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¿Es real o ilusorio el crecimiento personal como consecuencia de afrontar un cáncer?

Authors:

Abstract

E n el estudio del impacto vital del cáncer, como en otras situaciones extremas, se ha enfatizado la pre-sencia de malestar emocional y psicopa-tología asociada, en detrimento del estudio de los cambios positivos que informan las personas que afrontan una enfermedad grave. El auge y creciente interés en lo que se ha llamado Psicolo-gía Positiva, debería ayudar a unir e integrar en un mismo foco de estudio los aspectos de daño y sufrimiento (malestar emocional, sintomatología de estrés postraumático, etc.) y crecimien-to (cambios positivos, crecimiento postraumático, etc.) el conocimiento de estos fenómenos desde un mismo marco de experiencia humana. Los denominados cambios positivos asociados a la experiencia traumática se han conceptualizado principalmente, pero no únicamente, como Crecimiento Postraumático (CPT). Así el CPT, más allá de conceptos como optimismo, re-sistencia, resiliencia o similares, haría referencia al cambio positivo que un individuo experimenta como resultado del proceso de lucha, no del hecho en sí, que emprende a partir de la vivencia de un suceso traumático (Tedeschi & Calhoun, 1995). El interés del trabajo de revisión reali-zado, y que aquí se refiere, se focaliza en los aspectos controvertidos de los cambios positivos (como el CPT) ex-presados por las personas que han supe-rado un cáncer: ¿En qué se diferencia el cáncer de otras experiencias extremas o traumáticas? ¿Hay una experiencia de crecimiento distinta en cáncer? ¿En qué medida el Crecimiento Postraumá-tico se asocia a menor malestar o mayor bienestar psicológico en la en-fermedad? En relación con todo lo ante-rior, la pregunta que sintetiza el espíritu de todo el trabajo: ¿El crecimiento en cáncer es una realidad o una ilusión? En cuanto a la primera pregunta, en la revisión que se indica se identificaron las siguientes diferencias entre el cáncer y otros estresores, generalmente de na-turaleza más aguda, qué tiene importan-tes consecuencias para su abordaje. Primero, en cáncer la naturaleza del es-tresor no es única y discreta, sino que es múltiple. De ahí la dificultad para el afectado de identificar un sólo estresor-cáncer. Segundo, la fuente origen del estresor no es externa (como catástrofes naturales, accidentes de coche…) sino interna (el propio cuerpo). Tercero, el malestar y temores del afectado se diri-gen hacia el futuro. De alguna forma, los temores que se actualizan, o se ha-cen presentes, no son los del evento
INVESTIGACIÓN
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E
n el estudio del impacto vital del
cáncer, como en otras situaciones
extremas, se ha enfatizado la pre-
sencia de malestar emocional y psicopa-
tología asociada, en detrimento del
estudio de los cambios positivos que
informan las personas que afrontan una
enfermedad grave. El auge y creciente
interés en lo que se ha llamado Psicolo-
gía Positiva, debería ayudar a unir e
integrar en un mismo foco de estudio
los aspectos de daño y sufrimiento
(malestar emocional, sintomatología de
estrés postraumático, etc.) y crecimien-
to (cambios positivos, crecimiento
postraumático, etc.) el conocimiento de
estos fenómenos desde un mismo marco
de experiencia humana.
Los denominados cambios positivos
asociados a la experiencia traumática se
han conceptualizado principalmente,
pero no únicamente, como Crecimiento
Postraumático (CPT). Así el CPT, más
allá de conceptos como optimismo, re-
sistencia, resiliencia o similares, haría
referencia al cambio positivo que un
individuo experimenta como resultado
del proceso de lucha, no del hecho en
sí, que emprende a partir de la vivencia
de un suceso traumático (Tedeschi &
Calhoun, 1995).
El interés del trabajo de revisión reali-
zado, y que aquí se refiere, se focaliza
en los aspectos controvertidos de los
cambios positivos (como el CPT) ex-
presados por las personas que han supe-
rado un cáncer: ¿En qué se diferencia el
cáncer de otras experiencias extremas o
traumáticas? ¿Hay una experiencia de
crecimiento distinta en cáncer? ¿En
qué medida el Crecimiento Postraumá-
tico se asocia a menor malestar o
mayor bienestar psicológico en la en-
fermedad? En relación con todo lo ante-
rior, la pregunta que sintetiza el
espíritu de todo el trabajo: ¿El
crecimiento en cáncer es una realidad o
una ilusión?
En cuanto a la primera pregunta, en la
revisión que se indica se identificaron
las siguientes diferencias entre el cáncer
y otros estresores, generalmente de na-
turaleza más aguda, qué tiene importan-
tes consecuencias para su abordaje.
Primero, en cáncer la naturaleza del es-
tresor no es única y discreta, sino que es
múltiple. De ahí la dificultad para el
afectado de identificar un sólo estresor-
cáncer. Segundo, la fuente origen del
estresor no es externa (como catástrofes
naturales, accidentes de coche…) sino
interna (el propio cuerpo). Tercero, el
malestar y temores del afectado se diri-
gen hacia el futuro. De alguna forma,
los temores que se actualizan, o se ha-
cen presentes, no son los del evento
¿Es real o ilusorio el crecimiento personal como
consecuencia de afrontar un cáncer?
Enric C. Sumalla
1, 2
, Cristian Ochoa
2
e Ignacio Blanco
2
1
Fundación de Gastroenterología Dr. Francisco Vilardell (Barcelona)
2
Hospital Duran i Reinals (Barcelona)
Enric C. Sumalla es Especialista en Psicología Clínica. Licenciado en Historia. Becado por la “Fundación Privada de Gastroenterología Dr. Vilardell” en
un proyecto de investigación sobre la generación de identidad de superviviente y fenómenos de crecimiento postraumático en la Unidad de Consejo Genéti-
co del Instituto Catalán de Oncología.
Cristian Ochoa Arnedo es Especialista en Psicología Clínica, adjunto a la Unidad de Psico-Ontología del Hospital Duran i Reynals del Institut Català
d’Oncologia. Su labor asistencial abarca todo el proceso oncológico en pacientes ambulatorios y hospitalizados. Las principales líneas de investigación que
lleva a cabo se centran en los efectos positivos de intervenciones psicoterapéuticas grupales y el estudio del trauma, recuperación y crecimiento personal en
la generación de la identidad del superviviente en cáncer. Es docente en diversos posgrados y masters en el ámbito oncológico.
Ignacio Blanco es Doctor en Medicina y Cirugía, especialista en Cirugía General y Digestiva, y Genetista Clínico acreditado por la Asociación Española
de Genética Humana. En la actualidad, es el Director del Programa de Consejo Genético en Cáncer del Instituto Catalán de Oncología. Su labor asistencial
se centra en la identificación y seguimiento de individuos y familias con predisposición hereditaria al cáncer. Las principales líneas de investigación se cen-
tran en la identificación de las bases moleculares del cáncer hereditario y en el estudio del impacto emocional del consejo genético en cáncer. A nivel do-
cente, es profesor asociado en el departamento de Patología y Terapéutica experimental de la Universidad de Barcelona.
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traumático pasado (p. ej., el diagnóstico
de cáncer), sino los que se imaginan po-
drán llegar (p. ej., dolor, pérdida auto-
nomía, y en definitiva, la muerte).
Cuarto, no hay un origen y final delimi-
tado del estresor y la amenaza puede
sentirse de forma permanente y cons-
tante. Por último, en líneas generales en
cáncer hay una mayor capacidad de
control percibida en torno al papel del
afectado en los tratamientos, seguimien-
tos y actividades preventivas a realizar,
comparado con otros eventos más agu-
dos.
El elemento nuclear de esta revisión
reside en plantear que la principal dife-
rencia entre los modelos y teorías sobre
el crecimiento en la adversidad está en
si éste se considera real o ilusorio. Rea-
lidad o ilusión en cuanto a si la gente
realiza un cambio identitario positivo o
no a raíz, por ejemplo, de afrontar un
cáncer. El artículo recoge los argumen-
tos, en forma de teorías y evidencias en-
contradas al respecto, centrando la
discusión en el caso del cáncer. Algu-
nos argumentos a favor de que se consi-
dere real el crecimiento serían que se
acompañe de conductas observables (p.
ej., cambio de hábitos de salud), que se
experimenten cambios positivos tam-
bién en las personas cercanas al afecta-
do (p. ej., familiares), o que estas
personas cercanas confirmen estos cam-
bios en el afectado.
Los argumentos que consideran iluso-
rio el crecimiento se basan en varios
sesgos de autoensalzamiento (p. ej., “Yo
soy mejor persona -o más fuerte- que
antes” o “yo soy -o estoy- mejor que
otros afectados, que están peor que
yo”) que se han observado en pacientes
de cáncer y que se han planteado como
mecanismos de defensa ante la pérdida
de sentido, coherencia, control y autoes-
tima de la propia identidad que genera
la enfermedad. Un sesgo propuesto,
muy interesante, es el de las personas
que tras el cáncer negativizan el re-
cuerdo de todo su pasado anterior a la
enfermedad, generando así la sensación
de que tras la misma están mejor que
antes.
En cuanto a la relación entre creci-
miento y bienestar emocional (o
reducción del malestar) en cáncer los
resultados son poco concluyentes, ya
que aunque se ha encontrado cierta aso-
ciación (es decir, el crecimiento reduce
el malestar emocional), también hay es-
tudios que han mostrado que no tienen
relación, e incluso uno que indica que el
crecimiento se asocia a malestar. La
asociación del crecimiento con el bie-
nestar en cáncer es un argumento espe-
cialmente importante que se ha
utilizado tanto por los defensores del
crecimiento como realidad, como por
los de ilusión. Real porque plantean que
“sería imposible crecer sino es a través
del sufrimiento (malestar), por eso es
normal que crecer y sufrir se den simul-
táneamente”, e ilusorio porque “crecer
debería llevarnos a mejores estados de
funcionamiento personal y de bienestar,
y sino es así, el crecimiento sería iluso-
rio”.
¿Qué utilidad práctica puede tener el
estudio de los cambios positivos, como
el crecimiento, en cáncer? Tendría mu-
cho valor saber si podemos distinguir
qué cambios positivos (tanto ilusorios
como reales) son los que se asocian con
mayor bienestar y supervivencia en cán-
cer. Por ejemplo, qué es más adaptati-
vo: sentirse más fuerte, o con mayor
espiritualidad, realizar cambios en hábi-
tos de salud, o lograr mayor cercanía y
sintonía con tus relaciones interpersona-
les tras la enfermedad. Nuestro grupo
trabaja en una guía de detección de cre-
cimiento en cáncer, donde, además de
los elementos de cambio que se anali-
zan en la revisión presentada, también
se incluyen otros de regulación emocio-
nal y existencial. De forma paralela, se
está implantando un protocolo psicote-
rapéutico de intervención grupal con su-
pervivientes de cáncer que añade a los
protocolos más clásicos en Psico-onco-
logía (soporte-expresivo-existencial) las
propuestas basadas en la Psicología Po-
sitiva Aplicada (Vázquez y Hervás,
2008).
REFERENCIAS
Tedeschi, R. G. y calhoun, L. G. (1995). Trauma and transformation: Growing in the aftermath of
suffering. Thousand Aks: Sage Publications.
Vázquez, C. y Hervás, G. (2008). Psicología Positiva Aplicada. Bilbao: Desclée de Brouwer.
El artículo original puede encon-
trarse en la revista Clinical Psycho-
logical Review: Sumalla, E. C.,
Ochoa, C., y Blanco, I. (2009). Post-
traumatic growth in cancer: Reality
or illusion? Clinical Psychology Re-
view, 29, 24-33.
... Crítica que se dirige a la "corriente del Pink Ribbon" (lazo rosa) porque, implícitamente, carga a las enfermas de cáncer de mama con una sobreexigencia de resiliencia (por ser valerosas supervivientes), invitándolas a ocultar o a disimular sus emociones negativas (tristeza, ansiedad, miedo, rabia, soledad, envidia, culpa o vergüenza) consideradas exponentes de debilidad o de duelos patológicos. En otro trabajo (Sumalla, 2013b), se plantea incluso si el CPT es real o ilusorio en el cáncer, pues no se puede determinar qué parte de los presuntos cambios positivos experimentados por los pacientes se asocian a procesos genuinos de crecimiento personal y qué parte a otros factores o variables extrañas. Se preguntan: ¿si existe un genuino CPT, debe éste reducir el sufrimiento o mantener el sufrimiento y trascenderlo? ...
Article
Considering the abundant literature specifically on the subject, what point can there be in writing yet another study that analyses the consequences of the mastectomy in women who have either been diagnosed with breast cancer previously or have a well-founded, genetics based fear of developing it at some point in the future due to the precedents in their family? In this paper, we review some notable studies on the psychological impact of the mastectomy (whether as a form of secondary prevention against cancer or as a prophylactic measure) compared to what is known as “conservative surgery” (lumpectomy), in order to value the consensus or the dissent among the researchers. Our hypothesis is that a change of tendency has taken place in the patients with breast cancer in their perspective of the mastectomy, coinciding with the turn of the century (and the millennium), perhaps due to the widespread practice of mammary reconstructive surgery after the resection, which mitigates the trauma (imaginary, symbolic and physical) of the amputation without reconstruction.
Article
We hope that we have presented information in a way that is accessible to clinicians, laypersons, and . . . other people who have experienced trauma. We have also tried to summarize a far-flung literature and describe a way of understanding the process of growth that will encourage more attention from researchers. In addition, we believe that this book can be used as a supplementary text in courses on human development, crisis intervention, and introductory courses in counseling and psychotherapy. It is also our hope that this book will be useful as a resource for helping professionals in a variety of disciplines, including psychology, social work, psychiatry, family counseling, human services, nursing, and sociology. (PsycINFO Database Record (c) 2012 APA, all rights reserved)