlados aleatorios evaluando los resultados de ACT; a pesar de que los tamaños de muestra son relativamente pequeños, los resultados han sido en general favorables, además la ACT también ha sido evaluada en una variedad de formatos diferentes, incluyendo terapia individual, la terapia de grupo, formatos breves de taller/grupo y sistemas de autoayuda (Mandil, 2016). ...
El presente estudio tuvo como objetivo conocer el efecto de un taller de asertividad enfocado desde la terapia de aceptación y compromiso (ACT) dirigido a padres de familia en lograr el cambio de la conducta agresiva de sus hijos en comparación de una intervención estándar Cognitivo- Conductual (TCC), es decir, averiguar si es más eficaz una intervención desde la ACT o un tratamiento estándar Cognitivo-conductual, desde un punto de vista del análisis estadístico así como su relevancia clínica. La población experimental constó de 15 padres de familia, dividido en tres grupos: control, grupo experimental ACT y TCC. Se usó un diseño experimental A-B univariable multicondicional multigrupo. En el taller de ACT, se planteó un entrenamiento a los padres sobre cómo manejar el comportamiento infantil a través de pautas en asertividad bajo el modelo terapéutico contextual, a lo largo de sesiones planificadas bajo los tres componentes básicos de esta intervención: aceptación, valores y distanciamiento. Los resultados mostraron que los sujetos que recibieron el taller ACT modificaron comportamientos inadecuados, sin embargo no se hallaron diferencias significativas entre el grupo TCC y ACT.
... Dins aquestes propostes, s'inclou la teràpia cognitiu-conductual que, segons manifesten Hawton, Salkovskis, Kira i Clark (1989; com es va citar en Lega, Caballo i Ellis, 1997), s'inicia amb les idees propostes per Lang sobre els tres sistemes de respostes relativament independents −sistemes emocional, cognitiu, i motor−, la qual cosa va aplanar el camí cap a l'acceptació de les nocions cognitives dins l'enfocament conductual. Així, l'enfocament cognitiu-conductual, després de realitzar una revisió d'evidències científiques sobre aquest tipus de teràpia, es va topar amb l'existència de nombrosos estudis que presenten un grau màxim d'eficàcia en les seues intervencions front als problemes psicològics (Gálvez, 2009). ...
La terapia cognitivo conductual surge del modelo teórico del aprendizaje y aunque su campo de aplicación es amplio, su utilidad en el tratamiento de trastornos psicológicos derivados de la perturbación emocional por celos ha demostrado ser efectiva. Objetivo: Investigar acerca de la efectividad de la TCC en el tratamiento de la celotipia en privados de libertad por maltrato intrafamiliar. Método: Revisión bibliográfica sistemática y analítica. Resultados: Se analizó las características generales de este trastorno, así como los factores desencadenantes del problema y su vinculación con el comportamiento relacionado a la celopatía y maltrato intrafamiliar. La información obtenida, demuestra la complejidad del abordaje de la celotipia, así como la dificultad en cuanto a su identificación. Es importante tener en cuenta que las propuestas de tratamiento citadas abordan casos específicos, de manera que son particulares y aportan a una parte de la comprensión de la problemática, no quedando descartado el tratamiento farmacológico. Conclusiones: De forma particular se puede decir que, la aplicación de la Terapia cognitivo conductual en personas privadas de la libertad por celopatía y maltrato intrafamiliar parece facilitar la mejora en los síntomas de celopatía, medidos por los resultados obtenidos a partir de varias investigaciones a nivel clínico psicológico, pues éste es trastorno que tradicionalmente se ha visto como difícil de tratar y el cambio suscitado en los pacientes se atribuye a la terapia.
We conducted a systematic review and meta-analysis of randomised and quasi-randomised controlled trials evaluating all clinically relevant pharmacological interventions for the prevention of relapse in people with bipolar disorder. Thirty-four trials were included in the review. Direct comparisons with placebo and with lithium were available for most drugs. In addition, there were direct comparisons of valproate vs. olanzapine, imipramine vs. lithium plus imipramine, olanzapine plus mood stabilisers vs. mood stabilisers and perphenazine plus mood stabilisers vs. mood stabilisers. Methodological quality varied across studies and the strength of evidence was not equal for all treatments or for all comparisons. There is evidence from placebo-controlled trials for the efficacy of lithium, valproate and lamotrigine as maintenance therapy for the prevention of relapse in bipolar disorder. Three drugs have a significant effect in the prevention of manic relapses (lithium, olanzapine and aripiprazole) and three in the prevention of depressive symptoms (valproate, lamotrigine and imipramine). Imipramine is little used in practice, because of concern about adverse effects. The significant effects of olanzapine and aripiprazole were demonstrated in selected responsive bipolar I patients only. Despite widespread use in clinical practice, there is little evidence to support the efficacy of combination therapy.
A growing number of studies have tested the efficacy of preventive interventions in reducing the incidence of depressive disorders. Until now, no meta-analysis has integrated the results of these studies.
The authors conducted a meta-analysis. After a comprehensive literature search, 19 studies were identified that met inclusion criteria. The studies had to be randomized controlled studies in which the incidence of depressive disorders (based on diagnostic criteria) in an experimental group could be compared with that of a control group.
The mean incidence rate ratio was 0.78, indicating a reduction of the incidence of depressive disorders by 22% in experimental compared with control groups. Heterogeneity was low to moderate (I(2)=33%). The number needed to treat to prevent one case of depressive disorder was 22. Moderator analyses revealed no systematic differences between target populations or types of prevention (universal, selective, or indicated). The data included indications that prevention based on interpersonal psychotherapy may be more effective than prevention based on cognitive-behavioral therapy.
Prevention of new cases of depressive disorders does seem to be possible. Prevention may become an important way, in addition to treatment, to reduce the enormous public health burden of depression in the coming years.
Cognitive therapy (CT) has been studied in 78 controlled clinical trials from 1977 to 1996.
The meta-analysis used Hedges and Olkin d+ and included 48 high-quality controlled trials. The 2765 patients presented non-psychotic and non-bipolar major depression, or dysthymia of mild to moderate severity.
At post-test CT appeared significantly better than waiting-list, antidepressants (P < 0.0001) and a group of miscellaneous therapies (P < 0.01). But, CT was equal to behaviour therapy. As between-trial homogeneity was not met, the comparisons of CT with waiting-list or placebo, and other therapies should be taken cautiously. In contrast, between-trial homogeneity was high for the comparisons of CT with behaviour therapy and antidepressants. A review of eight follow-up studies comparing CT with antidepressants suggested that CT may prevent relapses in the long-term, while relapse rate is high with antidepressants in naturalistic studies.
CT is effective in patients with mild or moderate depression.
To determine whether cognitive behaviour therapy is an effective treatment for childhood and adolescent depressive disorder.
Systematic review of six randomised trials comparing the efficacy of cognitive behaviour therapy with inactive interventions in subjects aged 8 to 19 years with depressive disorder.
Remission from depressive disorder.
The rate of remission from depressive disorder was higher in the therapy group (129/208; 62%) than in the comparison group (61/168; 36%). The pooled odds ratio was 3.2 (95% confidence interval 1.9 to 5.2), suggesting a significant benefit of active treatment. Most studies, however, were based on relatively mild cases of depression and were of only moderate quality.
Cognitive behaviour therapy may be of benefit for depressive disorder of moderate severity in children and adolescents. It cannot, however, yet be recommended for severe depression. Definitive large trials will be required to determine whether the results of this systematic review are reliable.
Childhood social anxiety is associated with significant social and academic impairment. The purpose of this study was to compare and contrast the efficacy of two major treatments for social anxiety disorders in children: cognitive-behavioral therapy and selective serotonin reuptake inhibitor (SSRI) drug treatment. Treatment studies in the literature were evaluated using meta-analytic techniques to compare pre- and post-treatment measures of social anxiety symptoms, general anxiousness, social competency, and impairment. Results indicate that the core symptoms of social anxiety and impairment were reduced by both cognitive-behavioral treatment (ES=0.86 and 1.56) and SSRI treatment (ES=1.30 and 2.29), respectively. Similarly, peripheral symptoms of general anxiousness were reduced by both cognitive-behavioral treatment (ES=0.75) and SSRI treatment (ES=1.29). Finally, both cognitive-behavioral (ES=0.68) and SSRI treatment (ES=0.68) resulted in moderate improvements in social competence. Implications and the limitations of these meta-analytic findings are discussed with respect to the evidence-based intervention movement. Depression and Anxiety 0:1–12, 2007. © 2007 Wiley-Liss, Inc.
Reports an error in "Specificity of treatment effects: Cognitive therapy and relaxation for generalized anxiety and panic disorders" by Jedidiah Siev and Dianne L. Chambless (Journal of Consulting and Clinical Psychology, 2007[Aug], Vol 75[4], 513-522). The individual measures were not listed in the domains labeled "Panic" and "Cognitive" for the Ost and Westling (1995) citation in Table 3. The corrected table is included, with the added text appearing in bold font. (The following abstract of the original article appeared in record 2007-11558-001.) The aim of this study was to address claims that among bona fide treatments no one is more efficacious than another by comparing the relative efficacy of cognitive therapy (CT) and relaxation therapy (RT) in the treatment of generalized anxiety disorder (GAD) and panic disorder without agoraphobia (PD). Two fixed-effects meta-analyses were conducted, for GAD and PD separately, to review the treatment outcome literature directly comparing CT with RT in the treatment of those disorders. For GAD, CT and RT were equivalent. For PD, CT, which included interoceptive exposure, outperformed RT on all panic-related measures, as well as on indices of clinically significant change. There is ample evidence that both CT and RT qualify as bona fide treatments for GAD and PD, for which they are efficacious and intended to be so. Therefore, the finding that CT and RT do not differ in the treatment of GAD, but do for PD, is evidence for the specificity of treatment to disorder, even for 2 treatments within a CBT class, and 2 disorders within an anxiety class. (PsycINFO Database Record (c) 2008 APA, all rights reserved).
The primary aim of this study was to investigate which treatment, patient, and study characteristics are related to treatment outcome in tension headache. Literature on the subject was obtained by searching for articles published in English through CD-rom Compact Cambridge and PSYCHLIT (1970/1993) on the subjects of headache and tension or muscle contraction in combination with therapy or treatment. Inclusion criteria were prospective design, tension headache, > or = five subjects per condition; pre- and posttreatment scores available, subjects older than 16 years. Each article was independently reviewed and its data encoded by the two authors. Finally, 78 articles with 175 treated and nontreated conditions (total of 2,866 patients) were selected for this study. Meta-analysis revealed that cognitive therapy, relaxation, or electromyelographic (EMG) biofeedback alone or in combination with relaxation were superior to no treatment and to pseudo/placebo therapy. Pharmacological and other therapies were better than no treatment. However, restricting the analyses to studies using a headache diary, the results of pharmacological therapy were comparable to those of placebo therapy. Moreover, a better treatment outcome was found in studies with a relatively short duration of headache complaints (r = -0.31) and with a relatively younger patient sample (r = -0.22). The year of publication was negatively related with improvement (r = -0.36). No relationship between treatment outcome and other treatment characteristics (duration, transfer of treatment), patient characteristics (gender, method of patient recruitment), and study characteristics (internal validity of the study, criteria for diagnosing tension headache, number of patients, drop-outs) was found. These findings suggest that treatment outcome may be affected more by patient characteristics than by treatment characteristics. Finally, some practical and research implications of these findings are discussed.
Outcome studies support the effectiveness of cognitive-behavioral approaches for treating depression among adults. The effectiveness of these approaches for adolescents, however, has received less empirical attention. This article critically reviews the literature on cognitive-behavioral therapy with depressed and dysphoric adolescents.
A meta-analysis was conducted to assess the effectiveness of these approaches and the stability of therapeutic gains.
Fourteen posttreatment-control comparisons and 10 follow-up-control comparisons resulted from six studies containing 217 subjects. The overall effect size posttreatment was -1.02, whereas the overall effect size at follow-up was -0.61. The effect sizes in both of these analyses were homogeneous and were supported by Fail-Safe-N calculations.
Results suggest the short- and long-term effectiveness of cognitive-behavioral approaches for treating depressive symptoms with this population.