1. Introducción La coyuntura actual en nuestro quehacer universitario y la preocupación constante por la adecuación de nuestro trabajo a las necesidades formativas actuales, nos ha llevado a trabajar a favor del cambio estructural y metodológico que se plantea en el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES). Nuestros esfuerzos se han centrado en preparar tareas que se pudieran enmarcar en el módulo denominado "Sociedad, Familia y Escuela" perteneciente al título de grado de Magisterio, que se comenzará a impartir durante el curso 2010/11 en la Universidad de Sevilla. En este artículo realizamos, en primer lugar, una exposición del planteamiento teórico del que parte nuestro trabajo, teniendo en cuenta el contexto social, político y económico en el que nos encontramos actualmente. Posteriormente, presentamos una serie de tareas que hemos diseñado e implementado durante dos cuatrimestres, y evaluado en el marco de nuestros actuales planes de estudio, en las asignaturas que en estos momentos impartimos. Hacemos hincapié en las tareas propuestas en las metodologías de tipo interdisciplinar y de aprendizaje funcional, y utilizando las TIC como recurso de aprendizaje y comunicación en el trabajo colaborativo. La experiencia nos invita y nos exige actuar de manera que los conocimientos no queden como compartimentos estancos, aislados y separados. La propuesta de trabajar interdisciplinarmente tiene dos dimensiones. Por una parte, la colaboración entre profesores de distintas disciplinas contribuye a crear un conocimiento más enriquecedor. Y por otro lado, el alumno interioriza que todos los aprendizajes realizados están interconectados y tienen relación entre sí. Es decir, favorece un proceso de enseñanza y aprendizaje holístico, sobre otros más fragmentarios. Por otro lado, acentuamos, en las cuatro propuestas, el carácter colaborativo. Percibimos la dificultad con la que se encuentran muchos de nuestros a alumnos a la hora de trabajar en equipo y, especialmente por ello, consideramos imprescindible fomentar este tipo de competencia. La influencia que ejerce la dimensión colaborativa en el trabajo que llevamos a cabo incide en varios aspectos: ayuda a producir conexiones cognitivas, es decir, a relacionar contenidos que pueden aportar unos y otros; y también repercute en la mejora del aprendizaje a través de conexiones sociales (Barkley, Cross y Howell, 2007).